Con huertos comunitarios trabajan para disminuir la obesidad en Biobío

Ya son 10 las comunas que han desarrollado la iniciativa. Un total de 17 espacios saludables se han desarrollado entre 2022 y 2023 en la Región. Cifras regionales revelan que el 38% de la población tiene la enfermedad y los niños menores de 6 años alcanzan el 16,2%.

Hipertensión arterial, diabetes, colesterol alto, hígado graso, limitaciones de movilidad, dolores crónicos y depresión son consecuencias que puede originar la obesidad, patología, que según la OMS, afecta al a 39% de los adultos a nivel mundial.

La última Encuesta Nacional de Salud (2017) reveló que 39.8% de la población tiene sobrepeso, 31.2% obesidad y 3.2% son mórbidos. En tanto, el Mapa Nutricional 2022, indicó que en el país el 29% de los niños y 23% de las niñas son obesos.

En Biobío la prevalencia de obesidad es de 38% en la población en general y, en niños, según el último informe de Vigilancia Nutricional, del departamento de Salud Pública y Planificación Sanitaria de la Seremi, 22,9% de los menores de 6 años tiene sobrepeso y 16,2% obesidad.

De ahí la relevancia de incentivar una alimentación sana, que mejore la calidad de vida y evite enfermedades en la población. Para ello a nivel regional se está impulsando la creación de huertos comunitarios, que abastezcan a la población de sectores más desfavorecidos.

La iniciativa, realizada por la Seremi de Salud y el programa Alimentación Saludable y Actividad Física, busca potenciar la cohesión social, el empoderamiento comunitario y la soberanía alimentaria, mejorando la disponibilidad de alimentos orgánicos saludables como frutas y vegetales, y conocimientos sobre alimentación y nutrición.

Para ello, profesionales de Promoción y Salud de las Personas de la Seremi, incluidos en el plan de Nutrición, se han desplegaron por la Región para realizar talleres teórico prácticos a juntas de vecinos y establecimientos educacionales, entre otras organizaciones, que crearan huertos, invernaderos y bancales.

En 2022 la iniciativa, en que participaron 100 personas, logró crear 8 huertos: 2 en Talcahuano, 3 en Curanilahue y, uno en Concepción, San Rosendo y San Pedro de la Paz. Se invirtieron 11 millones de pesos.

El año pasado hubo 70 participantes y se crearon espacios sanos en 8 comunas: 2 en Santa Juana y uno en Tucapel, Coronel (Isla Santa María), San Rosendo, Arauco, Curanilahue, Concepción y San Pedro de la Paz con un gasto total 27 millones 883 mil pesos.

Eduardo Barra, seremi de Salud del Biobío, afirmó que la estrategia, que se trabaja con la comunidad, potencia la soberanía alimentaria y tiene un impacto en la salud de las personas, ya que la alimentación es un factor fundamental que condiciona el bienestar de la población.

“Es por ello, que es primordial la promoción de hábitos alimentarios saludables, acompañados de una educación en la esta materia que permita una nutrición integral y la disminución de la malnutrición por exceso”, aseveró.

La jefa del departamento de Promoción de la Salud de Seremi, Débora Alvarado, recalcó que los huertos que funcionan en espacios comunitarios, centros de salud o jardines infantiles, facilitan la práctica de ejercicio físico de manera moderada, lo que impacta en el bienestar físico y mental. “Además, contribuyen al fortalecimiento de los huesos y las articulaciones, reduciendo la presión arterial y a gestionar el estrés”, agregó.

Foco en los niños

Los huertos comunitarios incluyen una línea educativa, que se trabaja con nutricionistas y psicólogos, que incluye un enfoque en la actividad física y alimentación saludable.

Pamela Zambrano, jefa del subdepartamento de Promoción de la Salud de la Seremi, aseveró que desde el ministerio se ha implantado la estrategia para detener la aceleración del sobrepeso y la obesidad en menores entre 2023 y 2030, lo que constituye una hoja de ruta vital para prevenir y revertir el aumento de la obesidad en menores.

Aseveró que este año continuarán con la difusión de las Nuevas Guías Alimentarias para Chile para orientar a la población a tener una alimentación saludable, difundirán cápsulas audiovisuales creadas con estudiantes; continuarán la vigilancia nutricional en la atención primaria de salud y controles de la Ley 20.606 de composición nutricional.

Agregó que también se incluye en el plan promover, fomentar y proteger la lactancia materna, factor protector contra la obesidad.

Se debe continuar

En la creación de un huerto comunitario en el Jardín Infantil Caracolito, ubicado en el sector Teniente Merino de Concepción, participó Irina Monjes, quien destacó la importancia de contar con alimentos saludables para evitar la obesidad.

“Con estos huertos se logra tener productos orgánicos, más saludables para la comunidad. Nos capacitaron para crearlos. Hicimos bancales (caja de madera para sembrar), le pusimos tierra de hoja y plantines de diferentes verduras”.

Monjes agregó que la iniciativa permite a las familias de escasos recursos acceder a frutas y verduras que, a su juicio, tienen un alto precio. “Un kilo de arroz cuesta lo mismo que una lechuga chica, que no alcanza para alimentar a toda la familia (..) es cierto que el arroz rinde, pero no es saludable, es puro carbohidrato y lleva a la obesidad”.

Por ello, aseveró que los huertos orgánicos se deben masificar para contribuir a la salud, especialmente, de familias de escasos recursos puedan tener uso libre a ellos.

En la misma línea, Mauricio Saavedra, coordinador de la iniciativa en Curanilahue, Cañete, Concepción, San Pedro y Arauco, aseveró que los huertos fueron muy valorados por la comunidad y que los talleres, realizados a niños de básica, media y a adultos, tuvieron una alta participación. “Hicimos huertos, bancales e invernaderos. Plantamos tomates, ajíes, lechugas, zapallos, zapallito italiano, entre otras plantas y, todo con semillas orgánicas”, comentó.

La comunidad se abrió a la experiencia, aseguró Saavedra, les gustaron los talleres y aceptaron sugerencias. “Muchos me han dicho que quieren que se hagan más talleres y huertos, que les gustan este tipo de iniciativas para mantener una alimentación más sana y, sobre todo, a cero costo, que es lo más importante, porque las frutas y las verduras en los supermercados están a muy alto precio”, comentó.

Para el coordinador, hay frutas y verduras que se pueden cultivar durante todo el año, sin importar que no exista un amplio espacio porque se puede hacer en terrazas o bancales, de hasta un metro por un metro. “La gente al principio creía que era algo difícil, pero se dieron cuenta es fácil y que ayuda a bajar el nivel de obesidad que existe en la comunidad, en adultos y niños. Hay que volver a la alimentación sana de antaño”.

La jefa del Departamento de Promoción de la Salud de la Seremi afirmó que este año se concretarán a lo menos 6 huertos y que en ellos se invertirán 24 millones de pesos.

Aseveró que es importante el desarrollo de la iniciativa, pues busca activar a las comunidades mediante la promoción de entornos saludables y autogestionados, mejorando los conocimientos sobre nutrición y agroecología de las familias y las comunidades, conectándolas también con otras iniciativas de salud pública.

“Buscamos transformarlas en comunidades resilientes y autosustentables para que aumenten su bienestar a largo plazo, en concordancia con el cuidado del medio ambiente”, comentó Débora Alvarado.