Expertos y autoridades revelan estrategias para afrontar las intensas olas de calor en la ciudad, destacando la importancia de las áreas verdes que sirven como espacios de refugio alrededor de la urbe.
Por Montserrat Serra Cárdenas
Jornadas de alta calor se han estado registrando en el último tiempo en la ciudad y la región. Hace poco advirtieron temperaturas que podrían llegar a los 37°C.
Las autoridades constantemente han informado de distintas recomendaciones para cuidar la salud y capear el calor.
Entre las medidas se encuentran evitar la exposición al sol en horas muy calurosas, mantenerse hidratado, usar bloqueador solar factor 50, sombreros y lentes de sol.
Pero también es importante contar con espacios públicos que cumplan la función de ser zonas seguras y refugios para estas olas de calor.
Según una recomendación de la Organización Mundial de la Salud, en agosto del año pasado, planteó la necesidad de crear mapas de calor de las urbes.
En ello se incluye la creación de espacios verdes y lugares para capear el calor, además de brindar zonas seguras para que las personas encuentren alivio.
A modo general, el arquitecto Sergio Baeriswyl detalló que “la presencia de arbolado urbano, áreas verdes, mayor vegetación, suelos con mayor permeabilidad, lagunas, humedales y otros cuerpos de agua son los principales factores de mayor incidencia que reducen las islas de calor”.
Por otro lado, el doctor en geografía, planificación urbana y gestión ambiental, Francisco de la Barra, especificó respecto a la situación en la ciudad.
“Concepción está en una condición bastante más favorable frente a las olas de calor en comparación a otras ciudades del interior como Los Ángeles, Chillán e incluso Hualqui o Chiguayante”, dijo.
El arquitecto comentó que esto se debe principalmente por el efecto de la de la brisa marina y los vientos, así como también por la presencia de harta vegetación y cuerpos de agua.
“Las altas temperaturas se darán en los lugares que tengan más estructuras que puedan acumular calor y menos sombras, generalmente donde hay mucho cemento”. A esto complementó que “lugares densos en construcción sin vegetación pueden ser muy calientes”.
Otro factor que aporta al aumento de temperatura en los espacios es lo que se denomina calor antropogénico. De la Barra explicó que esto se refiere a “lugares que estén emitiendo calor hacia afuera”.
Un ejemplo de lo anterior, según el mismo experto, son los sitios que tienen aire acondicionado, como las oficinas. Si no están adecuadamente ventilados pueden ser lugares muy calurosos.
Debido a esto, “se forman los llamados cañones urbanos, como las calles Barros Arana y Maipú que acumulan calor porque no tienen buena ventilación hacia arriba o a los lados, ya que están rodeadas de edificios”.
Por otro lado, los lugares más agradables para capear el calor son, obviamente, las áreas verdes. “La vegetación ejerce un efecto termorregulador, entonces evita los máximos de temperatura, pero también los mínimos”, añadió Francisco de la Barra.
Estos espacios conservan la humedad, por tanto, resguardan un clima agradable. A lo anterior, se suma que tener flora y agua siempre es una buena idea para controlar las temperaturas extremas, mencionó.
Y es que generan espacios de sombra y reemplazan el concreto que genera mucho calor. “Es mejor estrategia que instalar sistemas de ventilación mecánica, como en Barros Arana, porque igual existe una falta de ventilación y no genera tantos beneficios turísticos o psicológicos”, contó el Dr, en Geografía.
Para fomentar la creación de estos espacios seguros, De la Barra sostuvo que hay algunas normas que permiten que en los barrios exista un porcentaje de espacio destinado a áreas verdes.
“Las iniciativas vinculadas a este tipo de programa van a depender de cómo las municipalidades lo impulsan, pero es cierto que la gente también instala áreas verdes por su cuenta en sus jardines o espacios públicos comunes”, concluyó.
El alcalde (s) de Concepción, Aldo Mardones, explicó que “en cuanto a la sombra en las calles tenemos el arbolado urbano de la comuna, lo que claramente da sombra a las personas que transitan por las calles de la ciudad”.
A estos ejemplares se les realiza podas formativas, lo cual, según el municipio, permite dar una mejor estructura copal y así brindar un mejor servicio a nuestros vecinos.
Además, agregó que “este trabajo es definido a través de un ordenamiento territorial, ya que así los operativos que generamos en el amplio espectro del arbolado son más coordinados”.
“Por eso nos preocupa tanto lo realizado por CGE, ya que son siete especies que tendremos que plantar nuevamente y esperar su crecimiento”, indicó el alcalde (s).
En cuanto a cifras, el jefe comunal (s) aseguró que la capital regional cuenta con 65 mil árboles plantados en los diversos barrios de Concepción.
A esto agregó que “durante el año 2023 tuvimos que realizar 20 talas de emergencia y 8 planificadas, lo que sumado a los 104 árboles que cayeron producto del mal tiempo en otoño-invierno nos pusieron como desafío replantar en los mismos lugares con especies controladas”.
Por otro lado, Mardones puntualizó que los proyectos ejecutados en la comuna, como por ejemplo las plazas, micro plazas y parques, siempre tratan de tener árboles que den sombra, considerando el espacio a intervenir.
Acotó que “también solicitamos a las instituciones con las que ejecutamos proyectos que incorporen áreas verdes con arbolado”.
Asimismo, agregó que desde la Unidad de Asesoría Urbana de la Municipalidad de Concepción hay una preocupación constante por incorporar áreas verdes en los espacios públicos.
“Los proyectos de diseño urbano incorporan arbolado tanto en espacio público como en reposición de aceras y de forma constantemente en esta unidad orientan el diseño de proyectos de áreas verdes para los distintos barrios de la comuna”, sostuvo Mardones.
En cuanto a las áreas verdes, no incluidos los cerros Caracol, Amarillo y Parque Nacional Nonguén, el alcalde (s) indicó que Concepción suma 786 áreas verdes, lo que se traduce en alrededor de 1.200.000 m2.
“Eso es igual a 150 canchas del Estadio Ester Roa Rebolledo, según la última licitación que realizamos para su mantenimiento”, ejemplificó.
Finalmente, el alcalde (s) explicó que, respecto de la planificación urbana, el municipio se enmarca en el ámbito de acción que la legislación urbana entrega a las municipalidades, es decir, se ciñen al establecimiento de normas urbanísticas.
“Entre ellas no se consideran las condiciones climáticas y sus variaciones. Sin embargo, es una preocupación constante avanzar en el desarrollo de materias urbano-ambientales que den robustez a las decisiones que se toman”, concluyó.
Respecto de la creación de un “mapa de calor” de Concepción, bajo la recomendación de la OMS, desde la misma municipalidad detallaron que no es factible, dado que ello implica contar con estaciones meteorológicas “en cada sector”, indicaron.