De acuerdo a un estudio realizado por la Ufro, en base a datos solicitados a la Superintendencia de Salud. En general, a nivel país, se observa un desequilibrio en la distribución de profesionales.
Por Bruno Rozas Hinayado
El derecho a la salud es primordial y fundamental para todas las personas, sin embargo para garantizar esta necesidad, es importante que exista el personal capacitado para brindar esa atención.
Según un estudio realizado por la Universidad de la Frontera, existen un gran déficit de especialistas clínicos en las diferentes regiones del país, donde el Biobío no es la excepción.
Según la mencionada investigación, la zona cuenta con un total de 3 mil 557 especialistas, lo que significa que posee el 7,94% con respecto al universo nacional de médicos.
Sin embargo, esta no es la cifra que llama la atención. En el análisis se detalla que en el Biobío existen solo 2,11 expertos por cada mil habitantes.
“Claramente es un tema preocupante para el país. El servicio público debería tomar cartas en el asunto, como por ejemplo fijar ‘numerus clausus’ (fijar cupos) para la cantidad de médicos por región” señaló el presidente del Colegio Médico de Concepción, Germán Acuña.
Otra arista que es imperante para el dirigente es la falta de incentivos por parte de los gobiernos regionales o municipalidades para con los profesionales de la salud. Estos incentivos irían en pos de retener al personal calificado y mejorar sus condiciones laborales, para de esta manera evitar que emigren a otra locación.
Un marcador inquietante es la falta de distribución equitativa entre provincias del personal médico. Por un lado está la Metropolitana que concentra un total de 22 mil 740 profesionales, en desmedro de otras como la de Aysén y Magallanes que sólo tienen 200 especialistas para toda la población.
Los datos recopilados por la Ufro muestran también que actualmente en Chile operan 58 especialidades y subespecialidades médicas, con un total de 44 mil 793 profesionales inscritos.
Un detalle no menor del estudio (con resultados a julio de 2023, en base de registros solicitados a la Superintendencia de Salud), señala que en 8 regiones del país no se encuentra la especialidad de Ginecología Pediátrica, en otras 6 tampoco hay cirujanos cardiovasculares, y en 7 no se encuentran especialistas de Coloproctología.
“Hay ocasiones donde se prioriza el ámbito administrativo antes que el práctico, donde es necesario más personal. Asimismo, el brindar a los profesionales de nuevas tecnologías o entregar incentivos, como nuevas especializaciones, igual resulta atractivo para que ellos se queden ” concluyó Acuña.
Anita Hernández, presidenta de la Unión Comunal de Adultos Mayores de Concepción, lamentó la situación que vive la región en esta materia. “Lamentablemente tenemos un déficit de médicos especialistas, lo que nos perjudica enormemente ya que las interconsultas son de espera eterna”.
Siguiendo con lo mencionado, la dirigente comenta que las universidades de la zona ayudan a combatir la condición con atenciones por parte de estudiantes en práctica que están ad portas de egresar.
Sin embargo, esta solución no contempla una continuación de los procedimientos. “Las universidades brindan atención de otorrinos, oftalmólogos y hasta kinesiología, sin embargo cuando ya egresan, no podemos seguir con el proceso” sentenció.
“Hoy existe una desigualdad inaceptable en la distribución de especialistas. Las 23.263 personas que han fallecido al 31 de agosto de 2023 esperando una atención médica de especialidad, según revelaron las últimas cifras de la Subsecretaría de Redes Asistenciales, son un reflejo de una situación que nos afecta como país, pero muy especialmente a las regiones de Chile”, comentó el rector de la Universidad de la Frontera, Eduardo Hebel.
A todo lo anterior se suma el envejecimiento paulatino de la población, hecho que requerirá de una gran cantidad de especialistas, según la lectura que hacen desde el Servicio Nacional del Adulto Mayor del Biobío (Senama).
“Nuestra población está envejeciendo, y se proyecta que de aquí al 2050 el 32% de la población tendrá sobre 60 años de edad. En este escenario se requerirán profesionales con formación en geriatría y gerontología, para entender los fenómenos del envejecimiento” analizó Janine Albarrán, Coordinadora regional de Senama.