Tonalidad verde: bacteria en Laguna Lo Méndez mantiene en alerta a los vecinos

Municipio penquista emitió una “alerta pública” por el fenómeno y llamó a la precaución. Experto aseguró que se debe a la presencia de una microalga que es tóxica.

La tonalidad verde del agua fue el primer síntoma de que algo raro pasaba en la conocida Laguna Lo Méndez de Barrio Norte.

Este fenómeno ocurrió, según vecinos, hace aproximadamente dos semanas y este jueves una indagatoria del Municipio de Concepción corroboró lo inusual: la presencia de una bacteria tóxica en el agua.

Lo anterior, generó preocupación en los vecinos del sector.

“Nosotros cuando nos dimos cuenta de que la laguna estaba así de ese color, llamamos a la delegación municipal y la han venido a ver y han hecho estudios. Pero, esto ya hace como un mes que está así, que se puso así verde”, dijo Nadia Gutiérrez, presidenta de la Junta de Vecinos que está aledaña al cuerpo de agua penquista.

Sobre si se ha generado una alerta en la comunidad que reside en el lugar, la dirigenta explicó que “claro que sí. Hay que avisar, pero lo que pasa es que aquí con la gente uno les puede avisar, pero el problema es que, por ejemplo, saben que no pueden alimentar a las aves y a los peces que hay aquí en la laguna y vienen con bolsas con pan a darles y eso no está permitido. Les hemos advertido y la gente se enoja cuando uno le dice que no pueden alimentar aquí a los peces”.

Ahora, la misma representante vecinal pide que el municipio penquista coloque carteles en la Laguna Lo Méndez en que explique la presencia de la bacteria.

Municipio penquista

La Dirección de Medio Ambiente de la Municipalidad de Concepción emitió una alerta pública este jueves por lo que ocurre con la Laguna Lo Méndez. Según lo informado, las aguas presentan un color verde anormal que se debe a una alta concentración de una cyanobacteria, tóxica para humanos y animales.

La situación fue detectada luego de un muestreo efectuado por equipos del Centro Regional de Estudios Ambientales de la Universidad Católica de la Santísima Concepción.

Por ese motivo es que extienden el llamado a la comunidad que vive en el entorno o que visita ese espacio a no tener contacto con el agua.

El director subrogante de Medio Ambiente, Álvaro Espinoza, explicó que “la laguna está con un tono verde y contiene una alta abundancia de una cianobacteria que se llama Dilicospermum, es el género de esta cianobacteria que es tóxica. Por lo tanto, lo que solicitamos es que las personas que visitan la laguna no tomen contacto directo con el agua porque estas cianobacterias son urticantes, pueden generar daños en los ojos, si nos llevamos las manos después de haber tocado el agua”

“Esa es la alerta, no pueden tomar agua de la laguna, si hay algún perro que se tira el agua tampoco no hay que dejarlo. Este es un fenómeno natural que no tiene ningún tipo de contención que nosotros podamos aplicar porque producto de los nutrientes que han llegado con la lluvia, los vientos que recirculan los fangos del fondo y el sol, se produce un caldo de cultivo ideal para el crecimiento de esta cianobacteria”, añadió la autoridad.

No es la única

Pablo González, candidato a doctor en Ciencias Ambientales e investigador del Centro Regional de Estudios Ambientales (CREA), explicó el fenómeno de Lo Méndez y señaló que no es la primera vez que se ve en un cuerpo de agua de la zona.

Explicó que el centro detectó la cyanobacteria, que pesquisaron en el estudio, el cual fue una muestra puntual.
“Nosotros, en el estudio que realizamos, que fue una muestra puntual para ver por qué el agua había cambiado de color, no hicimos análisis de toxinas. Lo que nosotros estamos haciendo es un llamado preventivo, porque no sabemos particularmente qué tipo de toxina hay, pero sí sabemos que hay una microalga que es una cianobacteria”, dijo

Añadió que “lo otro que pudimos detectar es que las concentraciones de estas microalgas son las que principalmente hacen el cambio de color y que había que tener prevención con respecto a no consumir esta agua y tampoco a no hacer actividades recreativas. Usualmente este tipo de fitoplancton puede generar, si es que es consumida, una enfermedad gastrointestinal o una alergia o algún tema en la piel como urticante”.

En todo caso, el experto señaló que en este caso el estudio no se hizo con la finalidad de determinar el tipo de toxina, por lo tanto, se desconoce con certeza el efecto que puede generar su consumo.

Sobre el período que debería tardar en pasar el mismo fenómeno, el investigador de la UCSC detalló que “no tengo claro cuántos son los ciclos de esto, porque son ciclos de abundancia, de proliferación. Esto puede durar una semana o más tiempo, pero si hay eventualmente una lluvia, por ejemplo, eso podría ayudar a limpiar la laguna porque hay un recambio de agua”.

“No hay una varita mágica para recuperarlo. Estos son problemas que son sistémicos, que tienen que ver con la coordinación de distintos organismos del Estado. Hoy día sí hay metodologías de recuperación, pero también que son muy costosas”, complementó González.

También mencionó que, en base a indagaciones anteriores en la misma laguna, se determinó que incluso se deben realizar obras civiles por la canalización de las aguas. “Nosotros detectamos que había aguas de origen domiciliario que entraban a la laguna y eso también propicia estos florecimientos. También tenemos que ver el tema del cambio climático. Hemos tenido temperaturas muy altas estos últimos días, que también eso ayuda a esta proliferación de algas”.

El mismo investigador destacó que el fenómeno de aguas verdes antes se detectó en la Laguna Las Tres Pascualas en 2017 y 2019 y, probablemente, en la Laguna Lo Custodio.

“Van a seguir ocurriendo hasta que no sean intervenidas de forma integral, pero eso sí implica un costo importante en meterle recursos a las lagunas. Esto es lo mismo que hacer un diagnóstico del estado de salud de una persona. Se hacen distintos exámenes y hoy día lo que estamos viendo básicamente es un ecosistema que está dañado y que está mostrando los síntomas en el fondo”, destacó.