Decenas de personas y familias llegan, constantemente, a contemplar el fin de la jornada, en el punto donde se une el Río Biobío con el Océano Pacífico.
LOS ÚLTIMOS segundos del sol, marcando el fin de la jornada.
EL OLEAJE de la tarde.
LOS ROQUERÍOS como una suerte de anfiteatro.
EL DORADO domina el ambiente.