
Seremi de Salud aseguró que se trata de una enfermedad endémica por lo que se espera que sigan apareciendo contagios. Grupos vulnerables como adultos mayores, en condiciones de hacinamiento, drogadictos o inmunodeprimidos son los de mayor riesgo.
Si bien, la Tuberculosis, enfermedad infecciosa causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis, había experimentado bajas en los últimos años, las últimas estadísticas entregadas por la Seremi de Salud, muestran que los contagios han ido al alza.
De hecho, al comparar, entre 2023 y 2024, los casos en la Región subieron en un 18%, registrándose 239 y 282 afectados respectivamente, según detallaron de la Seremi de Salud.
La situación, indicaron de la Seremi, se repite en los servicios: en Concepción se contabilizaron 121 en 2023 y 141 en 2024; en el de Talcahuano, el año antepasado hubo 52 y 74 en 2024; Arauco tuvo un comportamiento similar sumando 22 en 2023 y 27 el año pasado. El único centro que mostró una baja fue Biobío con 44 en 2023 y 40 en 2024.
María José Chandía, encargada regional de Programa Tuberculosis (TBC) de la Seremi, indicó que la enfermedad es endémica, por lo que se espera que todos los años existan nuevos casos de Tuberculosis, TBC, especialmente, en poblaciones más vulnerables, entre las que se encuentran adultos y personas mayores, inmunosuprimidos, quienes viven en condiciones de hacinamiento o precariedad extrema.
En cuanto a la posibilidad de erradicar la enfermedad, Chandía, aseveró que el Programa de Control y Eliminación de la Tuberculosis en Chile, tiene como objetivo general reducir significativamente el riesgo de infección, morbilidad y mortalidad por tuberculosis, hasta obtener su eliminación como problema de Salud Pública. “Para alcanzar este objetivo, se aplican acciones dirigidas a la prevención, pesquisa, tratamiento y diagnóstico oportuno de la resistencia a fármacos”.
Francisca Rivera, médico internista del Programa TBC Hospital Las Higueras, dijo que la bacteria, que se transmite cuando una persona enferma tose o habla y emite micro gotas que pueden contagiar a otra sana, afectan principalmente a nivel pulmonar, pero que, en realidad, pueden infectar a cualquier órgano como el riñón, los huesos, la sangre o la piel, entre otros.
“En Higueras tenemos varios casos, nosotros tenemos población vulnerable. En 2023 tuvimos 41 casos nuevos y en 2024 fueron 38 (…) Los grupos más vulnerables son los comorbilidades, situación socioeconómica, adultos mayores de 65 años, extranjeros de áreas donde hay mucha tuberculosis, drogadictos, con consumo perjudicial de alcohol, diabetes, VIH, y en situación de hacinamiento”.
El doctor Fabián Mora, médico broncopulmonar del Hospital Regional, integrante del Procet (programa de salud pública que se encarga de controlar y eliminar la tuberculosis en Chile), afirmó que en el centro de salud son atendidos pacientes que son derivados desde la atención primaria como también aquellos que debido a sospecha son estudiados, como también por consulta espontánea. “A veces podemos tener uno o 2 pacientes hospitalizados por Tuberculosis”.
El doctor afirmó que para evitar complicaciones es importante que la comunidad reconozca los síntomas de la enfermedad como son la tos, que puede ser con o sin desgarro, tos que con el transcurso del tiempo puede ser blanca, purulenta y en algunas ocasiones estar acompañada de sangre.
“Otro de los síntomas que puede acompañar a la tos puede ser una baja de peso en forma considerable, sudoración profusa sobre todo en la noche, fiebre, decaimiento, inapetencia y fatigabilidad”, agregó.
Para detectar la enfermedad, explicó Rivera, se realizan principalmente exámenes de tórax, estudios microbiológicos y baciloscopia, entre otros.
Luego de detectada la enfermedad, indicó que el tratamiento se realiza en base a antibióticos, con una fase de iniciación de 50 dosis que se administra de lunes a viernes y se prolonga por 2 meses y después una fase de continuación de 80 dosis, también de lunes a viernes, por cuatro meses.
Cabe destacar, según dijo Mora, que la persona se puede contagiar de Tuberculosis, y detectar su contagio después de mucho tiempo, meses e incluso años.
Aunque, aseveró, la enfermedad puede permanecer latente durante años e, incluso, no desarrollarse en el 90% de las personas dependiendo del estado inmune que tengan.
Aún así, indicó el facultativo, el llamado a las personas es acudir a un centro de salud cuando tengan tos con o sin expectoración por más de 2 semanas y tenerlo presente, sobre todo, si pertenecen a un grupo vulnerable, por ejemplo, diabético, con problemas de alcohol y drogas, adultos mayores, inmunodeprimidos, ya sea por fármaco por alguna condición de enfermedad como el VIH, que estén en quimioterapia u alguna otra situación”.