El Servicio ha recibido algunos reclamos de parte de las y los consumidores, quienes indican que, tras dejar sus autos en consignación, la empresa no respondió.
La Dirección Regional del Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) del Biobío, denunció ante el Ministerio Público a la automotora Autal, por un eventual delito de estafa que habría afectado a un grupo de consumidores de la Región.
De acuerdo a lo señalado por la directora regional del Sernac, Angélica Solar, “el objetivo de esta acción es que el ente persecutor, en base a sus competencias, inicie una investigación penal y solicite las sanciones pertinentes, que pueden incluir penas de cárcel para la o las personas responsables”.
Esta decisión fue adoptara por el servicio fiscalizador, luego de recibir reclamos por parte de personas consumidoras que señalaron haber sido víctima de diversos incumplimientos.
Entre ellos, indican que dejaron sus vehículos bajo consignación y que luego la automotora no les habría pagado el dinero o sólo entregó un porcentaje muy menor del precio. Incluso hubo quienes manifestaron que sus autos fueron desmantelados.
En otros casos, los afectados señalan que compraron vehículos usados, los que luego presentaron fallas mecánicas graves, y tras reclamar, no obtuvieron respuesta.
Asimismo, algunos señalan que adquirieron autos, pero que la automotora no cumplió con la entrega de la documentación exigida por la normativa, como, por ejemplo, la transferencia.
De acuerdo a los antecedentes recopilados, la empresa habría finalizado sus operaciones en la Región del Biobío, cerrando sus locales, sin estar disponible para entregar respuesta a las y los afectados.
Cabe mencionar que la Ley del Consumidor se hace cargo cuando existen incumplimientos, pero no aplica cuando se trata de prácticas que pudiesen constituir algún tipo de delito, en cuyo caso es el Ministerio Público el encargado de perseguir dicha responsabilidad.
De acuerdo a lo señalado por el Sernac, “el mercado de la compraventa de autos usados se basa en la buena fe y en la confianza”.
Es importante recordar que un contrato es un acuerdo entre un consumidor y una empresa, en el cual se establecen las obligaciones y derechos de ambas partes.
Entre los derechos que los consumidores tienen al firmar un contrato están que lo que se estipule debe ser veraz. En este sentido, las empresas deben cumplir con su palabra, tanto en lo que dicen los contratos como en la publicidad que entregan a los consumidores, es decir, lo que se promete en la publicidad pasa a ser parte del contrato tal como si estuviera escrito.
En la misma línea, los contratos no pueden contener cláusulas abusivas en las que la empresa se desligue anticipadamente de su responsabilidad ante incumplimientos. Tampoco contener cláusulas en las que la empresa pueda cambiar las reglas.
No son válidos los contratos que incluyan espacios en blanco que no hayan sido llenados o inutilizados antes de firmarlos.
Al momento de dejar un auto en una empresa concesionaria o automotora para la venta vía consignación, es relevante que los consumidores conozcan todas las condiciones contractuales de la venta, esto es, por ejemplo, el porcentaje de dinero que recibirá la empresa en caso de venta del vehículo, los plazos para que el consumidor reciba el dinero una vez realizada la transacción, entre otros aspectos relevantes.
Los consumidores tienen derecho a que los compromisos se cumplan. Si un consumidor vende su vehículo a la empresa, tiene derecho a recibir el pago de acuerdo a lo comprometido en el plazo comprometido.