El concierto “Un canto para la infancia” es protagonizado por la soprano Natalia Vilches y el pianista Simón Morgado despliega en tono musical -estilo canción de arte-escritos de la afamada poeta.
La poesía de Gabriela Mistral comenzó a ser musicalizada cuando ella aún era joven, siendo así su poética una de las que más repertorio le ha dado a los cantantes de nuestro país. De esa casi infinita cantidad de partituras existentes se inscribe “Gabriela: Un canto para la infancia”, concierto creado en conjunto entre la soprano Natalia Vilches y el pianista Simón Morgado, el cual se presentará mañana a las 20.00 horas en la sala de cámara del Teatro Biobío.
“El concierto ofrece algunas de las canciones que más habitualmente se pueden escuchar en los recitales de canto lírico. Además, hay otras seis composiciones escritas por mí y que fueron tomando su forma final en un trabajo realizado codo a codo con Natalia (Vilches)”, dijo Morgado.
Sobre el por qué enfocarse o abordar la poesía de Mistral a través de la música y darle esta forma , el pianista señaló que “los dos tenemos una infancia que creció junto a su obra. Somos asiduos lectores de ella, la admiramos mucho, siempre está la niñez y la protección de la infancia presente en sus textos, lo cual no ha perdido para nada vigencia”.
Respecto a el cómo surgió esta puesta en escena, que va más allá de sólo la música, el pianista explicó que “nació de la necesidad de ambos artistas de volver a hacer música en forma presencial durante el período de cuarentenas, y en ese proceso comenzamos una exploración de repertorio lírico de cámara, el cual se tradujo en un concierto de música francesa y en el encuentro de la música mistraliana y en la composición de nuevas obras, siempre dentro del estilo de la llamada ‘canción de arte’”.
Precisamente, este formato o género musical no es muy común de ver, oír e interpretar, ya que si bien es música docta, es distinta a la canción popular y también folclórica, “no es de grandes audiencias, por lo general se ofrece en conciertos con poco público, de hecho nuestra primera presentación -realizada el año pasado en la Corporación Sinfónica de Concepción- fue con sesenta personas, pero luego cuando lo presentamos en junio en el Teatro UdeC hubo 180, lo cual nos sorprendió gratamente.
Es una música que no se hace en Concepción, ya que es canto lírico, pero de otra rama, o sea, cuando uno escucha canto lírico lo asocia inmediatamente a la ópera, que está bien y es lo que más se hace, pero en la lírica hay muchos más estilos y ramas”, detalló Morgado.
Palabras a las que completó que “sentimos que con esto estamos abriendo puertas y llevamos una poesía con un mensaje súper concreto, es algo que nos gusta mucho y está teniendo una muy buena respuesta por parte del público”.
Sobresale en esta propuesta escénica que ambos intérpretes no tienen una relación de acompañamiento sino más bien de cosolistas, “basta con que ambos describan bien lo que están comunicando para que la gente entienda, muy sobrio siempre, pero ahora le estamos dando un ingrediente distinto, que es la puesta en escena, con juego de luces, movimientos, colores para en el fondo ‘atacar’ la parte cognitiva del público desde otros puntos de vista”, concluyó el pianista.