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Terapias alternativas realizadas en la calle alertan a especialistas de la salud

Recomendación a la ciudadanía es no someterse a ellas,ya que pueden aumentar grado de una patología o lesión. Vértebras rotas, daños en discos lumbares, esguinces cervicales e, incluso, pérdida de movilidad son parte de los riesgos. Lo mismo ocurre en la acupuntura que se realiza sin certificación en que se pueden generar infecciones o aumento de una lesión si no se trata correctamente.

Por: Ximena Valenzuela 05 de Abril 2023
Fotografía: Carolina Echagüe

“Sufro mucho dolor de espalda. Hace 20 años que trabajo en una pesquera y debo hacer mucho esfuerzo. El dolor es fuerte y constante, así que decidí hacerme una terapia de quiropraxis, aprovechando que está barata y que es altiro, sin pedir hora”, dijo Carmen Sánchez de 53 años.

La sesión de quiropraxis a la que se sometió Sánchez no fue hecha en un centro médico establecido, ni tampoco por un profesional reconocido en la materia o que cuente con certificación en Chile, fue realizada en pleno paseo Peatonal, en Aníbal Pinto casi al llegar a Barros Arana, por un ciudadano peruano, que aseguró haber estudiado en Venezuela una especialización, y que cuenta con una camilla masoterapéutica básica para hacerlo.

“Doy terapias en la calle para que me sirva de publicidad. Si me compran los 2 aceites que yo mismo hago, mezclando árnica, eucaliptos y salicilato (…) los aceites valen $10 mil y si usted me los compra yo le hago la terapia gratis. En la consulta, ubicada en Colo Colo 346, es particular y la sesión cuesta $25 mil”, dijo Máximo Gris, quien asegura que los dolores musculares y de espalda se deben sólo a la falta de ejercicio y que basta con una sesión al año para modificar una condición que por mucho tiempo le ha exigido al paciente usar analgésicos.

“Me dolió un poco los movimientos que me hizo, sobre todo, el área lumbar. Me sentí un poco mareada (…) espero que me haga bien para poder continuar trabajando sin problemas”, comentó Sánchez.

Llamó la atención que Gris, durante la sesión, aseguró que una pequeña joroba que la mujer tenía en la parte alta su espalda correspondía a una hiperlordosis, a pesar que dicha patología corresponde a una curvatura hacia adentro en la zona inferior de la espalda, justo encima de las nalgas, pero no a la altura del cuello, lo que deja entrever de inmediato la limitación de sus conocimientos, más aún cuando dijo “la hiperlordosis, la joroba, se produce por estrés y por cargas emocionales”.

La situación encendió las alarmas entre especialistas de salud que advierten que quiropraxis u otras terapias alternativas, como la acupuntura en caso de ser realizadas por manos inexpertas, pueden causar graves consecuencias a la salud, lesiones permanentes en vértebras o daños en disco en el caso de la quiropraxis o, en el caso de la acupuntura, infecciones a la piel pueden surgir en el caso de uso de agujas contaminadas o mal esterilizadas.

El presidente del Colegio Médico, Germán Acuña, aseveró que actos quiroprácticos en las calles revisten una situación de alta gravedad para las personas. “Es un acto de alta irresponsabilidad, actos supuestamente terapéuticos sobre personas, actos que pueden dañar articulaciones o huesos. Eso requiere supervisión constante y permanente y acreditaciones permanente”, comentó.

Ajustes quiroprácticos


“En la quiropraxia se realizan movimientos de alta velocidad que pueden crear lesiones en las articulaciones, problemas musculares y ciertos tipos de esguinces cervicales, que pueden ser bastante graves, la gente queda mareada, con dolores y secuelas graves, incluso, la pérdida de la movilidad”, aseguró Angelo Placencia, kinesiólogo especialista en medicina integrativa.

El profesional que en su especialidad también utiliza la acupuntura aseveró que de no ser realizada por un experto “no sólo puede provocar una infección grave el uso de agujas, sino que puede agravar el problema que la persona tenga de ser mal utilizada”.

Agregó que en general en Chile la gente recomienda medicamentos o terapias alternativas sin tener claro sus alcances. “La tía de una prima de una amiga hizo un curso de fin de semana, pero no tienen las competencias para hacerlo (…) Este remedio me sirvió para el dolor de cabeza y lo recomiendan, la persona se lo toma y le provoca náuseas, vómitos, temblor en la noche. Esas cosas son como un chilenismo que puede implicar muchos riesgo y se debe evitar siempre”, dijo el especialista que realizó un diplomado organizado por el Colegio de Kinesiológos de Chile y el Instituto Prana Kine.

Juan Pablo Matamala, kinesiólogo de Clínica Biobío, explicó que los ajustes quiroprácticos, que pueden ser de alta o baja velocidad, buscan restaurar la relación normal entre las articulaciones, lo que contribuye, en muchos casos, a disminuir dolencias y entrega cierta sensación de alivio. “Pero una persona que lo está haciendo de manera informal, no tiene ninguna forma de asegurarse que lo que él va a hacer va a provocar ese beneficio”.

De hecho, aseguró que a pesar de todos los mecanismos de seguridad que pueda tener un quiropráctico han tenido complicaciones con sus pacientes. “Conozco un caso. Marcos Loloya, ex seremi de Deportes, que es kinesiólogo y osteópata se realizó un ajuste quiropráctico con un colega. Era un ajuste del cuello, que el creyó necesitar. La tensión le generó un trauma en una arteria y, prácticamente, él podría haber perdido la vida. Estuvo un par de meses en recuperación, afortunadamente no quedó con secuelas”, contó y agregó que nunca una persona se debe atender con alguien que no tenga la especialidad.

El valor, problemas de acceso o la inmediatez pueden, a juicio de Matamala, los motivos de por qué la gente se está tratando de esta forma tan inadecuada y de riesgo.

Paula de Orue, directora de Salud Pública de la Universidad de Concepción, aseveró que no se debería realizar ninguna actividad de salud que no esté reglamentada bajo los parámetros establecidos por el Ministerio de Salud. “Hacer este tipo de terapias en la calle (quiropraxia) en que no sabemos si la persona tiene formación o no es altamente riesgoso para quien la recibe. No sabemos quien la está haciendo”.

Lo que aquí debería ocurrir, aseguró la profesional, es que exista una denuncia ante la Seremi de Salud para que fiscalice y que concurra al lugar para ver si existe alguna autorización sanitaria o no, en qué condiciones se realiza y si cumple con curso para dicha competencia.
La acupuntura y la homeopatía, detalló, están reglamentadas y para ello, el profesional debe hacer una prueba para aprobar la actividad. “Dolor crónico, angustia, penas, la gente puede acudir a estas terapias alternativas que están normadas. Muchos centros de salud tienen estas terapias, especialmente, para gente que no responde al tratamiento habitual. Les va relativamente en el manejo de enfermedades”.

Sin embargo, el gran problema es cuando se realizan en la calle, pues no hay regulación alguna como la tiene una consulta médica con patente municipal y regulación sanitaria.

A pesar de la gravedad que puede revistir el problema, hasta el cierre de nuestra edición la Seremi de Salud no respondió a las consultas sobre riesgos, alcances y fiscalización que deben realizar.

Sin certificación

“En Chile la quiropraxia no está reconocida por el Ministerio de Salud, no es una profesión sanitaria. Hay programas de formación para profesionales universitarios, entre ellos los kinesiólogos, médicos u odontólogos, que lo da la Universidad Central y la de Santiago, donde le otorgan un título de quiropráctico, pero sin reconocimiento del Ministerio de Salud”, dijo Eduardo Tognarelli, presidente nacional del Colegio de Kinesiólogos.

“Cualquier persona en Chile que diga que es quiropráctico es sólo su palabra la que lo avala, más aún si es extranjero, porque al no existir la profesión de quiropráctico en Chile no existe convalidación. No puede cobrar por bonos de isapre ni puede trabajar con Fonasa porque no hay reconocimiento legal”, complementó.

Además cuando las personas se realizan terapias en las calles, los riesgos son mayores, dijo, porque no existe una entidad fiscalizadora ni una normativa que verifique sus acciones. “Lo único que le queda a una persona que resultara dañada es acudir a los tribunales (…) El kinesiólogo que atiende en una consulta es fiscalizado por la Seremi de Salud que revisa sus instalaciones, títulos, hay una fiscalización que da seguridad a la población. En cambio para una persona que dice ser quiropráctico legalmente no existe fiscalización”.

El presidente nacional de los kinesiólogos añadió que hay evidencias en revistas científicas que “hablan de riesgo de lesiones ante movilizaciones bruscas o de alta velocidad, que son algunas de las técnicas que realizan (…) Si una persona tiene una dolencia, que no ha sido estudiada y no conoce el origen no puede ponerse en manos de una persona que dice tener un título profesional. Es un riesgo tremendo, una lesión nerviosa o en un disco invertebral puede aumentar la lesión”.
Tognarelli agregó que se requiere actualizar el Código Sanitario en Chile, que tiene más de 100 años, y que permite que personas sin un título acreditado realicen este tipo de terapias.

Sólo atenderse en centros formales

Jessica Pereira Reyes, directora subrogante de la Dirección de administración de Salud de la Municipalidad de Concepción, aseveró que comparten la preocupación por las terapias alternativas que se están desarrollando en el centro penquista.

“Desde algunas semanas se visualizan en el paseo peatonal personas ofreciendo servicios de Quiropraxia. La Quiropraxia contempla, un razonamiento clínico del sistema neuromusculoesquelético en base a la evidencia y una visión integral del ser humano y su salud. En relación a este tema queremos hacer un llamado a los vecinos de Concepción a hacer uso de servicios de salud formales, que cuenten con las condiciones básicas para realizar estas técnicas”.

La directora (s) de salud municipal puntualizó que “quienes se dedican a entregar este servicio deben cumplir con lo siguiente: Contar con las certificaciones necesarias para realizar este trabajo., deben ser centros médicos establecidos que cuenten con Autorización sanitaria, entregada por la Autoridad Sanitaria, Seremi de Salud.

Agregó que deben ser profesionales del área de la salud que cuente con un segundo título, en donde se combinan las destrezas clínicas, con las disciplinas biológicas adquiridas en la primera carrera del área De la salud.

“Las sesiones de quiropraxia responden a un diagnóstico clínico, no se puede realizar sin una evaluación previa de un profesional del área de la salud, médico o kinesiólogo. Reiterar que realizar este tipo de técnicas en condiciones no seguras pueden producir lesiones mayores. Finalmente lo que se visualiza como la solución a un dolor muscular menor, puede tener como resultado severas lesiones de carácter permanente”.

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