Durante la madrugada de este martes se desbarató en la Región del Biobío una banda dedicada al robo de madera, además de vinculada a un sujeto actualmente en prisión preventiva por violencia rural.
“Les vendía a ellos la madera, ellos la recibían y procedían a otorgar la documentación, conseguir la documentación y falsificarla para poder luego venderla en el mercado formal”, describió la fiscal regional Marcela Cartagena.
La persecutora destacó que “lo interesante de esto es la cantidad de dinero que implica. Estamos hablando de, al menos, trece mil millones de pesos de movimiento financiero“.
En ese sentido, las siete personas detenidas cometían los presuntos delitos “para el enriquecimiento, así de simple“, enfatizó, aunque no descarta financiamiento posterior a organizaciones radicales. “Como parte de la protección de lo que hacían y para que nadie se diera cuenta de la cantidad de dinero que manejaban, no vivían acorde al dinero que habían logrado recaudar”, añadió.
“Ya veníamos pisándole los talones en cuanto a retener estos productos bancarios, no es que hayamos encontrado los billetes en una casa”, profundizó Cartagena. Incluso, describe que funcionaban desde 2020 y a partir de 2022 “estaban quietos” porque “no necesitaban tener mucha actividad para sobrevivir”.
Así entonces fue relevante la participación del Servicio de Impuestos Internos en la investigación, ya que así se pudo perseguir delitos tributarios como el lavado de activos, los cuales se suman a asociación ilícita y hurto de madera como algunos de los cargos a formalizar.