Este 30 de junio finalizó de manera formal la etapa de levantamiento de información donde se visitaron más de 650 mil viviendas según los datos entregados por el Instituto Nacional de Estadística. De todos modos, habrán lugares habilitados para quienes no han contestado la encuesta.
Comenzó cuando aún era verano y terminó con la llegada del invierno. Eso es lo que ocurrió con el Censo de Población y Vivienda que se realizó desde el pasado 9 de marzo y que tuvo su fin de manera formal este 30 de junio.
Por ello y a la hora del balance, la directora regional del Instituto Nacional de Estadística (INE), Lorena Villa, calificó como exitoso esta primera parte del proceso en el Biobío.
“Tuvimos buenos resultados, lo que nos permitió terminar dentro de lo planificado. Eran 12 semanas, terminaba en junio y pudimos terminar el proceso cumpliendo la cobertura que necesita el operativo”, señaló.
Y en este sentido, Villa sostuvo que, no obstante, durante las primeras semanas el proceso enfrentó una serie de cuestionamientos y dudas a través de redes sociales, en general, en la Región las personas respondieron mayoritariamente a los encuestadores.
“La verdad es que la cobertura que tuvimos en esta región fue muy buena. Agradecemos mucho la participación ciudadana, el espíritu cívico con que se respondió este Censo, nos han abierto las puertas”, dijo.
“Este era un proceso que está pensado inicialmente presencial y una segunda etapa final on line. Y acá tuvimos un porcentaje súper importante de forma presencial y lo que queda online ya es poquito. Y esa es la última etapa del proceso”, agregó.
Hay que recordar que participar de este proceso es una obligación y que quienes no recibieron a los censistas y decidieron quedarse al margen del proceso pueden ser denunciados ante los Juzgados de Policía Local y enfrentar multas como lo establece el artículo 22, de la Ley 17.374.
Más allá de esto, la directora regional del INE indicó que en todos los procesos censales hay personas que quedan al margen por distintas razones, pero que aún es tiempo de participar y para ellos se ha habilitado un número telefónico especial y puntos en las distintas ciudades donde se puede concurrir para ser censado.
“Siempre queda un grupito pequeño, que es muy difícil de encontrar, que es bastante menor en esta Región y por eso hacemos el llamado a que todavía está disponible el fono 1525, para aquellas personas que por alguna razón no se pudieron censar”, aseveró.
“Yo diría que lo que queda es más difícil de encontrar, son personas que trabajan todo el día y es muy complejo, por mucho que uno las visite. Son más bien personas que viven solos y por eso hacemos el llamado de los que queden pendientes, que por alguna razón no estuvieron cuando pasamos o cuando les dejamos el papelito, se contacten al 1525 y también puedan participar en este proceso que es muy importante y que todos puedan quedar censados”, recalcó la directora del INE en la Región.
No fueron pocos los obstáculos que debieron sortear los censistas en la Región, y por ello, considerando los factores geográficos y climáticos, las primeras comunas en ser censadas fueron las de la cordillera. Es decir, Alto Biobío, Antuco, Quilaco, Quilleco, San Rosendo y Negrete.
Y, de hecho, en algunas de ellas, hubo sectores donde los censistas recorrieron a caballo para cumplir su misión. Lo mismo el trabajo en las islas, en cárceles, hospitales, y para censar a personas en situación de calle o la situación de seguridad en la provincia de Arauco. Además, de enfrentar las intensas lluvias de junio.
Por ello, y ante las dudas surgidas al comienzo del proceso, cuando por redes sociales surgió mucha desinformación sobre este proceso y la utilidad de este, Villa expresó que confían en la calidad de la información que entregaron las personas y que en las primeras revisiones que han realizado, las estimaciones y cruces de información concuerdan con los datos levantados.
“Nosotros vamos viendo distintas fuentes, los indicadores, los registros administrativos de residentes, el crecimiento vegetativo, estimaciones migratorias, y todo eso, una vez que se revisa, que está dentro de los parámetros, podemos hacer un cierre de levantamiento”, afirmó la representante del INE.
“Uno apela a que las personas que nos entregaron la información en su totalidad, o gran parte de la totalidad, entregó información correcta”.
“Y es parte de lo que uno espera también de procesos cívicos como este, que hayan entendido la importancia de un Censo. Por lo menos, dentro de lo que hemos revisado, de las estructuras piramidales, todo eso ha ido cuadrando. Por lo tanto, creemos que la información que nos han entregado es información correcta”, subrayó Lorena Villa.
A contar de ahora, el Censo entra en la etapa de análisis de la información recolectada, para poder entregar sus resultados en los próximos 12 meses, cuando se entreguen los resultados completamente, como ratificó la directora regional del organismo a cargo de este proceso.
“Viene una etapa de procesamiento de datos, se revisa toda la información, hay un proceso de calidad de información que se revisa para todo esto, para poder recién entregar resultados el primer semestre del próximo año.”, planteo Villa.
Y un censo tecnológico como este nos permite anticiparnos a esas revisiones en términos generales, de modo que ya cuando viene el encuestamiento y una revisión más fina, tengamos certeza que en la medida que vayamos cerrando comunas, eso se fue dando.”, agregó la directora local del INE.
Finalmente, consultada sobre si es posible esperar “sorpresas” desde el punto de vista de los datos que pueda arrojar este Censo de Vivienda y Población, Lorena Villa, explicó que lo que esperan es ver reflejados los cambios que se han dado en el país y la Región en particular en los últimos años y que han estado marcados por al menos dos situaciones.
“Más que sorpresas, vamos a ir viendo cómo hemos cambiado en distintas formas. La forma en que estamos viviendo, cómo nos hemos distribuido. Hemos cambiado un poquito en distintos aspectos sociodemográficos. Hoy en día, por ejemplo, hay más gente que ha ido a vivirse a comunas que antes más bien estaban estancadas en número de habitantes, pero hoy en día se ve que están un poco más dinámicas, y que es algo que nos dejó la pandemia. De irnos a lugares o de construir en lugares que antes eran menos residenciales y hoy pasan a ser loteo y hay personas que se trasladaron a vivir ahí o tener una segunda vivienda”, explicó.
“Vamos a ir viendo cómo ese tipo de información, y que tiene que ver en cómo hemos cambiado después de la pandemia, y en cómo hemos cambiado también, como sociedad, después de flujos migratorios importantes. Tal vez vamos a tener información migratoria más actualizada, y todo eso nos va a ir entregando este nuevo Censo”, añadió.
Es por todo esto que, desde el Instituto Nacional de Estadística en la Región, hay tranquilidad sobre el proceso recién terminado, porque desde el ámbito de la cobertura, la meta se cumplió plenamente, se aseguró.
“Todo se fue monitoreando y mirando, si tú quieres un dato grueso te podría decir que censamos a más de 650 mil viviendas en la Región. Por lo tanto, eso quiere decir que un porcentaje relevante está censado. Se recorrió el 100% del territorio, logramos llegar a todas las viviendas de la Región, por muy alejadas que estuvieran”, cerró la directora del INE en el Biobío.