Pese a su 25% de avance, gran parte de los cultores locales miran con cierta cautela su inclusión en este esperado proyecto. Falta de diálogo con el directorio y poca claridad en el modelo de gestión son las principales interrogantes, además de una falta de información de las autoridades a cargo.

 

Mauricio Maldonado Quilodrán
mauricio.maldonado@diarioconcepcion.cl

Tras las dos negativas que tuvo cuando se solicitó a los consejeros regionales el financiamiento para su construcción -en abril del 2013- la comunidad artística local alzó su voz y levantó la campaña "Yo apoyo el Teatro Regional del Bío Bío".

Presión que de cierta forma sirvió para que en el tercer intento, se lograran aprobar los recursos necesarios para concretar un anhelado sueño que se había dilatado prácticamente por dos décadas. 

Este empujón y unión duró al parecer un par de meses, ya que "nos invitaron con posterioridad a una reunión para aportar una visión a propósito de unas butacas y hasta ahí llegó. Durante esa administración -de Julio Lépez como director de arquitectura del MOP- fuimos y nos mostraron una serie de propuestas que habían de una empresa sobre las butacas, que en realidad no nos llamaba la atención ese tema, pero sí el diseño formal de la sala grande. Eso se mantuvo durante unos meses y después la verdad es que cada uno siguió sus propios caminos y esfuerzos, como unión dejamos de tener visibilidad porque básicamente dejamos que funcionaran las cosas, pero de forma paralela no hemos recibido ningún tipo de invitación a opinar", contó Sebastián Torres, actor y productor de la compañía Teatro Reconstrucción, además de haber sido uno de los rostros principales de dicha campaña.

Ya con un 25% de avance en las obras del Teatro Regional -las cuales fueron inspeccionadas durante la semana recién pasada por autoridades y gente ligada con la cultura- aún existe esa cierta distancia y desconfianza por parte de la comunidad artística sobre su uso y la cabida que tendrían ellos en este imponente edificio.

"Este proyecto es un concurso público de arquitectura y, en ese sentido, es el ‘arquitecto’ u oficina o equipo de arquitectos los que buscan los elementos para levantar la propuesta sin dejar de lado un fuerte componente de ‘autoría’ que predomina en estas instancias, lo que desemboca en un ganador, que siendo un gran proyecto, la comunidad artística con suerte es consultada en alguna etapa del proceso, que luego se vuelve muy lejano hasta que se comienza a construir el edificio", sentenció Mario Cabrera, presidente de la Corporación Cultural Teatro Regional del Bío Bío.

Para Marcia Orellana, directora regional del Consejo de la Cultura y las Artes, esta lejanía de los cultores locales con el Teatro Regional se debe a desinformación, tanto de los artistas como de ellos. "Creo que principalmente tiene que ver un poco con falta de información y de la cual también nosotros nos hacemos cargo, De hecho, cuando realizamos la inspección logramos establecer reuniones de trabajo por disciplinas, fijando para el próximo 18 de julio un encuentro con la gente de teatro y danza. La idea es que junto a la dirección de arquitectura del MOP y la corporación del teatro contarles sobre los espacios disponibles, así se está pensando el plan de gestión y queremos que sean partícipes de ello", señaló la seremi.

A lo que completó que "pero, también es un llamado a tener más proactividad respecto al tema por parte de las compañías y elencos, que no se sientan tan lejanos si finalmente, independiente de los espectáculos nacionales e internacionales que tendremos, este espacio es para los artistas de la Región".

¿Modelo de gestión?

Haciendo énfasis en esto, el destacado poeta Tulio Mendoza recalcó que "este teatro tiene que tener una curatoría seria y de calidad, un carácter internacional, con los mejores espectáculos del mundo, y muchos de esos espectáculos serán, sin duda, también con nuestros artistas, los mejores, que los hay, y en todas las artes".

Opinión a la que añadió que "pienso que la dimensión del Teatro Regional del Bío Bío no tiene el carácter de ser ‘una salita’ para que todos democráticamente la usemos para nuestros sueños y proyectos (tal vez la sala más pequeña o algunas dependencias especialmente hechas para ello). Creo que esto es el temor que sienten algunas personas, que el teatro no sea ‘para ellos’".

Mientras que para Camila Contreras, bailarina de la compañía de danza contemporánea Escénica en Movimiento, falta una vía más directa de información con la corporación cultural que maneja el Teatro Regional para sentirse más integrados con el proyecto, es decir, "todavía no hay un diálogo claro con ellos -corporación-, que hace un tiempo atrás renovó su directiva y aún no está claro su plan de gestión, hay quizás un temor de que no habrá cabida para los artistas locales y todo eso. Es principalmente por una desinformación del plan de gestión y porque tampoco se ha dado a conocer, está poco claro eso, como que se ve lejano el cómo será la programación. En todo caso, nosotros estamos muy motivados que el teatro surja y creemos que será un muy buen lugar para las artes, queremos ser parte y creemos que la única forma de serlo es activando el diálogo, de lo contrario nos quedaremos alegando sin hacer nada".

Palabras similares a lo expuesto por Torres, quien manifestó que "no está instalada una comunicación fluida entre el actual directorio y la comunidad artística, no hay instancias, salvo claro te informan de lo que han hecho y han avanzado, en donde se pueda conocer el modelo de gestión o sus procesos. Fuera de no ser fluida tampoco ha sido constante, no ha habido solicitud de opinión de los artistas respecto al futuro de este teatro".

Respecto a qué es lo que falta para zanjar este abismo entre teatro y artistas, el actor y productor confesó que "falta que el directorio haga una reunión ampliada a todos quienes quieran opinar del tema, yo estoy a favor, pero hay un montón que están en contra, ellos también deben ser escuchados".