Ana María Badilla, gobernadora del Distrito Sur del Rotary Club en Chile, se refirió a las labores y desafíos de la institución.
Por Antonia Ortiz Hormazabal
Ana María Bobadilla es la actual gobernadora del distrito 4.355 de Rotary, el que contempla 104 clubes que se ubican desde Constitución hasta Puerto Williams.
Asumió el 1 de julio de este año y estará en el cargo por un año. En su visita a Concepción, dio a conocer los objetivos y la visión del organismo que trabaja mundialmente desde hace más de 100 años.
Rotary es una organización de servicios humanitarios que funciona a nivel mundial, es una red de ayuda donde profesionales se dedican a solucionar diferentes problemas que afectan a la sociedad. Algunas de las tantas visiones que tienen es fomentar la paz, combatir enfermedades, proporcionar agua potable, entre otras.
“En principio tienen que ser profesionales, empresarios o gente que tenga alguna habilidad, porque Rotary se trata de que gestionemos los proyectos de servicios a través de las profesiones de cada uno de los socios”, como detalla Bobadilla.
-El objetivo final de Rotary es lograr la paz en el mundo, esto lo hacemos a través de servicios humanitarios y conocimiento mutuo entre las personas. Por ejemplo, durante el periodo anterior se realizaron proyectos grandes para la prevención de la paz y ayudar a las víctimas de los conflictos bélicos.
Un caso específico es el caso de Ucrania donde se logró hacer un proyecto para dotar de un generador a un hospital de Kiev que había sido bombardeado.
-En el distrito hemos tenido varias mujeres en el cargo, aún no tenemos igualdad en el número de mujeres y hombres, pero se está trabajando en eso. Ya no es tema que asuma el liderazgo una mujer.
-Definitivamente creo que sí, porque tradicionalmente los gobernadores tienden a ser mayores, habían muchos que ya estaban jubilados. Por otro lado, el estilo de liderazgo también es distinto, nosotros tenemos que seguir la línea del presidente mundial que es Gordon McInally y una de sus prioridades es la salud mental.
-El año pasado tuvimos a la primera presidenta mundial, este año nos tocó un hombre, pero el próximo vuelve a asumir otra mujer. Yo creo que ya se derribaron las barreras en cuanto al género, ya que ahora se elige a la persona que esté más capacitada para desarrollar el liderazgo.
-La perspectiva que hoy se adopta es que se tienen que hacer proyectos de alto impacto en la comunidad y sostenibles. Hay que cambiar la visión de los proyectos asistenciales y realizar proyectos en los cuales la comunidad se vea involucrada. Por ejemplo, un club local realizó una subvención global para dotar de un laboratorio de inglés a una escuela necesitada.
-Rotary a nivel mundial tiene algunas subvenciones especiales para catástrofes naturales. El año pasado, nuestro distrito postuló a esa subvención y tuvimos recursos de más de 30 mil dólares y se fue en directa ayuda para los damnificados. Por otro lado, la organización tiene un comité de respuesta ante catástrofes y ahora se encuentran haciendo un catastro de lo que necesitan los clubes para canalizar la ayuda.
-Donde Rotary está más presente es en el área de educación, salud y agua potable. Por ejemplo, existen muchas zonas rurales que no cuentan con agua potable, por lo mismo, hay varios clubes que se han especializado en hacer estas subvenciones y en trabajar en conjunto con las municipalidades. Por el lado de la salud, lo último que se ha propuesto es construir una clínica de neurodivergencia. Finalmente, otro de los objetivos de Rotary es la erradicación de la poliomielitis.
-El objetivo es que sean más manos para trabajar, más gente entusiasta. Aquellos que quieran canalizar esa necesidad interior de servir a los demás, lo puede hacer a través de un club rotario.