
Uno de los casos fue contactado por la OLN penquista y aseguran que es una conducta que la adulta repite. Desde la Corporación Catim relevan que este triste fenómeno contraviene la Convención de los Derechos del Niño.
En una breve consulta general a transeúntes de Concepción se concluye que hay ciertos puntos de la ciudad donde, lamentable, es posible observar cómo personas piden limosna con niños en los brazos.
En algunos casos, están cerca de sus cuidadores en el bandejón central Avenida Los Carrera, pasando un evidente peligro de ser atropellados. En otros, se trata de pequeños que pasan jornadas completas en la calle a pocos centímetros del suelo, durmiendo o jugando en los brazos de su cuidadora o cuidador sentados en el piso.
“Esta escena nos recuerda la urgente necesidad de fortalecer nuestros esfuerzos para abordar las problemáticas complejas y específicas que afectan a la infancia”, estableció Sandra Castro, gerente de la Corporación Catim que trabaja por la restitución y protección de los derechos de niños, niñas, jóvenes y adultos de la Región del Biobío.
“Aunque la defensa, cuidado y protección de la niñez debería ser una prioridad transversal, en la práctica, a menudo se percibe como una tarea que recae únicamente en ciertos organismos especializados. Esto denota la necesidad urgente de sensibilizar a la ciudadanía sobre el rol que cada uno puede desempeñar en la protección integral de la infancia”, agregó Sandra Castro.
Sobre las escenas de niños en la vía pública acompañando a pedir dinero, desde Catim exponen una vulneración directa de los derechos de la infancia, donde Castro agregó que “se demuestra que las problemáticas subyacentes, como la pobreza y la exclusión social, que no han sido completamente abordadas”.
La Convención sobre los Derechos del Niño, adoptada en 1989. “Y ratificada por casi todos los países del mundo, establece en su artículo 27 el derecho de todo niño a un nivel de vida adecuado para su desarrollo físico, mental, espiritual, moral y social. También señala en su artículo 32 que los Estados deben proteger a los niños contra la explotación económica y los trabajos peligrosos. El incumplimiento de estos principios evidencia las brechas existentes en el acceso a derechos fundamentales”, comentó.
“A nivel global, según cifras de organismos internacionales, afecta actualmente a más de 37 millones de niños desplazados en el mundo. La migración, en muchos casos, agrava la vulnerabilidad, exponiendo a las familias a condiciones de precariedad que los obligan a recurrir a estrategias de subsistencia como la mendicidad”, afirmó Castro, pero también indicó que es necesario evaluar las diferentes realidades.
Desde la Oficina Local de la Niñez de la Municipalidad de Concepción, señalaron que ver estos casos, es cuestión de caminar por el centro, y enumeraron: a metros de la Iglesia El Sagrario, en los bandejones de Los Carrera, en Barros entre Rengo y Lincoyán. Donde nacionales y extranjeros realizan la práctica de conseguir dinero a través de niños. “Cualquier persona que toma conocimiento de una vulneración de derechos a la infancia puede y debe hacer una denuncia”, aseguraron.
Hablando de un caso que se hizo público en redes sociales en Concepción, desde la Oficina Local de la Niñez de la Municipalidad a través de una profesional en terreno, expusieron que ya se ha abordado a esa persona, se constató que es de San Pedro de la Paz y que hace años fue atendida a través de la Oficina Protección de Derechos de Infancia (OPD) haciendo su derivación para que reciba asistencia. “Pero vuelve a la calle. En los últimos días también se le buscó el lunes y martes, pero cambia de lugar”, comentaron desde el organismo.
Teniendo presente este triste fenómeno, el compromiso del municipio es atender los casos y conectarlos con los sistemas y programas de apoyo. “Teniendo una coordinación con otras instituciones, pero no es su tarea la fiscalización”, detallaron en un comunicado.
La directora regional del Servicio de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, Andrea Saldaña, indicó que “ante este tipo de situaciones, el dispositivo competente es la Oficina Local de Niñez, cuyo accionar operativo está instalado en los municipios. Sin embargo, su dependencia técnica corresponde a la Subsecretaría de la Niñez y del Ministerio de Desarrollo Social y Familia”.
En cuanto a lo que recomiendan como autoridad en la materia a la hora de observar una situación en que se sospeche la vulneración de derechos de un niño, niña o adolescente. “Lo recomendado es realizar una denuncia en Carabineros, Fiscalía, PDI o Ministerio Público, tras lo cual se establecerá una evaluación del caso y la correspondiente medida de protección”, señaló.
Luego de lo anterior, procede el Servicio de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, que a partir de la medida de protección, debe garantizar el oportuno acceso a acciones de atención o reparación. “Dependiendo del caso, se deriva a los diversos programas de su dependencia con el propósito de resolver la situación de vulneración que afecta a la niña, niño o adolescente”, estableció Saldaña.
Barros, O’Higgins calles céntricas de la ciudad son los puntos escogidos por personas para pedir dinero con un niño en brazos.
El mayor Milton Rossel, jefe de la 2ª Comisaría de Concepción, especificó que “es importante que en este tipo de situaciones cualquier persona pueda denunciarla al nivel 133 o al teléfono del cuadrante de las distintas unidades”.
En particular, Carabineros ante una denuncia por maltrato infantil, se traslada a verificar los antecedentes expuestos. “Luego se denuncian los hechos al Tribunal de Familia respectivo y estos antecedentes son investigados. Obviamente son derivados, probablemente, dependiendo del caso, a la Sección de Investigación Policial o algún programa de protección familiar mediante el cual se pueda establecer la veracidad de los hechos denunciados”, puntualizó el oficial.
En tanto, desde la Defensoría de la Niñez, plantearon que en este tipo de situaciones se debe evaluar el caso en particular para corroborar si hay alguna situación de vulneración de derechos y los motivos que llevan a esa condición. “Esto no lo fiscalizamos (Defensoría), y más que fiscalización debe atender la situación la Oficina Local de la Niñez de las municipalidades y deben desde ahí trabajar con la madre para abordar su situación específica”, explicaron.
El objetivo final de la pesquisa, es determinar las prestaciones que se requieren para el cuidado de la niña. “La mirada de estos casos debe ser integral y tener en cuenta el apoyo que requiere esa madre para el cuidado de la hija. Además, lo estipula la ley de garantías nº 21.430, el Estado debe hacerse cargo de las prestaciones necesarias para que la familia cumpla su rol protector. Esto se puede denunciar en la OLN y si no directamente a Carabineros”, expusieron desde la oficina central de la Defensoría de la Niñez.
El Ministerio del Trabajo también tiene un programa de prevención que busca erradicar el trabajo infantil, al respecto se consultó a la seremi si existe alguna participación de sus cartera en este tipo de casos.
Sin embargo, Sandra Quintana, seremi del ramo en la Región del Biobío explicó que esta campaña apunta más bien al trabajo adolescente. “Realizamos seminarios con los empleadores también planteamos el tema del trabajo infantil cuando hablamos de trabajo protegido, por ejemplo, qué edad tienen que tener los jóvenes que pueden insertarse en el mundo del trabajo, cuántas horas pueden trabajar y efectivamente que estén protegidos por un contrato de trabajo”, estableció Quintana.