El fundador y director del evento, en conversación con Diario Concepción se refirió a los 10 años de esta iniciativa, fecha y anuncio de su cartel 2025, proyecciones y mucho más.
Recientemente, la Bodeguita de Nicanor fue el escenario donde se dieron a conocer los resultados que tuvo la novena edición del Festival REC, además de confirmar la fecha de este evento para el 2025, la cual será el 15 y 16 de marzo celebrando lo que será a su vez su primera década de vida.
Ocasión en que su fundador y director general, desde que el Teatro Biobío tomó las riendas de su organización, Manuel Lagos, conversó con Diario Concepción y entregó detalles de cuándo se dará a conocer los artistas y bandas para tan importante efeméride, los desafíos de armar una parrilla cada vez diferente, el camino sonoro o estilístico musical que ha ido tomando el evento con el tiempo, entre otras cosas.
¿Cuándo se anunciaría la parrilla del REC 2025?
– No es algo tan fácil, es un proceso de programación que recién estamos empezando. Para poder tener bandas internacionales, nacionales y regionales es necesario tener recursos, y todavía estamos en ello. El tener ‘caja’ para aquello. Afortunadamente, sabemos que el festival tiene recursos, pero necesitamos liquidez. Todavía no podemos cerrar ese proceso, creemos que tiene que ser antes que termine el año. O sea, estamos aún con más tiempo de los anuncios realizados en las últimas dos ediciones, pero tenemos como fecha límite el 15 de diciembre, esperamos que sea antes.
Igual se avanzó en la versión anterior en ese sentido, o sea, de artistas que querían estar en la última versión del festival, pero por tema de agenda no se logró…
– Sí, por supuesto, tenemos compromisos y ganas de que eso ocurra. Muchas veces, las ganas pueden venir de los dos lados, pero las agendas no coinciden. Nuestro deber es siempre pensar en el público y pensar en una parrilla balanceada. Que tenga diferentes estilos musicales, pero por sobre todo refleje una audiencia transversal. Tenemos un público de poco más de 30 años en promedio, entonces no es una audiencia adolescente, y es una cantidad grande de personas, lo que significa también que es un público familiar. Además, siendo un festival gratuito es igualmente una responsabilidad, no sólo debemos dejar conformes y contentos a los jóvenes, que escuchan las cosas que están hoy de moda, sino también al público familiar que va con sus hijos e hijas. Un gran desafío en el que estamos trabajando.
¿Y el cambio de estilo que ha ido teniendo con los años el evento? O sea ¿De pasar de REC Rock en Conce a sólo Festival REC?
– En sus inicios, lo digo con conocimiento de causa, tuvo la necesidad de encontrar y unir al mundo del rock y el pop, pero eso creció de forma increíble, y hoy en día es un evento que va más allá de sólo esos estilos. Es un festival de música. Queremos siempre que sea un festival de buena música y si es que el REC, esa marca representa aquello, bienvenido que se llama así a secas.
¿Es inevitable que con tantos años de recorrido se repitan algunos grupos y bandas entonces? ¿Es complejo el no repetirse?
– Por supuesto, nosotros tenemos un deber popular y masivo. No somos un festival de nicho, por algo en la última edición llegaron más de 250 mil personas al Parque Bicentenario. En ese sentido, si nosotros forzamos a no repetir artistas, la industria chilena no sostiene esa posibilidad. Si tuviéramos sólo artistas en desarrollo o emergentes, no tendríamos la masividad que tenemos. Por eso todos los festivales grandes en Chile, cada cierto tiempo, tienen que invitar a los grandes nombres de la música nacional. Hay artistas consagrados que la gente quiere seguir viendo y este es un festival gratuito con un espíritu necesariamente convocante y masivo.
En esa línea y pensando ya en el futuro del festival ¿Se piensa el cobrar alguna entrada en algún momento?
– Cumpliendo 10 años hay que comenzar a pensar en el futuro del festival, porque hay que darle sostenibilidad al mismo, pero también hay que pensar en cómo ir abordando este crecimiento exponencial. Hemos crecido de una forma gigante y eso también tiene responsabilidades, entonces el festival por los diez años va a ser gratuito totalmente, pero de ahí en adelante, hay que siempre seguir pensando en el modelo de la matriz del mismo. Son conversaciones para el futuro, no para los 10 años, y la verdad es que ese futuro es súper incierto. El festival REC tiene asegurada su décima versión y nada más. Esto -del cobro de entrada- es a modo de ejemplo de lo que ocurre en la Fiesta de la Confluencia que se realiza en la provincia de Neuquén, Argentina, la cual tiene un sistema mixto. Con áreas gratuitas y otras pagadas.