Cultura y Espectáculos

Director de “Petit Frère” habla de esta cinta sobre la inmigración

La cinta relata la vida de Petit, un haitiano residente en Chile, que a través de un boletín narra cómo es vivir en nuestro país.

Por: Mauricio Maldonado 26 de Septiembre 2018
Fotografía: Isidoro Valenzuela M.

“No es como un documental convencional que te entrega muchos datos duros. Si bien se sigue a un personaje, es a través de este -y el boletín que él crea- que se llegan a situaciones puntuales”. Son las palabras de Roberto Collío, quien junto a Rodrigo Robledo dirigen “Petit Frère”, cinta documental que realiza mañana su última función en la Alianza Francesa como parte del ciclo Miradoc de septiembre.

El realizador, quien fue parte de un cine foro hecho ayer en el mismo espacio cultural francés, se explayó respecto a lo que querían apuntar con este material audiovisual.

“Lo que queríamos trabajar, a grandes rasgos, sobre la película, era una especie de collage de impresiones , espacios, situaciones y lugares que nos dieran un poco la sensación de estar entrando en la cabeza de una persona, planteando la posibilidad de que esa forma de pensar, de imaginar, es tan compleja como la de cualquier otra persona que tiene la capacidad de hacerlo. Y eso como un medio, también, de combatir el prejuicio sobre el inmigrante, que uno simplemente tiende a encasillarlo como una persona pobre, tanto material como culturalmente”.

La película comenzó su rodaje en lo estricto el 2013 y en su camino sufrió diversas mutaciones hasta dar con la historia de Wilner Petit-Frère, un inmigrante haitiano que observa y plasma en un boletín impreso noticias de interés para sus compatriotas residentes en Santiago.

Fue estrenada en abril pasado en el festival suizo de cine Visions du Réel y luego se exhibió en distintos cines del país, además de ser parte del ciclo Miradoc, generando diversas opiniones y críticas.

“Las reacciones han sido muy diversas, lo que es súper lógico e interesante, porque, también, se genera un pequeño diálogo que ojalá más adelante sea una gran conversación. Es decir, que se transforme en una forma de ver la realidad que se pueda traducir en leyes o una cultura de la convivencia, por ejemplo”, concluyó Collío.

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