Una obra dentro de una obra. Así se puede resumir, a grandes rasgos, “Constante”, propuesta teatral que se presenta hoy -19.00 horas en la sala principal del Teatro Biobío- y que significa el debut en Concepción de La Comedia Nacional Uruguaya, compañía de teatro de Uruguay con casi 76 años de trayectoria.

Escrita por el chileno Guillermo Calderón y el uruguayo Gabriel Calderón, en base a “El Príncipe Constante”, el montaje se plantea como un clásico reversionado que atraviesa la guerra, los sueños, el arte y el teatro del tiempo, para llegar hasta la actualidad.

“Es una obra que trata muchísimos temas y que resulta bastante alejado del clásico de Calderón de la Barca. Es un montaje que invita mucho a la reflexión, con tópicos significativos para nuestro continente como la tortura, y también universales como la ficción y realidad, el umbral entre lo uno y lo otro, siendo el teatro un lugar muy idóneo para plantear aquellas temáticas sobre la mesa”, dijo Stefanie Neukirch , actriz integrante del elenco.

En definitiva, la trama de “Constante” se ubica dentro de una pequeña ciudad, de un pequeño país de Latinoamérica. Un dinero ruso de dudosa procedencia permite hacer una coproducción internacional de la obra “El Príncipe Constante”. Tiempo después, cuando el montaje ya ha fracasado, una cama, aquella donde se torturó al Príncipe, es el punto en común de peleas, reclamos, sueños, pugnas y crímenes.

“Soy una actriz haciendo de una actriz que trabajó en esta obra de teatro, dirigida por unos rusos, en la cual será torturada, de forma ficticia, sobre esa cama. Cama que es el gran objeto de la obra y que finalmente une a todos los personajes. Toda la obra se basa en ver cuál es la verdadera historia de esa cama. Entonces, la actriz que interpreto quiere esta cama para ella, ya que considera que por lo vivido en ella, le corresponde quedársela. Por su parte, hay una carpintera que la fabricó y la quiere para ella, y a su vez hay un museo de la tortura que está interesado en quedarse con este objeto”, manifestó Neukirch.

A lo que completó que “son cinco personajes y todo gira en torno a una cama, qué ocurrió en ella, y de las diferentes historias que se van entretejiendo a partir de este objeto. Es una obra como una cebolla, tiene múltiples capas su relato, diferentes alusiones, un montaje muy rico en que cada cierto tiempo aparece Calderón de la Barca con sus versos”.

Tras su paso por el TBB, “Constante” realizará tres funciones en el GAM en Santiago. Una dinámica de descentralización que para la actriz uruguaya le parece fantástico. “Contribuye mucho al enriquecimiento de las culturas. Por ejemplo, no estrenamos en Montevideo, sino en un festival de teatro de Almagro, en España. Cuando te enfrentas a un público diverso, se va enriqueciendo la actuación y el trasfondo de la obra”, enfatizó.