Según los propios miembros de las comunidades, se requiere de mucho avance en el respeto de los derechos de las personas LGBTIQANB+.
En la Región del Biobío se registra 1,81% de casos de atropellos a los Derechos Humanos de la Comunidad LGBTIQANB+ según los datos del XXI Informe Anual de Derechos Humanos, Diversidad Sexual y Género en Chile 2022 (MOVILH) de un total de 1.046 casos en el país.
En el contexto del Día Internacional contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia, la directora Regional de SernamEG, Lissette Wackerling, señaló que “como Servicio trabajamos con la diversidad de mujeres y, precisamente son las mujeres de las diversidades sexuales, las que presentan mayor exclusión de las políticas públicas, por ejemplo, las mujeres lesbianas muchas veces son invisibilizadas en las prestaciones de salud. Las mujeres trans, en América Latina, su promedio de vida es significativamente menor producto de agresiones de terceros, porque son empujadas a comportamientos autolesivos o por complicaciones de salud. En Chile, el 43% de ellas no estudia, ni tiene trabajo remunerado producto de la discriminación. Por lo tanto, nos corresponde visibilizar y promover sus derechos humanos”.
El desglose de las diversidades afectadas por atropellos a sus derechos, demuestra que el 38% de los casos de discriminación afectó a todas las personas LGBTIQANB+, sin distinción, mientras el 13% dañó exclusivamente a lesbianas, el 19% a gays y el 30% a personas trans.
El último porcentaje demuestra que son las mujeres trans las que más se ven expuestas a estas situaciones de violencia y discriminación. En ese sentido, Fah Bastías, quien es relatora de charlas sobre diversidad, comentó que “actualmente se habla más con más libertad del tema. Pero no quiere decir que disminuya la discriminación y violencia hacia la comunidad. Eso se ve acrecentado ahora por la arremetida que han tenido los grupos más conservadores que instalan una resistencia”.
“En esta cultura tienden a clasificarnos según cómo nos vemos o cómo hablamos las personas trans, en el fondo usan eso como una puerta de acceso a la discriminación. Hay personas trans que simplemente van caminando en la calle y sufren violencia verbal y física. La concentración de esta violencia tiene que ver con las mujeres trans que ejercen el comercio sexual, este es un gran tema porque va de la mano con la discriminación laboral”, sostuvo Bastías sobre la intolerancia que sufren cotidianamente.
Fah Bastías relata que “es difícil andar libre y segura en una calle, en una discoteque, en un lugar público, estamos permanentemente con el miedo que nos puedan insultar, golpear, incluso asesinar”.
Todo lo anterior, según cuenta la activista significa que un desgaste de su salud mental, pero tampoco existen tantos profesionales preparados para atenderlas cómo corresponde. Y es por esas dificultades a las que se ven enfrentadas, que manifiesta que la comunidad está dispuesta a seguir defendiendo sus derechos.
En un acto de conmemoración de este día en Tomé, la delegada de Presidencial de la Región del Biobío, Daniela Dresner, indicó que “nos parece que es un día en que hay que ponerse a pensar en lo que ocurre con la violencia hacia la personas que se identifican de una manera distinta. El Gobierno ya inició un convenio entre el Ministerio de la Mujer y la Subsecretaría de Prevención del Delito para ver lo asociado a la violencia y prevenir casos, también atacar a la personas que comenten estás acciones violentas”.
Cabe mencionar que el Servicio de Salud Talcahuano con el Hospital Higueras que es referente nacional en el trabajo con personas transgénero. Al mismo servicio pertenece el Hospital de Tomé, cuyo director es Christian Carvajal, quien afirmó que “el Hospitral de Tomé ha avanzando y los sistemas de salud tienen que seguir avanzando para que haya una inclusión general, tenemos una forma de trabajar. Atender a todo el mundo sin discriminación y no generar estigma en la atención”.
Lorena Segura, seremi de la Mujer, manifestó que “desde el Ministerio de la Mujer trabajar en transversalización de la equidad de género hemos trabajado a través de distintas mesas el año pasado, trabajo coordinado Subsecretaría de Prevención del Delito entendiendo que una de las urgencias tiene que ver con la situación de violencia que viven las personas pertenecientes a las comunidades”.