En el caso de Talcahuano, otras de las ciudades fuertemente afectadas por el 27/F, esperan la instalación de al menos 20 dispositivos. “Este proyecto quedó en el calendario de licitaciones para el 2024-2025”, explicaron desde el MOP.
Tras el anuncio de la Ministra de Obras Públicas, Jéssica López, de su cartera de concesiones 2024-2028, están considerados importantes proyectos para la Región del Biobío dentro de los que destaca, por la data de espera del 2017, el Sistema de Alerta de Tsunami.
Esta iniciativa surgió de la presentación de una propuesta de concesión por parte de una empresa Española al MOP. Al respecto, Hugo Cautivo, seremi de Obras Públicas, señaló que el trabajo de concesiones significa un aporte en materia de infraestructura pública.
“Uno de los temas en que se ha puesto de prioridad precisamente es este proyecto de alerta a tsunami que quedó en el calendario de licitaciones para el 2024-2025”, dijo y cabe mencionar que el Presidente de la República, Gabriel Boric, mencionó la intención de avanzar en esta iniciativa en 2023.
Para esta zona, según Cautivo, existe la urgencia de poder contar con este tipo de sistemas que ayuden a la comunidad a estar atentos. “A estas circunstancias naturales que sabemos que nos afligen y por eso la importancia de incorporarlo en nuestra cartera”, detalló.
Consultados algunos municipios costeros de la Región, exponen que en 2020 fueron contactados para que desde su punto de vista plantearan cuáles eran los lugares mejor indicados para la instalación de sirenas. De tal forma que Talcahuano tendría 20 y Tomé 23 de estos dispositivos.
Según lo que manifiestan desde la Municipalidad de Talcahuano, las consultas para trazar los lineamientos del proyecto ya fueron iniciadas.
Establecen que la última reunión con respecto a este proyecto nacional de sistema de alerta, fue en octubre de 2020, ocasión en la que se realizó un taller regional del Ministerio de Obras Públicas y la entonces Onemi -hoy es Senapred-.
“Participaron las 12 comunas costeras de la Región a fin de conocer los alcances del proyecto e informar a la comunidad. El proyecto considera 20 alarmas para la comuna, desde sector Tumbes a Medio Camino”, detallaron mediante un comunicado desde el municipio.
“La propuesta inicial está completa. Sin embargo, sería conveniente reforzar el sector de Brisas de Sol, poner una alarma cerca de la Autopista y la otra cercana a la Segunda Compañía de Bomberos”, afirmaron desde la municipalidad y agregaron que en los últimos años no han tenido más retroalimentación. Pero han continuado con capacitaciones hacia la comunidad en la materia.
Desde la Municipalidad de Tomé, Sergio Valenzuela, encargado de Protección Civil y Emergencias, puntualizó que “el 27 de octubre del 2020 el municipio respondió consultas del Taller de Participación Ciudadana Institucional y aproximadamente en junio del 2021 se envió al municipio una solicitud para evaluar terrenos en donde se podrían instalar sirenas por tsunami”.
En respuesta a la propuesta que hizo el municipio se les indicó que existían 23 sirenas tsunami proyectadas en Tomé. “Los equipos que se proyectaron fueron analizados con equipos municipales, en donde se propusieron más, los cuales fueron acogidos e ingresados al estudio final. Desde un inicio el municipio ha participado activamente en la definición de terreno, ubicación y cantidad de equipos, ha existido participación municipal”, señaló Valenzuela.
El encargado de Emergencias de la Municipalidad de Penco, Esteban Llanos señaló que “para un sistema de respuesta la idea es contar con todos los elementos, porque la alarma puede ser muy relevante, pero no se debe complementar. No es suficiente por sí sólo, requiere de planes”.
“Nuestra comuna dispone de planes, hemos ejercitado con las escuelas, establecimientos educacionales municipales como particulares. El año pasado hicimos un ejercicio en la comuna de evacuación de los establecimientos educacionales y poseemos la capacidad para desplazar más de 7.000 personas hacia la zona segura”, detalló Llanos.
Desde la academia, Rafael Aránguiz, ingeniero y docente de la Universidad Católica de la Santísima Concepción e investigador del Centro de Investigación para la Gestión Integrada de Riesgos de Desastres (Cigiden), señaló que este proyecto está muy alineado con algunas iniciativas que tiene la Organización de las Naciones Unidas, con el programa Alerta Temprana para Todos. “Que en Chile se pueda implementar este sistema de sirenas en la costa, es bastante beneficioso y va en esa línea”, apuntó.
Para el académico es importante que este sistema pueda estar integrado con el de pronóstico y alarma de tsunami que existe actualmente, que lo maneja el Shoa y que pueda ser operado por Senapred y también integrado con el sistema SAE de alerta a través de celulares.
Para Aránguiz también es esencial que cuente con un sistema de alimentación eléctrica, de comunicación por señal y estructuras lo suficientemente robustas para resistir un terremoto de gran magnitud. “Deben estar ubicadas en zonas costeras que requieran la evacuación. No necesariamente zonas que están bajo ciertas cotas van a ser inundadas por tsunami (…) participé hace años cuando esta iniciativa se estaba discutiendo y se hablaba de la cota 30”, describió el académico y agregó que se establecía que había que evacuar a todas las zonas que estén bajo la cota 30.
“Eso no es posible ni técnicamente, ni tiene mucho sentido, porque hay zonas que están bajo la cota 30, pero nunca se van a inundar por tsunami. Como el centro de Concepción que está bajo la cota 20”, explicó.
Tiene que haber también un estudio técnico, científico, detrás de la selección del lugar donde están las sirenas. “Las zonas prioritarias donde deben instalarse estos sistemas, son las que se inundaron para el 2010. Estamos hablando de Dichato, Penco, Talcahuano”, formuló.
“Este proyecto, tengo entendido que su implementación es de tres años. En paralelo se debe ir trabajando con la educación de la población, sobre todo en las zonas donde no han ocurrido estos eventos”, estableció el investigador de Cigiden. En el sentido, que es importante realizar simulacros de evacuación contando con este sistema de sirenas para que la gente vaya familiarizándose con el tipo de alerta que emiten.