El nivel de destrucción causado por los incendios en la quinta región asombró al equipo médico de emergencias, EMT, del Servicio de Salud Concepción, que retornó a la ciudad después de realizar 640 atenciones a damnificados durante 14 días.

“Hay zonas que parecen un desastre nuclear”, dijo la Dra. Carol Ferrer, quien cumplió su tercera destinación, desde que es miembro de los equipos médicos de emergencia. “Es impresionante el nivel de las necesidades detectadas. El trabajo en terreno es arduo, hemos subido y bajado cerros, con el peso de los bolsos con fármacos, con calor y lluvia, sin baños y hemos dado la mejor atención posible, visitando cada terreno donde antes hubo una casa y atendiendo a los damnificados”.

Tanto la médica como los Técnicos paramédicos, Alejandro Contreras y Yasna Gutiérrez, forman parte de un Equipo Médico de Emergencia, conocidos como EMT por sus siglas en inglés, e integran la Red Asistencial del Servicio de Salud Concepción (SSC), razón por la que deben responder a los requerimientos del Ministerio de Salud cada vez que se requiera llevar atenciones clínicas a los afectados por catástrofe.

Alejandro Contreras es Técnico paramédico y cumplió su cuarta destinación, después de prestar apoyo a las víctimas del Aluvión de Copiapó, en 2015; inundación en Curanilahue, en 2017, y apoyo en Iquique, durante la visita papal y, en Santa Juana, en el incendio de febrero de 2023.

“Trabajamos en Quilpué y alrededores, haciendo recorridos en áreas asignadas previamente y visitando sitio por sitio, porque ya no hay casas. Allí hacíamos un levantamiento de necesidades, para después cubrirlas. Nos pedían lentes, medicamentos para enfermedades crónicas, ayudas técnicas, prótesis, sillas de ruedas, curaciones…”, explica Alejandro.

Tanto Ferrer como Contreras señalan que el aspecto más conmovedor en cada faena de apoyo en la catástrofe, es comprobar como la destrucción se contrapone a la decisión de levantarse y reconstruir que manifiestan los damnificados. “En muchos casos las necesidades detectadas corresponden a síntomas agudos relacionados con la autoexigencia de cada uno por reconstruir sus hogares”, explicaron.

Entre las grandes necesidades manifestadas por los damnificados de la quinta región, figura la atención de salud mental. “Muchos necesitan ser escuchados y acogidos y agradecen el tiempo que les dedicamos”, dijo la Dra. Ferrer. 

El equipo EMT del Servicio de Salud Concepción acude a cada destinación con mochilas con insumos y medicamentos básicos durante 5 días, aproximadamente, al cabo de ese tiempo, el Ministerio de salud va renovando stock.

Actualmente un equipo SSC, de la Unidad de Psicotrauma, continúa cona tenciones de salud mental, en la zona de catástrofe.