Comenzará su labor en marzo, a meses de la inauguración del espacio. Por otra parte, Alicia Yáñez, consejera regional, se refirió a la entrega de los recursos para el proyecto. 
 

Ricardo Cárcamo Ulloa
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A fines del año pasado, se inició el concurso para elegir a quien ocuparía el cargo de director ejecutivo del Teatro Regional del Bío Bío. Un puesto clave para la puesta en marcha del recinto, pues en un inicio su contrato sería por un periodo no superior a diez meses. Y aunque aún no se hace oficial, ya se sabe quién será la persona que asumirá esa función a partir de marzo: Francisca Peró.

Con una amplia experiencia en el mundo del quehacer cultural, tanto como actriz como en otros puestos -estuvo varios años en el GAM-, Peró llegará con la misión de echar a andar todo el tema ligado al plan de gestión y de la programación del recinto. Y lo hará contra el tiempo, pues el teatro debería inaugurarse en el transcurso del segundo semestre de 2017.

En ese sentido, un punto clave es la entrega de los recursos por parte del Gobierno Regional para los temas administrativos del recinto. El consejo aprobó hace un tiempo la entrega de $600 millones (para los años -2 y -1), de los cuales hasta ahora solo se han traspasado cerca de $80 millones.

Alicia Yáñez, que preside la comisión de cultura en el Core, se refirió a este proceso. "Hicimos un consejo a fines de diciembre, inicios de enero, donde dimos todo el detalle de eso. Entregamos solo una parte, y queda un saldo que sí o sí debe entregarse este año. Volvemos el 27 de febrero, y uno de los puntos que voy a proponer para la primera sesión es el del Teatro Regional. Sé que se llamó a concurso para elegir al director ejecutivo, entonces vamos a revisar el plan de gestión y el presupuesto".

Al respecto, agregó que "De los $600 millones, quedan pendientes de traspasar $520 millones aproximadamente. Como te decía antes, lo vamos a ver en la comisión que haremos a fines de febrero o principios de marzo, porque deberían decirnos quién quedó en el concurso, nos presenten el plan de gestión y el programa para la inauguración del Teatro, y cómo se va a gestionar toda la programación y el plan, que es no es menor".

Administrativamente, desde el Gobierno Regional tienen que hacer las gestiones con la Dirección de Presupuesto en Santiago, para que esta entidad autorice el traspaso de esos recursos. 

Tareas pendientes

Otro proceso que debe realizarse es la renovación de los integrantes del directorio de la corporación, que en este momento es presidida por Mario Cabrera. 

De los otros diez miembros, ya no es parte Paulina García, quien renunció para postular al cargo de director ejecutivo -realizó duros cuestionamientos al proceso y presentó una denuncia en Contraloría-, y los restantes son Rodrigo del Valle (Corporación Cultural Teatro Pencopolitano, vicepresidente), Ninón Jegó (UBB, secretaria), Nadège Picod (Corporación cultual Alianza Francesa), Arnoldo Weber (Artistas del Acero), Sergio Muñoz (contador general y pedagogo teatral), Cristian Cornejo (biólogo marino), Juan Eduardo King (abogado y ex seremi de Cultura), Mauricio Castro Rivas (Máster en Gestión Cultural y actual asesor de Cultura de la municipalidad de Concepción) y Roger Sepúlveda (UST).

Juan Eduardo King se refirió a la actualidad del proyecto, que ha sufrido algunos cuestionamientos por el concurso del director ejecutivo y también por no tener su parte administrativa conformada a poco de su inauguración.

"Fui de los vecinos organizadores de la campaña por en Teatro y soy corresponsable de lo mucho hecho para que ya lo veamos en construcción y pronto a terminarse. Eso me obliga a preocuparme y, si puedo, a actuar. La inversión o gastos hechos para levantarlo sólo se validará si se le da el uso en beneficio de las artes escénicas, la cultura, los artistas, el público y el desarrollo económico regional a que tal obra obliga", aseguró. 

Al respecto, agregó que "si no logramos ese uso dignificante, el Teatro no sería más que un gasto inútil, como se dice, un ‘elefante blanco’. Y tal como van las cosas por ese camino transitamos. Se han ido produciendo actitudes y transgresiones a los estatutos no aceptables, que producen el mal estado de las cosas. Es el momento de sí hacer una renovación de directorio, la asamblea debe elegir seis directores y los consejeros regionales cinco".

De este proceso, indicó que "lo importante es que la elección se haga considerando la capacidad de aportar de los elegidos, sin distinciones políticas o, si algo se hace bajo ese alero, sean personas con capacidad y altura de miras para saber trabajar entre todos en un proyecto en que la política no debería tener injerencia alguna".