Actos de violencia hacia inspectores debilitan fiscalización de ordenanza. Mientras que los altavoces que instaló la Municipalidad pierden su efecto debido a la contaminación acústica de la zona comercial.
Una debilitada fiscalización quedó a la vista ante la consulta que hizo Diario Concepción al municipio penquista sobre los ruidos molestos en la zona céntrica y comercial de la ciudad. Específicamente sobre la cantidad de multas que se han cursado por el incumplimiento a la ordenanza que prohíbe el uso de parlantes fuera de los espacios destinados para ello, el director (s) de Medio Ambiente, Álvaro Espinoza, indicó que “no se han cursado multas por ello, dado el contexto de comercio ambulante que impide ejercer acciones, pero se está iniciando una fiscalización de los puntos de música con Cultura”.
El director de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Concepción, Arturo Della Torre, reafirmó esta situación. “Ha sido difícil fiscalizar. Los mismos inspectores están con temor porque la gente está muy agresiva, hoy día los inspectores son amenazados en las fiscalizaciones y pasa por eso. Es complicado el tema, pero no por eso, no se hace”, dijo.
“Los parlantes callejeros están prohibidos, salvo los autorizados en los denominados Puntos de Música, espacios dispuestos para artistas y coordinados por la Dirección de Cultura”, agregó Álvaro Espinoza.
Sin embargo, desde la Municipalidad de Concepción establecieron que igualmente Seguridad Pública, a través de sus inspectores, incluye esta materia dentro de sus fiscalizaciones. En ese sentido, Daisy Cárdenas directora de Seguridad Pública, estableció que los altavoces emiten sonidos respetando el máximo de 85 decibeles instantáneos medidos a distancia de 1 metro, de acuerdo a la regulación existente de la Superintendencia del Medio Ambiente.
Cabe mencionar que en marzo comenzaron a operar 20 altavoces que se instalaron en conjunto entre la Municipalidad de Concepción y la Subsecretaría de Prevención del Delito, la que invirtió más de $26 millones, pero debido al ruido que caracteriza el centro de la ciudad su efecto no es el esperado.
Así lo aseguró José Veloso, presidente del Comité de Barrio Cívico de Concepción. “Los equipos (altavoces) que se instalaron en el último tiempo no están cumpliendo la función que deberían porque iban a ser para complementar la vigilancia sobre la ciudadanía y prevenir delitos. Pero, en la práctica, se suma al caos de los ruidos molestos que hay en el Paseo Barros Arana y al griterío que hay ahí por parte de los vendedores ambulantes, porque esa es la principal fuente de ruido junto con los predicadores y los cantores”, indicó.
Desde su perspectiva, Arturo Della Torre, director de la Cámara de Comercio de Concepción, planteó que los altoparlantes no siempre se escuchan por la cantidad de sonidos. “Hay mucho ruido, el mismo comercio ilegal que está en los paseos peatonales. Pero la verdad es que estamos en eso, estamos empeñados con las autoridades tanto del municipio como de la Delegación Presidencial en que, por lo menos, esto disminuya un poco que volvamos a márgenes normales”, manifestó.
En cuanto al uso de parlantes en el interior de los locales comerciales del centro penquista, Arturo Della Torre, señaló que esa norma se respeta por parte de los asociados a la Cámara, ya que como directiva han difundido que el uso de amplificadores solamente puede estar dirigido hacia el interior de cada local.
“Las promociones tienen que hacerlas dentro del local, son tantos los que usan este método para difundir sus ofertas que no pueden dirigir sus parlantes hacia el exterior, porque sería aún más caótico”, comentó el director de la Cámara de Comercio. De hecho, explicó que los inspectores municipales fiscalizan cuando encuentran un parlante puesto hacia la calle y los locatarios saben que tienen que llevarlos al interior.
Respecto de los cantantes y predicadores, Della Torre, indicó que “el municipio tiene su ordenanza, tiene puntos donde se puede escuchar música. A veces, los músicos se quejan porque dicen necesitan el amplificador, pero lamentablemente eso ya está determinado, hay puntos en los cuales se puede usar, otros puntos donde no se puede usar. Justamente todo el día nuestros colaboradores con el bullicio terminan totalmente estresados”.
“Esto está fuera control, porque antes del estallido social había un horario, una disposición, un ordenamiento de los cantores y los predicadores”, afirmó el presidente del Comité de Barrio Cívico de Concepción. El dirigente recordó que en ese tiempo se aplicó el reglamento y se establecieron puntos donde podían cantar.
“Empezaron a orientarse de esa forma, había cierto orden. Pero ahora, llega cualquiera a cantar, a predicar, se instala y no pasa nada, además está el comercio ambulante que son súper gritones”, sostuvo el dirigente vecinal.
“Como gremio estábamos solicitando adelantar el Plan Navidad Segura, pero Carabineros señaló que ya tienen programadas sus fiscalizaciones desde el 1 de diciembre”, comentó el director de la Cámara de Comercio Arturo Della Torre.
Con las coordinaciones que se están haciendo actualmente con las autoridades en torno de este plan, Della Torre aseguró que “esperamos que volvamos a cierta normalidad entre comillas y que no sea vea como está ahora que se ve desbordado”.
“Donde están estos carros de ilegales vendiendo frutas, se escucha más la vociferación de la fruta que esté de temporada. Más que el hecho de que hay una persona, persuadiendo un poco y alertando a la gente que tenga cuidado”, apuntó el director de la Cámara de Comercio y agregó que muchas veces Carabineros está más pendiente de evitar delitos que de sacar los carros de ilegales, aunque son cosas que van de la mano.
“Estos carros obstruyendo o dificultando el desplazamiento hace propicio a otros que están en el tema los hurtos, el peatón se encuentra con este obstáculo, tiene que frenar tiene que desviar su camino, entonces todo eso se aprovecha. Yo no estoy diciendo que los ambulantes sean los delincuentes, pero sí van asociados”, explicó.