Según las Estadísticas Culturales 2016, el comercio de música de descarga y streaming alcanzó $ 11 mil millones. En tanto el cine fue la actividad más popular.
Un festín de cine chileno se tomó las salas de estrenos en 2014. Hubo historias para todos los gustos en cartelera. En total, se estrenaron 40 filmes nacionales. Desde una tragedia de quien decide hacer justicia por sus propias manos como en Matar a un hombre, de Alejandro Fernández, hasta Fuerzas especiales, cinta que narra las aventuras y tropiezos de los cabos Salinas y Freire, dirigida por José Miguel Zúñiga.
Aquel año, más de 940 mil espectadores llegaron a salas a ver cine local. En 2015, fueron 70 mil personas menos, con cintas en cartelera como El bosque de Karadima, de Matías Lira. Pero en 2016 la cifra aumentó considerablemente, con solo 15 filmes locales. Más de 1.617.981 personas se instalaron a ver películas chilenas. La gran responsable fue la película Sin filtro, de Nicolás López, vista por más de un millón 200 mil personas.
Los datos son parte del informe anual Estadísticas Culturales 2016, que contempla las fuentes de 41 instituciones públicas y privadas. Ayer, en la Cineteca Nacional, la directora del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Ximena Clark, y Ernesto Ottone, ministro de Cultura, dieron a conocer los detalles del informe.
La actividad que tuvo más convocatoria, por lejos, fue el cine, con 27 millones y medio de personas en total, la mayoría para filmes provenientes de EEUU (24 millones 800 mil personas). Le siguieron las artes escénicas, con un total de 3 millones 262 mil espectadores, y los recitales de música docta y popular con 3 millones 253 mil personas (ver infografía).
Pero acaso uno de los datos más novedosos tiene que ver con las ventas de material discográfico. Si bien el comercio en esta área aumentó en 2016 (14 mil millones de pesos frente a 11 mil 300 millones en 2015), el detalle de las cifras arroja una fuerte caída en la venta de CDs y un crecimiento en el vinilo y sobre todo en la música digital.
Si en 2012 los CDs facturaban $ 4 mil 500 millones, en 2016 bajaron a $ 1.600 millones. En tanto, la música de descarga y streaming pasó de ventas por $ 2.600 millones en 2012 a $ 11.280 millones en 2016. A su vez, el comercio de vinilos se multiplicó: creció de $ 89 millones en 2012 a $ 804 millones en 2016.
“Hoy estamos mejor preparados para tomar decisiones en torno a políticas públicas en cultura gracias a este instrumento”, señaló Ottone en referencia al informe. “También se vuelve importante a la hora de hacer cruces con el Censo, con la Encuesta Casen para ver también cuáles son las comunidades más vulnerables”, agregó y anunció la pronta entrega de la Encuesta Nacional de Participación Cultural.
Centralización
Si bien se destacó el crecimiento de la asistencia en cine y espectáculos escénicos, se reiteró la centralización que producen los principales conciertos o encuentros culturales. Por ejemplo, en 2016, de un total de 6.871 funciones de teatro adulto, 5.125 se desarrollaron en la Región Metropolitana. Sucedió lo mismo en teatro infantil, ballet, danza y ópera. La segunda región que concentra más funciones es la del Biobío, poco más de 1.000, comparadas a las 7.423 de la Metropolitana.
Además, se destacó la gratuidad de los museos que integran la Dibam (26 recintos). Esta apertura comenzó en todo el país el 3 de marzo de 2016 y los resultados están a la vista. Hubo 2 millones 503 mil usuarios, equivalente a un aumento de un 13%, entre 2015 y 2016. El museo más visitado fue el de Historia Natural, con 651 mil personas.
El arte de asistir
La película protagonizada por Paz Bascuñán se estrenó en enero de 2016. Una comedia que estuvo durante 13 semanas en cartelera y que recaudó sobre los $ 3 mil millones. En el ámbito nacional, las dos cintas que le siguieron con resultados menores, estrenadas en agosto, fueron Argentino QL, de Pato Pimienta, protagonizada por Jorge Alís, y Neruda, de Pablo Larraín, donde Luis Gnecco interpretaba al poeta premio Nobel. Sin filtro llevó un millón 284 mil espectadores, Argentino QL, 271. 412 y Neruda 94.236.
“Tener una película exitosa no significa una atracción inmediata de público. Lo más probable que Una mujer fantástica sea una de las más vistas de este año, pero estamos hablando de 40 mil espectadores”, dijo ayer Ottone sobre el filme de Sebastián Lelio preseleccionada a los premios Oscar. “Hay que reforzar también la red de salas independientes”, agregó el ministro, quien comentó que No estoy loca, de Nicolás López, que se estrena la próxima semana, lo más probable es que se convierta en una de las cintas más vistas del 2018.
En artes escénicas también existió un aumento de espectadores, donde el mayor número de público lo mantiene el teatro, como tendencia de los últimos dos años. En 2016 la cifra fue de 1.601.644 de personas, donde se suma el teatro adulto e infantil, en espectáculos gratuitos y pagados. Considerando solo los asistentes a funciones de teatro, el 64,5 % asistió a obras dirigidas a espectadores adultos y el 35,5 % a teatro infantil.
Cada vez más los recitales se toman la cartelera semanal. En 2016 se registraron 4.661 espectáculos de artes musicales. La mayoría, claro está, se efectuaron en la región Metropolitana, con 1.867 eventos. Del total, con respecto al año anterior, a un aumento del 5,8 %, pues el 2015 hubo 4.405 funciones.
En cuanto a los préstamos de libros en el sistema de Bibliotecas Públicas, estos aumentaron: en 2016 se hicieron un millón 957 mil préstamos, contra un millón 877 mil en 2015.
Del mismo modo, con la digitalización del catálogo de las bibliotecas, creció la visita a los sitios web de la Dibam y la descarga de archivos. En 2016 se registraron 5 millones 239 mil visitas a los portales del sistema y 867 mil archivos descargados (alrededor de un 20% más que el año anterior).