El librero Sebastián Pérez, de Qué Leo Concepción, recomienda títulos recientes de cuatro autores que han dado de qué hablar: Emmanuel Carrère, Michel Houellebecq, Álvaro Bisama y el debutante Diego Vargas.

 

La literatura está de moda. O al menos eso queremos creer quienes amamos la lectura. La nominación del último premio Nobel puso sobre el tapete que la literatura es algo vivo, que cambia sus límites y evoluciona en sus formatos. Dylan nos recordó que una buena poesía tiene una musicalidad propia y que, acompañada de las notas correctas, es capaz de llegar al corazón de miles de lectores/auditores, todo esto en un vinilo, un compact disc o en un casete pirata, el formato es irrelevante. 

En Chile siempre nos hemos considerado un país de poetas, lo que no quiere decir que seamos un país de lectores, nos falta muchas veces lograr esa conexión emocional con un texto, que tan fácil logra Dylan. 

La verdad es que motivación no falta, en mi trabajo como librero es común escuchar a personas que quieren leer algo, el problema es que no saben qué. La lectura es un hábito adquirido, si no lo obtuvimos cuando jóvenes (donde muchas veces el colegio más que ayudar, daña) es más difícil, pero no imposible, adquirirlo cuando somos mayores y muchas veces la sobreoferta editorial dificulta más la elección, como dato: sólo en español se publican alrededor de 250 libros diarios. 

Ante esto siempre ayuda una buena recomendación, la orientación de un "colega lector", por lo que pongan atención en los siguientes títulos y autores. Con algo de suerte, tal vez encuentren eso que buscan hace mucho. Primero partiremos con dos franceses contemporáneos: Emmanuel Carrère y Michel Houellebecq. 

"El adversario" 

Emmanuel Carrère ha transitado por diversos géneros, desde la "novela testimonio", al estilo de "A sangre fría" de Capote, pasando por la biografía y el ensayo, siempre utilizando las herramientas de la ficción para acercarse a la realidad. Recomiendo especialmente, para comenzar, "El adversario", retrato escalofriante de un caso de un mentiroso patológico en Francia, que termina con desastrosas consecuencias. 

Imposible no quedar horrorizado al ver cómo la realidad, muchas veces, muestra una cara más terrible que la ficción. También una buena opción es "Limónov", donde Carrère, utilizando la excusa de la biografía, transita por los últimos 50 años de Rusia. 

"El mapa y el territorio"

El caso de Houellebecq, el otro francés, es genial. Polémico y políticamente incorrecto como pocos, no tiene problemas en mostrar esa otra cara de Francia, la que no aparece en las guías Lonely Planet, y que evidencia una sociedad vacía, tremendamente individualista y donde, a pesar de estar rodeado de gente, te puedes sentir más solo y alienado que en un desierto, una sociedad que es fácilmente extrapolable al mundo occidental contemporáneo. 

Houellebecq te pone un espejo enfrente y lo que vemos reflejado no necesariamente nos tiene que gustar. Sus personajes típicos son seres truncados emocionalmente, con padres ausentes y difíciles relaciones sentimentales. La ironía y la crítica ácida son prácticamente un sello de su obra, de la cual sugiero partir con "El mapa y el territorio", novela ganadora del premio Goncourt y que muestra el ascenso vertiginoso en el mundo artístico de Jed Martin, su protagonista, viaje que sirve a Houellebecq como medio para desnudar distintos aspectos de la sociedad francesa contemporánea y terminar en un apasionante thriller, que tiene al mismo escritor como personaje de su novela. 

Y en Chile… un consagrado y una promesa

Finalmente, no puedo dejar de mencionar a dos obras chilenas publicadas durante este año, a las cuales conviene darles una oportunidad. La primera se trata de "El brujo", última novela de un ya muy consolidado Álvaro Bisama, novela que narra, desde la perspectiva de un hijo, la vida de su padre como fotógrafo durante la dictadura en la cual retrataba la violencia de la represión. Su obsesión en lograr esa captura perfecta, en el poder oculto de la fotografía, como un embrujo que sobrepasa los límites del retrato bidimensional. 

Es, probablemente, una de las novelas menos experimentales de Bisama y, por lo mismo, una buena forma de conocer su obra, que comienza con la ya clásica "Caja negra". 

Otro título chileno que está dando que hablar es "La extinción de los coleópteros" de Diego Vargas Gaete, obra publicada originalmente en Argentina y que lleva como subtítulo "Secretos de un colegio germano al sur de Chile". Las vidas de los dos personajes principales de la novela giran en torno a los sórdidos hechos cometidos por el director en un colegio alemán de Temuco. 

Vargas juega con el lector, mostrando fragmentos de la historia, con distintos saltos temporales y que nos lleva a recordar muchas veces a Bolaño. Un muy interesante debut en las letras nacionales.