La Municipalidad estudia hacer cambios en la ordenanza para poder liberar con mayor facilidad el espacio, a través de la agilización de los remates de aquellos vehículos desechados en los puntos con los que cuenta la casa edilicia para ese objetivo.
Numerosos reclamos realizan vecinos de distintos sectores de Concepción, relacionados con autos abandonados en las calles. Constantemente llaman a la Municipalidad solicitando su retiro, pero se encuentran con otro problema que dice relación con la poca capacidad que tienen en estos momentos los corralones municipales.
La presencia de estos automóviles abandonados trae, según los residentes, otras situaciones indeseadas como robos, gente que duerme en el interior de los vehículos, hasta acciones relacionadas con el microtráfico.
Sobre el estado de los corralones y sus disponibilidad el administrador municipal de Concepción, Adolfo Muñoz, explicó que existen dos espacios para el traslado de vehículos con infracciones en la vía pública.
“Para aquellos vehículos que son retirados por estar mal estacionados hemos dispuesto una zona dentro de dependencias municipales en el sector de Laguna Redonda. Los cupos son 4 a 6 y normalmente son retirados por sus dueños en el mismo día”, detalló Muñoz.
Es que quienes regresan a buscar sus autos al lugar donde los dejaron y advierten su falta, van a regularizar su situación rápidamente, debido a que además de la multa se debe pagar por cada día de permanencia, explicó Muñoz.
Por esta razón este corralón cuenta con esta rotación que permite el retiro de 4 a 6 autos mal estacionados por día.
Respecto de los vehículos abandonados en la vía pública, señalaron desde la Municipalidad de Concepción que “además de obstruir las vías generan problemas de seguridad e incivilidades, éstos deberían ser llevados al corralón municipal ubicado en calle Briceño. Este recinto actualmente está al máximo de su capacidad, porque hasta el año 2015 se acogía también los móviles derivados por Fiscalía que están vinculados a causas en proceso y desde el 2016 se dejó de dar cabida”.
Hasta julio de este año se mantenían 118 vehículos en el corralón de calle Briceño, sólo recibidos por esta situación de abandono en la vía pública.
A raíz de este problema, hace unos años el municipio inició un plan de ordenamiento y reestructuración para dar prioridad a los autos abandonados en la vía pública, agilizando los remates. “El último proceso de este tipo se hizo en abril del año pasado, sin embargo no se ha logrado un nivel de despeje adecuado”, comentó Adolfo Muñoz.
La razón que se esgrime como la principal causante del bajo interés de los remates, tiene que ver según el administrador municipal, con que la normativa actual implica que quien se adjudica un vehículo en estos procesos, tiene que pagar la cantidad de días que ha permanecido el auto en resguardo, lo que significa un costo alto.
“Es por ello que estamos trabajando para poder sacar dentro de este mes de octubre una modificación a la “Ordenanza sobre Derechos Municipales por Concesiones, Permisos y Servicios” para que no se tenga que pagar ese bodegaje de largo tiempo y con ellos hacer más interesante participar en los remates para despejar los espacios”, consignó Muñoz.
En la zona céntrica de la ciudad es posible observar vehículos en notable deterioro como es el caso de Ongolmo esquina Freire, donde vecinos se quejan de la presencia de autos que por una razón que desconocen permanecen fácilmente un mes estacionados y a pesar de acumular varias multas, no son sacados del lugar.
Angélica Espinoza, habitante de uno de los edificios de esa calle indicó que “falta vigilancia en el centro, hay vehículos abandonados, meses enteros, estacionados en calles céntricas de nuestra ciudad. Esto conlleva a focos de delincuencia e insalubridad, y pernoctan personas en los vehículos abandonados”.
Una situación incluso más grave viven los vecinos del sector Palomares, ya que ahí se abandonan camiones en plena vía pública, tal como detalló Moisés Ríos, presidente de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Concepción y habitante de ese sector.
“Se da bastante el tema, tenemos problemas con camiones mal estacionados, camiones sin motor abandonados y autos abandonados. Nosotros notificamos al municipio que en conjunto con Carabineros ha multado a los dueños”, indicó Ríos.
El dirigente vecinal detalló que el lugar donde quedan los camiones o autos genera problemas en el tránsito y que se han visto afectados por accidentes a raíz de la poca visibilidad que dejan. “También se transforman en escondite de personas con problemas de adicción, de gente que roba, atrae muchos problemas, no solamente es el tema de abandono”, refirió el presidente de la Unión Comunal de la Juntas de Vecinos de Concepción.
En tanto Rossana Neiman, presidenta Junta de Vecinos Remodelación Paicaví, señaló que los vehículos abandonados se dan para la venta de drogas y para asaltar igual. “Muchas veces los autos abandonados que han estado así son de los mismos vecinos”, afirmó.
“Nosotros enviamos la información a la municipalidad y ellos vienen al lugar donde está el auto abandonado. Han tenido muy buena acogida de parte de los dueños de los vehículos que se han hecho cargo, los han sacado y hay otros que se los han llevado al corralón”, explicó Neiman.
En cuanto al colapso de los corralones, la dirigenta vecinal indicó que es el mismo problema que ocurre en varios municipios.
“Yo creo que lo que habría que hacer es empezar a pasar parte a las personas que tienen sus vehículos abandonados y no sé por qué otra solución podrá dar el municipio, otro terreno, pero al final vamos aumentando y a la gente le da lo mismo”, dijo Rossana Neiman.
En el plan de acción multisectorial del Programa Quiero Mi Barrio también han atendido estas denuncias realizadas por vecinos, Karen Ruiz trabajadora social del programa indicó que “desde ese ámbito abarcamos las denuncias de los vecinos, en el caso de autos abandonados tratamos de gestionarlo con la respectiva dirección de la Municipalidad de Concepción”.