La Universidad de Concepción celebra su 105 aniversario fortaleciendo sus lazos con la comunidad local, nacional e internacional. La Vicerrectora de Relaciones Institucionales y Vinculación con el Medio, Dra. Ximena Gauché Marchetti, analiza las acciones y proyectos en vinculación y cómo el proceso de reforma de estatutos se articula con los ejes misionales UdeC.
Confirmar la vinculación con el medio como un eje transversal a la formación y la investigación es una de las principales tareas para la Universidad de Concepción en su aniversario 105. La Vicerrectora de Relaciones Institucionales y Vinculación con el Medio (Vrim), Dra. Ximena Gauché Marchetti, expresó que, debido al origen ciudadano de la UdeC, su pertinencia territorial y trabajo permanente por la excelencia, la Universidad “está llamada a seguir fortaleciendo sus acciones y programas bidireccionales y el aporte que hace en extensión académica y difusión artística, cultural y patrimonial”.
El equipo VRIM trabaja de cara a los 10 años que cumplirá la repartición en 2025, buscando “seguir mejorando el sistema de indicadores de medición de la contribución en vinculación, nuestro sistema de reportabilidad externa de las acciones UdeC en torno al logro de los Objetivos de Desarrollo Sustentable o la mejora permanente de la plataforma SIVRIM para la información y gestión de las actividades de vinculación”. Para Gauché, este fue un año importante por el incremento de proyectos de carácter bidireccional en la Convocatoria de Fondos desde VRIM. Destacó también la alta convocatoria y participación en la Escuela de Verano y la actualización normativa de la función de la Vicerrectoría, incluyendo las relaciones con el medio internacional y la incorporación de Alumni UdeC a la VRIM.
La académica, quien en paralelo desde 2021 coordina el proceso de Reforma de Estatutos de la Corporación Universidad de Concepción, analizó también a propósito del aniversario UdeC, la necesidad de una actualización del instrumento, en un proceso que sigue la línea del trabajo de los anteriores realizados por las rectorías de Augusto Parra Muñoz y Sergio Lavanchy Merino. El contexto universitario actual y la acreditación de excelencia por 7 años imprimen mayor urgencia. A eso sumamos que la UdeC sería la única universidad dentro del CRUCH que mantendría en 2024 estatutos aprobados bajo una normativa de Educación Superior que ya no está vigente.
Principalmente, por la necesidad de adecuaciones a la Ley de Educación Superior y los nuevos criterios de acreditación. La normativa actual establece un sistema que se inspira en principios como la autonomía, calidad, cooperación, inclusión, libertad académica, participación, respeto y promoción de los derechos humanos, y transparencia, entre otros. Si bien la Universidad lo cumple de diversas maneras, no están recogidos en los Estatutos. El texto actual tampoco precisa su definición desde las funciones universitarias como hoy se entienden y articulan -formación, investigación, vinculación con el medio -, ni tampoco incluye el compromiso con el desarrollo sustentable y las artes, las culturas y el deporte, como hoy se desarrolla en la UdeC.
Hay también un contexto regional que hace necesaria la reforma. Si bien esta universidad tiene un origen en Concepción, despliega su quehacer también en Los Ángeles y en Chillán, proyectándose desde ahí en su vocación de internacionalización. La propuesta de reforma reconoce los campus, sedes y unidades, y promueve un desarrollo armónico de ellos, favoreciendo el cómo tributamos al crecimiento armónico de Ñuble y Biobío.
Luego, ha habido cambios internos que la propuesta busca incorporar, como la existencia de una Contraloría independiente y de vicerrectorías que no están reconocidas en los estatutos.
Este proceso comenzó en 2021 con el encargo a la Comisión, integrada por miembros del Consejo Académico y del Directorio de la Corporación, que elaboró un plan de trabajo y creó órganos para abordar las distintas tareas. Las propuestas que la Subcomisión de Redacción entregó a la Creudec sustentaron el documento enviado en enero. Durante marzo el texto fue revisado por Asesoría Jurídica y, en cumplimiento del artículo 67 de los actuales estatutos, el 18 de abril, el Rector presentó la propuesta formalmente al Consejo Académico y en mayo la presentará al Directorio. Para seguir garantizando la socialización y transparencia, entre mayo y junio se dará a conocer la propuesta en las facultades, escuelas o reparticiones que lo deseen.
Habrá un periodo para que los dos órganos colegiados puedan hacer sugerencias o comentarios, los que serán armonizados para someter la reforma a votación por tales órganos. Existiendo la aprobación, se espera que durante el segundo semestre pase a la Asamblea General de Socias y Socios, que tiene que aprobar o rechazar esta reforma.
De aprobarse, el proceso de implementación de la normativa actualizada necesitará un margen temporal para adaptar gradualmente el funcionamiento de la universidad, debiendo sumar los tiempos que demore la aprobación por las entidades ministeriales que corresponda. Por ello, no sería antes de varios meses que podrá estar en pleno vigor el estatuto actualizado.
La propuesta aspira a reconocer expresamente como principios rectores de la UdeC, entre otros, la participación, el respeto de los DD.HH. y la promoción de la democracia; el pensamiento crítico y autónomo, orientado al análisis sistemático de las necesidades y la búsqueda de soluciones para el desarrollo de la sociedad y el ambiente; y la conservación del medioambiente y su biodiversidad. Si pensamos en el aporte histórico de la UdeC al desarrollo de Chile, esos reconocimientos, ahora en los estatutos, fortalecerán seguir atendiendo adecuadamente intereses y requerimientos del país, desarrollando formación en todos sus niveles, investigación científica, desarrollo, innovación, creación artística, deporte, y, por cierto, articulando ello con diversas acciones de vinculación con el medio, tanto hacia los sectores público-político, comunitario, social, cultural y productivo.
Nos entregará herramientas normativas para mantener lo que la universidad realiza desde su origen y que hoy se plasma en las políticas misionales y en aquellas transversales, como instrumentos que guían el quehacer para alcanzar nuestros objetivos estratégicos. Nos pondrán, además, en un mejor pie para la próxima acreditación en las distintas dimensiones especialmente porque se articularán de mejor manera las funciones del Consejo Académico y el Directorio y se fortalecerá la democracia interna de la UdeC, entre otros aspectos que favorecerán ir cumpliendo de mejor manera nuestro plan de mejoras comprometido en la actual acreditación.