Cultura y Espectáculos

Los múltiples rumbos de un impulsor de las letras locales

El poeta está realizando, de forma paralela, varias iniciativas de su obra indivi-dual, entre las que destaca una antología casi completa de su poesía. Además, se refirió V Encuentro y la V Feria del Libro del Bío Bío que se realizará en abril.

Por: Diario Concepción 19 de Febrero 2017
Fotografía: imagenPrincipal-6282.jpg

El poeta está realizando, de forma paralela, varias iniciativas de su obra indivi-dual, entre las que destaca una antología casi completa de su poesía. Además, se refirió V Encuentro y la V Feria del Libro del Bío Bío que se realizará en abril.

 

Hace mucho tiempo que su figura está ligada inagotablemente al andar de la literatura local. Y es que Omar Lara lleva varias décadas impulsando las letras regionales desde varios caminos. Uno de ellos es su creación personal, con obras que logran un gran impacto más allá de las fronteras de la zona, y que en este momento se encuentra desarrollando varias iniciativas también en distintos puntos a nivel nacional y también en el extranjero. Y a nivel colectivo, con trabajos realizados a pulso que igualmente han logrado trascender de manera importante.

En este último punto, el propio autor destaca lo que fue el año pasado la realización de "El rayo que no cesa", encuentro de escritores que tuvo su primera versión el año pasado en Concepción. Además, menciona el Encuentro y la Feria del Libro del Bío Bío, una cita de las letras que ya está posicionada a nivel regional y nacional y que en abril próximo tendrá su quinta edición. En ella, Lara ya se encuentra trabajando de forma intensa, y adelantó algunas de las novedades más importantes que tendrá esta potente cita literaria. 

Con el año recién partiendo, junto con proyectar lo que será su 2017 el escritor hizo un repaso de la temporada pasada, dejando en claro que tiene una agenda llena de propuestas tanto a nivel personal como colectivo para seguir aportando de manera importante al desarrollo de las letras locales. 

– ¿Qué balance hace de lo que fue su año 2016 y cómo proyecta su temporada 2017?

– El 2016 fue un año amable y generoso. Y muy activo también. Si debo mencionar algunos "hitos", como se les llama, sin duda que el Premio Nacional de Poesía Jorge Teillier, que concede la Universidad de la Frontera, fue uno de los más significativos. 

Eso originó que la editorial de esa universidad me propusiera publicar mi poesía completa, o casi completa, a lo que accedí sin dudarlo, sobre todo que era una idea que rondaba desde hace tiempo, luego que esta misma propuesta la recibiera antes de una editorial mexicana. Acá la idea avanzó rápido, ya está en imprenta bajo el título "Nohualhue. Ida & Vuelta. Poesía 1964-2016". 

Otro punto importantísimo fue la edición de uno de mis libros inéditos, por la Editorial de la Universidad de Concepción. Se trata de "Abracé la tierra". Y no puedo dejar de mencionar la realización de las jornadas literarias "El rayo que no cesa" y la invitación de los escritores de Santa Cruz, Bolivia, ocasión en que la Cámara del libro boliviana me concedió una honrosa distinción.

En cuanto a 2017, es un año que empezó temprano y casi sin fronteras con el anterior. He terminado de revisar las pruebas de mi ‘Nohualhue…’. Además, acaba de aparecer en Bucarest una amplia antología bilingüe, "La fuerza de gravedad de la memoria" y en Bogotá está editándose en este mismo momento mi libro "Las palabras en su palabrar". Y olvidaba que en Italia se tradujo una selección de mis poemas bajo el título "Omar Lara e l’altro Cile". 

En Concepción, la Revista Mocha me ha pedido una antología de poemas de amor que saldrá a luz en el primer trimestre del año. Y está la revista Trilce, con un número especial dedicado a los encuentros del Bío Bío, que en este momento ya está en prensa. Y a propósito de encuentro, en abril se nos viene el V Encuentro y la V Feria del Libro del Bío Bío. Y hay mucho más, pero no quiero cansar.

– ¿Qué hitos literarios destacaría del año pasado, tanto a nivel individual como colectivo en la Región?

– En lo personal ya mencioné algunos de los más importantes, y más allá de mí mismo destaco sin falta las jornadas de "El rayo que no cesa", que convocó a varias decenas de escritores regionales, del país y extranjeros. Este evento logró una conmovedora respuesta tanto de los escritores como del público.

También debo mencionar la obtención del primer premio de los Juegos Florales de Viña del Mar, uno de los más importantes del país, a la poeta Taty Torres, de la tertulia "Jueves Será", que se realiza en Artistas del Acero; y la edición de diez obras de autores de la Región, guarecidos por un proyecto Gore. 

Rescatar y descubrir, decía nuestro lema y ahí están, para dar fe de ello, la edición del bellísimo poema "Descenso" de Daniel Belmar, varios libros de poesía y narrativa, más la publicación de siete autores de teatro, entre ellos Leyla Selman, un nombre ya reconocido internacionalmente. 

Y a propósito de teatro, no puedo dejar de mencionar el primer concurso de dramaturgia José Chesta, del Bío Bío a la Antártica, que tuvo una inesperada y amplia respuesta y cuyos resultados se darán a conocer en la feria del libro de abril. Este fue convocado por Artistas del Acero, el Centro Cultural Trilce y Teatro Reconstrucción.

– Me mencionó que ya está trabajando en la V Feria y V Encuentro del Bío Bío. ¿Qué puede adelantar de lo que serán estas actividades, y cómo siente que se han insertado en la dinámica local de las letras?

– Haber llegado a la quinta edición de esta feria ya es una respuesta. Por otra parte, una feria o un encuentro no duran lo que marca un programa. Son hechos que permanecen en la memoria y en la preocupación, incluso en los afanes de la gente, esa es la gracia, su palpitación y su trascendencia.

Este año habrá más y más interesantes libros, más y más importantes escritores. Mencionaré un ejemplo: dos editoriales ecuatorianas, líderes en la reflexión y en los estudios sociológicos, históricos, antropológicos: Abya Yala y Casa de la Cultura Ecuatoriana, Plural, de Bolivia, Summa, del Perú. De Chile vendrán la Furia del Libro, LOM, Cuarto Propio, varias editoriales universitarias, una sólida presencia de centros editores de la Patagonia y un largo etcétera, en el que destaco una preocupación constante: la presencia de editoriales y autores locales y regionales. 

Todo esto que he mencionado es lo que da identidad tanto a la Feria como al Encuentro, una propuesta distinta, novedosa. Así lo entiende el ente rector de la Feria, la corporación cultural Artistas del Acero y así lo entiendo el público y nuestros invitados.

– ¿Cómo cree que este tipo de instancias ayudan al desarrollo de las letras y fomentan la literatura en la ciudadanía?

– Todo, todo absolutamente, ayuda. A veces las respuestas no son inmediatas o claras, pero todo es un proceso virtuoso, que inevitablemente fortalece la gestión total que buscamos y necesitamos.

– ¿Cómo piensa que será su 2017 a nivel creativo y de obras personales?

– Como ya te decía, mi 2017 empezó hace rato, empezó el mismo 2016, con algunos libros que terminarán su proceso de publicación a comienzos de año. Por otra parte, tengo dos libros inéditos que verán la luz antes de la próxima primavera.

También trabajo en dos o tres libros para niños. Sé que en España se publicará una antología y acaban de solicitarme una breve muestra para ser traducida al inglés. Y ya me preguntan por la segunda versión de "El rayo que no cesa", centrado esta vez en autores y temas regionales.

– ¿Cómo ve que está la literatura regional en este momento, y cuál es la importancia que usted piensa tiene a nivel de país?

– Los autores que han salido de Concepción, ya sea a la capital o al mundo, han salido no para aprender sino para enseñar.

Ya ves tú a Alfonso Alcalde, a Jaime Quezada, a Gonzalo Millán o Floridor Pérez. O el brillante Andrés Gallardo, al que de repente le dan una palabra amable y le dedican una gacetilla simpática. Cuando él, y muchos otros, deberían estar en la cumbre de la atención y la preocupación. El problema es que tienen que salir para decir quiénes son. Esto del centralismo, además de abominable, es una desfiguración maquiavélica de la sociedad y de la historia. Lamentablemente, a veces somos nosotros mismos los primeros centralistas, por ignorancia o comodidad.
 

 

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