Medida en marcha blanca es evaluada por autoridades. Especialista asegura que esta disposición no entregará resultados para congestión entre San Pedro de la Paz y Concepción.
“Si yo bajo un 20% de los vehículos en esos horarios, la congestión se trasladará a después. La gente hará igual el viaje”, señaló Francisco Fresard, ingeniero e investigador en Transporte.
Esto a propósito de la restricción vehicular de dos dígitos diarios impulsada por el Ministerio de Transportes para la Ruta 160 y la Avenida Pedro Aguirre Cerda, luego del fatal accidente en la entrada de la población Boca Sur el pasado viernes.
Así, la determinación comenzó a regir este lunes a través de una marcha blanca que tiene como objetivo analizar el comportamiento de la población para una eventual aplicación. Funciona solo los días hábiles y en los horarios de 07 a 09 horas y 17 a 20 horas.
Héctor Silva, seremi de Transportes de la Región del Biobío, indicó que la observación de esta semana “nos permitirá seguir mejorando de forma permanente esta medida antes de ponerla en práctica de manera efectiva”.
Para ello, fiscalizadores se ubicaron desde las 7 de la mañana en distintos sectores del tránsito. “Respecto al transporte público regulado, podemos señalar que funcionó con normalidad durante esta mañana (lunes), llegando a casi mil buses operando en todo el Gran Concepción en la hora punta”, puntualizó Silva, agregando que hay una fiscalización “con especial cuidado del funcionamiento de las líneas San Pedro del Mar (23) y San Pedro (22)”.
El presidente de la Federación Intercomunal de Conductores del Biobío, Domingo Oportus, afirmó que “son medidas parches”.
De acuerdo a sus palabras, basta con observar lo sucedido durante este primer día de la semana. “Estuvo la ‘embarrada’. No sé si será por la marcha blanca, pero hubo un caos enorme en San Pedro. También pasa que el Biotrén no está operando hasta Concepción, y eso influye porque mucha gente prefiere moverse en vehículo para atravesar el Río Biobío, aumentando el tráfico”, apuntó.
Por eso, Oportus critica que “siempre cuando pasan accidentes pasan cosas pero, ¿si no hubiera pasado nada? Estaríamos igual. No sabemos si (la restricción de dígitos) va a dar el efecto que se piensa. Ojalá resultara pero, como uno trabaja en esto, lo ve complicado”.
En esa misma línea, Francisco Fresard enfatizó en que le llama la atención que “por un problema que hubo producto de una irresponsable maniobra de un conductor de buses, se tomen medidas de restricción vehicular. Es algo que no tiene un asidero técnico. Por otro lado, no se resuelve el problema de fondo, que es un indiscriminado aumento de la densidad urbana en ambos costados de la vía, sin ninguna planificación”.
El experto dijo que en nuestro país, sobre todo en grandes complejos urbanos donde se ha aplicado, la restricción no ha tenido efecto en contaminación, congestión o mayor uso del transporte público.
“Es una medida recurrente de las autoridades de turno pero nunca se han hecho estudios para probar su efectividad. Si yo bajo un 20% de los vehículos en esos horarios, la congestión se trasladará a después. La gente hará igual el viaje. Y esto se suma a los buses de acercamiento del Biotrén (por el cierre del puente ferroviario), cuya gran gracia es que tiene una vía exclusiva”, profundizó.
La población de San Pedro de la Paz, cuya entrada fue el sitio del suceso de la tragedia que dejó a siete fallecidos el pasado viernes, fue y seguirá siendo uno de los principales puntos de observación.
Bajo ese contexto es que dos banderilleros fueron incluídos al control del tránsito. Luis Bizama es uno de ellos, trabajador que comenzó su turno a las 06:00 horas y comentó que “el flujo de micros se vio bastante grande, debe ser porque todavía es marcha blanca. Todavía hay algunos que cometen imprudencias, pero se ve más cuidado de los automovilistas y microbuses”.
Bizama complementó que, por decisión de las autoridades, “generalmente cuando hay accidentes se llevan banderilleros a algunos cruces. Este antes no tenía y, al parecer, la idea es dejarlos de manera permanente y levantar una garita”.
Ruth, comerciante que se instala desde las 8 de la mañana en el cruce en cuestión, aseguró que pese a la nueva normativa “el ritmo de vehículos estuvo normal, no se vieron cambios. Las micros también anduvieron bastante”.
Sin embargo, de igual manera observó a Carabineros manejando el ingreso y salida de vehículos, además de mayor con consciencia de los conductores luego del accidente.