Plantación con especies amenazadas da inicio a futuro jardín botánico UdeC

31 de Agosto 2024 | Publicado por: Noticias UdeC
Fotografía: Esteban Paredes

Autoridades Universitarias encabezaron las actividades de plantación de tres especies de Nothofagus amenazados y endémicos de Chile. Este hito, inaugura la línea de conservación ex situ del proyecto Campus Naturaleza y futuro jardín botánico de la Universidad de Concepción.

El ruil, (Nothofagus alessandrii), hualo (N. glauca) y roble de Santiago (N. macrocarpa), especies arbóreas de Nothofagus amenazados y endémicos de Chile fueron protagonistas de las jornadas de plantación, que inician la primera colección ex-situ para el futuro jardín botánico UdeC. Las actividades fueron encabezadas por el Rector de la Universidad de Concepción, Dr. Carlos Saavedra Rubilar, la Vicerrectora Dra. Paulina Rincón González, el Vicerrector de Asuntos Económicos y Administrativos, Dr. Miguel Quiroga Suazo, la Vicerrectora de Relaciones Institucionales y de Vinculación con el Medio, Dra. Ximena Gauché Marchetti y el Director del proyecto Campus Naturaleza UdeC, Dr. Cristian Echeverría Leal.

La conservación ex-situ (conservar especies fuera de su rango de distribución natural) es una de las líneas de acción del proyecto Campus Naturaleza UdeC, cuyo objetivo es contribuir a la persistencia de estas tres especies, que son claves en la ecología de los bosques en el hemisferio sur. Actualmente, presentan una preocupante tendencia hacia la desaparición en sus hábitats naturales producto de la sobreexplotación, cambio de uso de suelo, incendios y cambio climático, entre otros factores.

El Rector, Dr. Carlos Saavedra Rubilar, señaló que “este es un acto muy simbólico para la Universidad, para la ciudad y el país, en el sentido de este esfuerzo que se realiza para desarrollar un legado bio socio-cultural. Primero que todo, se protegerá la biodiversidad en Chile, en este caso de tres especies de Nothofagus que están amenazadas en el centro del país. Con esta posibilidad, vamos a permitir su permanencia en el tiempo; van a ser 3.000 plantas este año, 3.000 el próximo año, que van a completar al menos 6 hectáreas y van a dar la posibilidad de que las personas puedan conocer en los próximos años estas especies, aprender, pero al mismo tiempo inmersas en un espacio de investigación y procesos formativos, donde nuestros estudiantes acompañen el desarrollo y naturalmente la vinculación en la enseñanza”.


“Cada vez que nos acercamos a estos proyectos, conocemos la importancia de que ésta sea más que conservación, sino que también una búsqueda de la funcionalidad del bosque y cómo se va enriqueciendo entonces la biodiversidad a partir de esta plantación. Estamos muy contentos como Universidad, muy contentos y agradecidos también de la colaboración internacional que está presente en este proyecto, buscando proteger la biodiversidad nacional”, añade el Rector.

En sentido similar, el Vicerrector de Asuntos Económicos y Administrativos, Dr. Miguel Quiroga Suazo, patrocinador institucional del proyecto, afirma que “Campus Naturaleza tiene un enorme valor, no sólo para la Universidad, también como legado a las futuras generaciones. Nos permitirá mostrar que es posible desarrollar y potenciar nuestra labor misional, generando conocimiento y formación, mientras preservamos y conservamos espacios únicos que aún permanecen del antiguo bosque Caducifolio de Concepción y de su biodiversidad, los que además estarán disponibles para que puedan ser disfrutados por la comunidad”.


“En este contexto, la conservación ex situ juega un papel crucial en el proyecto Campus Naturaleza como una respuesta de la Universidad a los desafíos climáticos. Este tipo de conservación implica proteger y mantener especies fuera de su hábitat natural, lo cual es vital cuando estos hábitats y las especies están amenazados por el cambio climático, la urbanización, la agricultura o la deforestación. Además, permite que la diversidad genética de las especies amenazadas se mantenga, haciéndolas más resilientes a los cambios en el entorno, proporcionando una reserva biológica que puede ser clave para su sobrevivencia. Campus Naturaleza se convierte así en un espacio de investigación científica respecto a la adaptación de estas especies a los nuevos hábitats y condiciones climáticas”, concluye.

Así mismo, el Director de la Corporación Universidad de Concepción, Pedro Ramírez Glade, enfatizó en “que esta actividad tiene una importancia tremenda, porque aquí se inicia un jardín botánico, con las primeras especies de Nothofagus. Creo que la Universidad de Concepción en esto se va a destacar a nivel mundial, más aún con especies que solo se encuentran en Chile y que están amenazadas. Felicitar a quienes han ideado, empujado y también concretado el inicio de esta iniciativa”, subraya.


La Universidad de Concepción, destinó 6 hectáreas para la implementación del futuro jardín botánico. Este territorio anteriormente estuvo cubierto por una plantación forestal de eucaliptos exóticos, para lo cual se cosecharon entre abril a julio de este año 3 hectáreas del total.

Conservación ex situ 


El género Nothofagus, agrupa a 37 especies, distribuidas en 7 países del hemisferio sur. En Chile, las especies ruil, (Nothofagus alessandrii), hualo (N. glauca) y roble de Santiago (N. macrocarpa), crecen entre las regiones Metropolitana y del Biobío, donde presentan una preocupante tendencia hacia la desaparición, según indica el Director del proyecto Campus Naturaleza UdeC, Dr. Cristian Echeverría Leal. “Existe una creciente preocupación por la pérdida de biodiversidad y los efectos del cambio climático en los ecosistemas de nuestro planeta. El contexto chileno presenta un escenario crítico para la conservación de la biodiversidad. La presión urbana, la deforestación y el cambio climático han afectado seriamente nuestros ecosistemas, especialmente los bosques caducifolios del centro-sur de Chile. Debido a ello, existen mecanismos para la conservación de especies amenazadas, siendo la conservación ex situ una modalidad fundamental, que nace de una profunda vocación por la conservación de la biodiversidad y el compromiso con el desarrollo sustentable”.

“La primera colección ex situ representa un acto significativo hacia la implementación del futuro jardín botánico UdeC; con ello, la Universidad da un paso adelante en la protección de estas emblemáticas especies”, sostiene el académico, añadiendo que el género, también conocido como “roble”, crece sólo en el sur de Chile y Argentina.  “De las 10 especies de Nothofagus que existen en Sudamérica, tres especies están amenazadas y sólo se encuentran en Chile”.


La experiencia de plantar un árbol 

Tatiana Bustamante Betancourt, trabaja en la Facultad de Ingeniería y comenta que “la experiencia de plantar un árbol es algo que quería hacer desde hace mucho tiempo, de hecho, fue algo curioso, porque en el almuerzo con los colegas les comenté que quería plantar un árbol y al día siguiente llegó el correo de invitación; por ese motivo, yo lo considero como un regalo de la Universidad, que permite estar aquí en esta actividad; estoy muy contenta por ello. Además, la idea de hacerle seguimiento no sólo al arbolito que plantamos, sino a todo el proyecto en general, me parece una iniciativa maravillosa de contribución, no solamente a la sociedad, sino al planeta”.


En tanto, la estudiante de Traducción e Interpretación de la Facultad de Humanidades y Arte UdeC, Vanessa Rojas Flores, está segura que la iniciativa del jardín botánico, también implica plantar una cultura. Manifiesta que es “bastante gratificante y una novedad para mí, ya que mi carrera está bastante alejada del tema del ecosistema y el medio ambiente. Entonces fue bastante placentero participar y saber que esto en algunos años será un jardín bonito, donde la gente podrá conocer, admirar y también disfrutar un tiempo de la naturaleza, que es bastante importante. Incluso, sabía que este entorno estaba poblado de bosques, pero nunca había tenido acceso aquí”, confiesa.

El proyecto Campus Naturaleza Universidad de Concepción es una iniciativa inédita en nuestro país. Sobre la base de la ciencia y la vinculación con la comunidad, la Casa de Estudios Penquista propone una nueva interacción del ser humano con la naturaleza, abordando de manera integral la conservación in situ y ex situ, la restauración ecológica, la educación biocultural y la salud integral de las personas.