Renovación de pabellones, instalación de nuevos equipos e, incluso, mejorar el estándar del inmueble son parte de las mejoras que se realizan en el centro de salud local. Recientemente se inauguró una nueva lavandería y un dispensador de medicamentos que facilita el proceso de retiro en menos de un minuto.
El Hospital de Tomé, creado en 1851, ha crecido ostensiblemente desde la apertura de sus puertas. En ese entonces con labores más bien básicas sólo atendía a 20 personas, situación que con el correr de los años cambió radicalmente, mejorando no sólo su infraestructura y equipamiento, sino también en su capacidad de atención que actualmente alcanza las 58 mil personas.
De hecho, el centro hospitalario, que pertenece al Servicio de Salud Talcahuano, posee 107 camas: 6 UTI, 41 medias y 60 básicas, a las que se suman 2 pabellones para cirugías mayores y uno para menores. Además de 24 especialidades médicas entre las que destacan psiquiatría y salud mental, kinesiología y oftalmología, entre otras, además de 9 odontológicas.
A pesar de su buen estándar y crecimiento que el centro hospitalario ha alcanzado, continúa el mejoramiento de sus dependencias.
Aníbal Cea, director del establecimiento, aseguró que constantemente buscan avanzar en el estándar para entregar una mejor atención a los usuarios y elevar la calidad de atención médica en la Región.
Es así como desde el año pasado el recinto comenzó a trabajar en una cartera de 16 proyectos de renovación de sus instalaciones que en su conjunto superan los $1.000 millones, iniciativas que estarán completamente desarrolladas y puestas en marcha durante este 2024.
Dichas inversiones están principalmente enfocadas a pabellones, dijo el directivo, y detalló que se realizarán obras de climatización en los pabellones quirúrgicos 1, 2 y 3 que, faenas que actualmente, están en proceso y, comentó que además se realizará un plomado de paredes para el uso de rayos X. Las faenas involucran un financiamiento del Ministerio de Salud de $344 millones 390 mil.
Además, en el área de pabellones el establecimiento de salud contará con un nuevo equipamiento, que renovará las condiciones de mejoramiento, con la adquisición de un Arco C, instrumento utilizado principalmente para la obtención de imágenes radiológicas de alta resolución y calidad a tiempo real, generalmente en el ámbito quirúrgico. La inversión en este ámbito será de $216 millones.
Se contempla, además, una mesa quirúrgica por $55 millones, $21 millones más para contar con un electrobisturí, $51 millones para una máquina de anestesia, $22 millones para una lámpara quirúrgica y un ecotomógrafo portátil por $4 millones.
En el último mes, detalló el director, entró en operaciones una UTI completamente renovada “que está a la vanguardia de los requerimientos para este tipo de unidades hospitalarias”, dijo.
Otra importante área que recientemente se renovó, con una inversión de $194 millones Fondo Nacional de Desarrollo Regional y del Core, fue la lavandería, que involucró la compra de dos lavadoras, una secadora y un rodillo de planchar, “que mejora el trabajo y el servicio que presta a las diversas unidades de hospitalarias”, comentó Cea.
La entrega de medicamentos recetados a los pacientes también fue sometida a mejoras y, recientemente, se puso en marcha un dispensario de fármacos que, con una inversión de $32 millones, permite que pacientes crónicos puedan retirar sus fármacos sin la necesidad de hacer fila.
Sólo basta, acotó el director , acercarse al dispensador y digitar su clave para retirar sus medicamentos en un proceso que no tarda más de un minuto. “Todo ello en el marco de la responsabilidad de trabajar para una atención cada vez más cercana y digna”, aseguró.
Cecilia Cabrera, usuaria del sistema, explicó que retira los medicamentos para su hermana, que se atiende en Las Higueras. “Para tener sus remedios había que ir y tomarse toda la mañana o toda una tarde. Esto es muy significativo para nosotros (…) Ahora vengo, llega la clave al teléfono y retiro los medicamentos. No demora nada”, comentó.
En tanto, el director del hospital recalcó que también se han realizado modificaciones a las dependencias del hospital, que obedecen a un proceso de conservación, que implica el cambio de luminarias, cielo raso, pinturas, readecuación de baños y puertas de acceso financiados por el Ministerio de Salud por un costo de $311 millones 477 mil.
Verónica Avendaño, presidenta del Segundo Consejo Consultivo de Usuarios del Hospital de Tomé, destacó las millonarias inversiones que se han realizado – que fueron confirmadas en la pre cuenta pública del establecimiento- pues según dijo son un beneficio directo para todos los usuarios del nosocomio local, uno de los más antiguos de la red.
“Como usuarios nos podemos dar cuenta y ver cómo esto se va proyectando de muy buena manera. Las obras de conservación infraestructura de interiores que están en proceso, tenemos nuevas puertas, techos pintados, equipos led en pasillos (…) para nosotros es un avance el ver los cambios”, dijo.
La dirigenta agradeció a las autoridades del hospital y el Servicio de Salud Talcahuano por las mejoras que está experimentando. “Damos fe de un nuevo Arco C, lámparas quirúrgicas, equipo de ecotomografía, los nuevos dispensadores con el proyecto Farmacia sin Espera, haciendo que la entrega de remedios ahora sea más rápida (…) Al caminar por los pasillos nos damos cuenta de estos cambios y que hay preocupación” dijo y agregó que esperan que el centro hospitalario siga avanzando y modernizándose para ir en apoyo de la comunidad tomecina.
