37 mil personas participaron de Programa Regional de Reciclaje

22 de Diciembre 2023 | Publicado por: Diario Concepción
Fotografía: Isidoro Valenzuela M.

Proyecto se realizó durante 54 meses en 31 de las 33 comunas de la Región del Biobío. Inversión de más de $3 mil millones.

Por Montserrat Serra Cárdenas

2 mil 415 metros cuadrados fueron destinados a la construcción de puntos de reciclaje repartidos en 31 de las 33 comunas de la Región del Biobío. Esto en el tramo de los últimos 4 años y medio.

Lo anterior se enmarca en el Programa Regional de Reciclaje, proyecto del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), y fue ejecutado por la Secretaría Ministerial del Medio Ambiente con fondos del Gobierno Regional.

Inversión

Durante los 54 meses de ejecución el programa dejó un impacto significativo en todos los que participaron de esta iniciativa, marcando avances notables y ofreciendo diversos beneficios tangibles.

Con una inversión cercana a los $3.095 millones, se destinaron recursos para la implementación de variadas infraestructuras. Y es que benefició a organizaciones recicladoras de casi todas las comunas del Biobío.

Entre las mejoras se incluye la instalación de contenedores, la creación de nuevos puntos limpios y centros de acopio, implementación de materiales y uniformes para recicladores base, la ejecución de campañas de concientización, fomentar el reciclaje en zonas más rurales, entre otros.

Los resultados son importantes. Junto a la obtención de los más de 2 mil 400 metros cuadrados para puntos de reciclaje, se llevaron a cabo 243 talleres y 48 ferias de reciclaje en las cuales participaron 7.500 personas.

Además, alrededor de 37 mil personas fueron sensibilizadas en torno a temáticas ambientales, demostrando un constante compromiso con el colectivo hacia la preservación del entorno.

El Seremi de Medio Ambiente del Biobío, Oscar Reicher, resaltó la importancia de iniciativas como el programa de reciclaje, señalando que, a pesar de la baja visibilidad de los temas ambientales, este tipo de instancias abren las puertas a nuevas formas de desarrollo sostenible y consciente con el medio ambiente.

“Este proyecto permitió descentralizar la gestión de residuos. Es un programa pionero que no tiene otro símil en el país y fue visionario, porque permitió adelantar y preparar a los municipios para que puedan afrontar las metas asociadas a la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP)”, explica el Seremi.

Proyecciones

Con el término del proyecto, ¿Qué queda para el futuro del reciclaje y sus trabajadores base? Todo apunta a que las mejoras y beneficios puestos en práctica durante estos 4 años están para quedarse y formar una base en torno a la gestión de residuos.

Oscar Reicher explica que se seguirá trabajando en la concientización de la comunidad en torno a estas prácticas. “La ley REP llegó para no irse nunca más, ya está vigente”, expresa el Seremi de Medio Ambiente.

“El gobierno ha puesto un impulso importante y la misión ahora es sacar los dos reglamentos que tenemos. El próximo año entra un reglamento importante, como el reciclaje de aceites y lubricantes. El trabajo sigue, no nos podemos quedar solo con esto”, sostuvo Reicher.

Los recicladores base también tienen sus proyecciones. Y es que esperan que, si reaparece una oportunidad como la de este proyecto, esperan poder trabajar de manera más autónoma con el material reciclado. “Esa es la meta a la que queremos llegar, tener nuestro centro de acopio y poder trabajar. Trabajar más con más comodidades y más maquinaria”, expresa la dirigente nacional de la Asociación Nacional de Recicladores.

Por otro lado, Ana María Cecilia, recolectora de Nacimiento, expresa que las proyecciones están puestas en obtener un punto de acopio para la comunidad de Nacimiento, además de incluir mayor educación para otros procesos de reciclaje, como el compostaje, el trabajo de residuos textiles, etc.

Además, realiza una fuerte crítica hacia la comunidad. “Debemos tomar conciencia. Todo el mundo dice que cuidan el medio ambiente, pero ¿Qué hago en realidad para cuidarlo? Si no voy a dejar una lata al punto limpio donde reciben las latas, no voy a dejar los cartones donde los reciben, entonces no estamos cuidando el medio ambiente. Es una frase cliché nada más”, comenta la recicladora.

Las miradas están puestas en las esperanzas de que iniciativas como lo fue el programa de reciclaje se sigan replicando con mayor frecuencia.

Isidoro Valenzuela M.

Historias

La labor de un reciclador de base parece ser simple, pero en realidad va más allá de solo separar residuos. Diariamente se enfrentan a diversas dificultades, como contaminación, enfermedades, heridas y cortes, entre otros.

Matías Gallegos (33) comenta que ser reciclador de base va de la mano con un sacrificio bien interesante. Todos los días se puede aprender algo nuevo. Él cuenta que es un trabajo colaborativo donde todos ponen su grano de arena.

“La región del Biobío es uno de los territorios con la mayor cantidad de recicladores y agrupaciones recicladoras, como Santiago. Nos encargamos de separar la basura, agruparla en los centros de acopio y volverla apta para su comercialización”, explica Gallegos.

Expresa que la iniciativa de reciclaje por parte del Gobierno Regional les ha ayudado bastante con la implementación de maquinaria, infraestructura y protección del personal que les permitirá desempeñar su labor de una manera más cómoda, rápida y segura.

Ana María Cecilia (65) es otra recicladora. Sin certificación aún, pero gracias a este programa se encuentra postulando a la certificación de recolectora base. Para ella este proyecto ha significado una ayuda enorme. Pero uno de los beneficios más importantes ha sido la llegada de este sistema de reciclaje a sectores rurales.

“Soy de Nacimiento y llevar este programa hasta allá ha sido muy difícil, sobre todo porque hemos tenido que empezar de cero”, expresa Ana María.

Con una sonrisa y determinación asegura que esta iniciativa le ha permitido crecer como persona y como recolectora al poder postular a una certificación.

Para ella, todos estos esfuerzos significan un esfuerzo por dignificar la labor de los recicladores base que son indispensables para estos procesos.

Jessica Mora (46) es gerenta de la Cooperativa Tierra Bella en Chiguayante y dirigente de la Asociación Nacional de Recicladores. Cuenta que lleva reciclando 20 años en la comuna de Chiguayante, luego de haber estado un tiempo haciéndolo en Talcahuano.

“Al cambiarme de comuna tuve que reinventarme, ya que empecé reciclando por necesidad. Empezamos un pequeño grupo de compañeras y después se fueron uniendo más recicladores. Antes vendíamos los residuos en las ferias libres, pero de a poco comenzamos a entregar más materiales y a crecer en nuestra labor”, explica Jessica.

“Empezamos de a poquito y nos unimos. Fuimos a golpear puertas al municipio y gracias a Dios, el alcalde que había en esos momentos nos recibió. Comenzó a apoyarnos y pudimos firmar un convenio cooperativo entre la Municipalidad de Chiguayante y los recicladores base de la comuna”.

Con mucha emoción y agradecimiento cuenta que gracias a las iniciativas por parte de las autoridades ha podido postular a certificaciones para así poder oficializar su trabajo. “Estamos contentos porque todo lo que se nos entregó lo hemos aprovechado al máximo. En Chiguayante tenemos nuestra carpa, 3enfardadoras, un punto limpio móvil que llevamos a distintos lados para generar conciencia”.

“Hemos tenido mucho apoyo, por parte del alcalde Antonio Rivas, de la Gobernación Regional, de los vecinos y de nuestros pares, y eso nos ha permitido crecer y seguir el desarrollo en este ámbito”, agradece la recicladora.

Con el cierre del proyecto se deja una base sólida para gestionar los residuos domiciliarios y generar una mejor coordinación al momento de realizar este tipo de procesos, esperando que más adelante se puedan replicar los esfuerzos de un nuevo programa.