Esta inédita estrategia de control biológico busca mitigar incendios, fijar carbono en el suelo y evitar el uso de quemas y herbicidas, convirtiéndose en la primera iniciativa de su tipo en Chile.
Ante el aumento, frecuencia y severidad de los incendios forestales, la Universidad de Concepción invitó a su comunidad interna y vecinos y vecinas del sector a conocer las medidas implementadas para la prevención, celebrando 1000 días sin incendios en sus tres campus.
Reconociendo la importancia de la prevención ante los incendios forestales, la Universidad de Concepción informó a la comunidad sobre las 29 medidas incorporadas para esta temporada de altas temperaturas. El Vicerrector de Asuntos Económicos y Administrativos (Vraea) Miguel Ángel Quiroga Suazo, advirtió que «muchos de estos incendios se producen no por causas naturales, sino que por la acción del hombre” destacando que la UdeC busca constantemente maneras de proteger su patrimonio natural en cada campus.
Desde la Dirección de Servicios, dependiente de Vraea, se implementa anualmente una brigada “con el fin de evitar la propagación de incendios forestales hacia la infraestructura y cuidar nuestros bienes y a las personas que habitamos en el campus”, expuso la Directora de Servicios, Evelyn Vázquez Salazar.
Las medidas están orientadas a usar tecnología y medidas de mitigación dentro de los incendios forestales. “Todo esto dentro del marco de nuestro Plan Estratégico Institucional, que está orientado a la sustentabilidad en nuestras operaciones”, complementó Vásquez.
Con el objetivo de disminuir la carga combustible existente en zonas de interfaz del Campus Concepción, como la presencia de pastizales y malezas invasoras, la UdeC implementó la presencia de una brigada caprina que trae beneficios respetando los ciclos naturales sin perturbar los equilibrios ecosistémicos. Gracias al trabajo de la organización Buena Cabra, pioneros en el uso de estos animales para la reducción del material inflamable, esta semana inició la primera etapa.
“La brigada completa estará compuesta por 50 cabras, las que estarán ubicadas dentro de un cerco perimetral móvil y, por ende, a medida que avancen, se irán cambiando de lugar” explicó el encargado de propiedad y gestión forestal UdeC, Juan Emilio Espinoza Carvajal. El personal de la empresa estará a cargo del pastoreo bajo el cuidado permanente de una persona capacitada, la que se encarga de mover a las cabras de tal manera que cubran la totalidad del área que se pensó para hacer el cortafuegos, además de seguimiento colaborativo a través la carrera Ingeniería en Conservación de Recursos Naturales para evaluar los impactos de la iniciativa.
Con esta metodología ecológica se evita hacer cortafuegos usando herbicidas o quemas, que dañan el medioambiente y la salud de las personas, pero además mejora la calidad de los suelos, la retención de humedad y la absorción de CO2.
«Se espera que la medida tenga diferentes impactos positivos, entre ellos; la mitigación de incendios forestales y la fijación de carbono en el suelo. Por otra parte, se espera generar instancias con la academia para la búsqueda de alternativas que son nuevas en nuestro país”, comentó Espinoza. De esta forma, la Universidad de Concepción es la primera institución en Chile en implementar una brigada caprina en el interfaz urbano forestal.
La cofundadora de Buena Cabra, Rocío Cruces Neira. asegura que uno de los objetivos de la brigada caprina, es justamente aportar a la mitigación de los efectos del cambio climático. Lo que esta organización realiza se llama pastoreo estratégico controlado o rotativo, con el objetivo de bajar la altura de la vegetación, haciendo que sea menos propensa a la propagación de incendios.
De esta manera, las cabras “hacen la labor de una desbrozadora, pero sin la quema prescrita”, añadió Cruces, sumando que incorporan el carbono al suelo a través de su digestión, haciendo que esta solución sea muy ecológica. Además, evitan el uso de herbicidas, “el control químico que se hace para mantener la vegetación a bajo nivel, de manera que cuando llegan las altas temperaturas, la vulnerabilidad a los incendios sea más baja”.
Los animales tendrán una delimitación realizada con mallas móviles, que emiten una pequeña pulsación eléctrica que no es dañina para las cabras: «Van a estar a la vista, pero va a haber un límite para no acercarse. El llamado a la comunidad es no darles alimentos, no hacer ruidos molestos cerca de los animales porque también se estresa y respetar la biodiversidad que vamos a tener en el campus”, recomendó la Directora de Servicios.
El Director Regional de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), Rodrigo Jara Ortega, destacó a la Universidad de Concepción como un actor fundamental en esta tarea, ya que “tiene un patrimonio importante, que también está asociado a plantaciones, en donde existe mucha afluencia de personas. Por lo tanto, necesitamos generar instancias de prevención, sumarnos a instituciones y que estas también se hagan responsables de su patrimonio”, enfatizó, felicitando el trabajo de la brigada caprina.