Tal como estaba pronosticado el aumento de los caudales generó durante el domingo una serie de alertas rojas y avisos para abandonar sectores poblados en Quilleco y en el Salto de Laja, en la comuna de Cabrero. En tanto, los ríos Andalién y el Biobío se mantienen con monitoreo permanente.
De la tensa calma a la preocupación y a la acción. Así se puede resumir lo vivido en la región en la segunda jornada del evento meteorológico que ha tenido a las autoridades trabajando desde el pasado miércoles.
Y es que los cerca de 65 milímetros de promedio que han precipitado en la zona costera y del valle y los 150 aproximadamente que había llovido en la precordillera y cordillera causaron lo que se suponía que iba a ocurrir: el aumento en el cauce de los ríos, esteros y canales.
Por ello, la primera frase del director regional del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), Alejandro Sandoval, daba cuenta de lo intensa que sería la jornada.
“Efectivamente el día de hoy la situación de la Región es preocupante”.
Y para dejar claro que la situación por el aumento en los caudales de los cursos de agua debido a la lluvia era para estarlo, precisó que lo registrado casi dos meses atrás podía volver a repetirse.
“Hay un riesgo que los eventos de la última semana de junio se repitan, por lo tanto, hacemos un llamado a todas las personas que sufrieron afectación durante junio tomen las medidas adecuadas, para de alguna forma, poder mitigar la afectación a sus enceres”, señaló la autoridad.
Y fue así como durante la jornada de domingo se fueron sucediendo los cambios en las alertas pasando la Región de amarilla a roja por desbordes de cursos de agua, manteniéndose hasta el cierre de la presente edición la alerta amarilla por evento meteorológico. Y en esa línea el director regional de Senapred hizo un llamado a la prevención.
“Nos preocupa principalmente el cuidado de la vida humana, hacemos un llamado a las personas que están en zona de riesgo que fueron afectadas durante la última semana de junio, inicien algún proceso de evacuación preventiva, principalmente con los grupos de mayor riesgo, adultos mayores niños, sus mascotas y animales, para evitar situaciones de riesgo, tal como nos sucedió en el mes de junio, en el que lamentablemente, producto de que las personas realizaron un proceso tardío, se puso en riesgo la vida de los rescatistas, y no queremos tener que repetir esa situación”, aseveró.
Las primeras alertas involucraron a las comunas de Tucapel, Los Ángeles, Cabrero, Laja y Yumbel por el aumento de caudal del Río Laja. Lo mismo pasó con Antuco, Quilleco y San Rosendo. Nuevamente la postal del Salto del Laja con una enorme cantidad de agua cayendo por su cascada fue posible ver y obligó nuevamente a evacuaciones en dicho sector.
Por eso desde la Dirección de Aguas del ministerio de Obras Públicas (MOP) su director, Claudio Morales, expresó que se trata de un panorama en constante cambio.
“Esta situación es dinámica y, por lo tanto, estamos en continua coordinación con Senapred y las delegaciones presidenciales correspondientes para poder ir de forma oportuna anticipando la información de riesgo a la población”, dijo.
En este mismo sentido, Morales pidió a la comunidad que vive en el entorno de cursos de agua estar atentos en las próximas horas porque es posible esperar aumentos en los niveles.
“El llamado es mantenerse alerta todas personas que viven cerca de cauces naturales y artificiales de estas comunas que están con alerta informarse por los canales oficiales , tanto de Senapred, equipos de emergencia comunales”.
En tanto, el agua caída ya hace más de 48 horas provocó que en distintos puntos de la Región se provocaran problemas por deslizamientos o derrumbes como ocurrió en la ruta que une Tomé y Rafael producto de la caída de árboles. En el camino a Florida, hubo un deslizamiento de tierra, situación similar en el sector Villa Peluca en Antuco.
Por esta situación que ha ido aumentado en complejidad y puntos a intervenir es que el director de Vialidad, Juan Carlos Oviedo, planteó que esperan poder responder a todos los requerimientos, pero puede que tengan que responder a algunas situaciones antes y otras después.
“Los equipos están desplegados, estamos a capacidad máxima. En algún momento y es de esperar que eso no suceda pudiéramos estar sobrepasados y vamos a tener que dar las prioridades correspondientes para poder salvaguardar todas las aquellas necesidades que la población requiera”, dijo.
Junto a ello, y a propósito del accidente de tránsito registrado en la Ruta de La Madera que dejó como saldo una persona muerta y tres lesionadas, es que Oviedo pidió a las personas prudencia en los traslados dado que el viento y la lluvia se mantendrán al menos 24 horas más.
“Llamamos a los conductores a tomar todas las medidas de precaución, estamos en una condición climática adversa y somos responsables cada uno de conducir de acuerdo con esta condición, instamos nuevamente a que esto se pueda cumplir”, añadió.
Respecto a la provincia de Concepción y en particular a las comunas por donde cruzan el Biobío y el Andalién, el director regional de Senapred sostuvo que, si bien no es posible afirmar que ocurrirán grandes desbordes, es necesario estar atentos porque entre domingo y lunes se esperaba que precipitaran al menos 100 milímetros en la cordillera y que aumento en el nivel de los cauces habría.
“Si bien es cierto el punto crítico del Río Andalién es el sector del ex peaje Chaimávida, a la altura del kilómetro 10, porque ahí el río tiene una condición especial que hace que se desborde, el resto del río tiene una condición de riesgo menor, pero obviamente no podemos descartar que se pueda producir alguna situación. Por lo tanto, hay situaciones imponderables que hacen o nos requieren que estemos, muy atentos al comportamiento del río durante todo su curso en el Gran Concepción”, apuntaba Sandoval.
“También es de cuidado la situación que históricamente sucede en la comunidad de Hualqui, tanto la gente que está en la ribera del estero como la gente que está en la ribera del Río Biobío, en el sector sur de la ruta de la línea del tren. Lamentablemente está en una zona de inundación. Así que, si el río Biobío sigue aumentando su caudal, cosa que suponemos que así va a ser, pudiesen verse afectadas nuevamente”, manifestó el encargado de emergencias.
Este domingo llegó a la región el director nacional de Conaf, Cristian Little, como parte del despliegue del gobierno central. En su recorrido, que estaría centrado en visitar zonas agrícolas, aprovechó de recordar que todos los parques nacionales se encuentran sin acceso al público hasta que se evalúe los efectos del sistema frontal y la emergencia se de por superada.
“Los parques a nivel nacional están todos cerrados, cerrados hasta que dure la alerta que emite Senapred, hasta que dure la emergencia, así salió en la resolución así que ha informarle a todos los que querían ir a los parques que hay que esperar que pase la emergencia para poder ver el estado en que quedaron los parques las dependencias y todo eso. Están todos cerrados desde Valparaíso hasta la región del Biobío incluyendo los que están en la cordillera de la costa, aquí en el valle y los que están en la cordillera de Los Andes”, subrayó.
“Llevo seis años viviendo acá y me inundado tres veces. Las 3 veces han entrado como 30 a 40 centímetros (de agua) a la casa. La primera inundación perdimos todo porque no alcanzamos a sacar nada, eso fue el año antepasado, la inundación más grande que hubo, perdimos casi todo, las camas, todos los electrodomésticos, los muebles se echaron a perder, así que los perdimos, pero los recuperamos”.
Eso es lo que ha vivido Cristian Hunter, vecino del sector Chanco Sur o el Triángulo donde existe un grupo de familias que viven a un costado del Río Andalién, justo donde la Dirección General de Aguas tiene una estación de monitoreo del caudal.
“El problema consiste acá es que o profundizan en el río o hacen una contención, porque este es un problema de todos los años”.
“La gente creo que lo que quiere es vivir tranquilo y que nos hagan un muro de contención, evitar las pérdidas, porque acá se vive en estos días una incertidumbre tremenda. Hay ancianos y gente de la tercera edad que acá no duerme nada cada vez que llueve”, pedía en medio de la lluvia y con la vista puesta en los sacos de arena que el mismo colocó a la entrada de su casa y esperanzado en que los que había ubicado las autoridades más cerca del río contuvieran la crecida inminente.
Hasta el cierre de la presente edición eran en total nueve las comunas donde las clases se iban a suspender este lunes, según detalló la Seremi de Educación. Se trata de Yumbel, Antuco, Tomé y Quilaco quienes lo solicitaron a través de sus respectivos municipios. En el caso de Los Ángeles la suspensión fue requerida para la escuela Rinconada del Salto y el Liceo Llano Blanco y en Nacimiento no habrá clases en la escuela Toqui Lautaro, en estos tres casos la suspensión obedece a que se transformaron en albergues.
Mientras en Concepción habrá suspensión de clases en la Escuela Fundo Chanco, lo mismo ocurrirá en la escuela Pichilo de Arauco. Finalmente, en Hualpén, el municipio decidió suspender las clases para la jornada de este lunes en la escuela Alonkura, el colegio Villa Acero y el Liceo Pedro del Río Zañartu debido a las condiciones climáticas, se indicó. Así entonces, serán 66 los establecimientos educacionales en los que no habrá calses este lunes a nivel regional. En tanto, se informó que fueron 200 las viviendas evacuadas en la jornada por ingreso de agua, sumando mas de 900 personas afectadas.