La Subsecretaria de Educación, Alejandra Arratia, en visita a la Región del Biobío, participó de actividades en Tomé, Lota y Concepción. Se reunió en asamblea con los asistentes de la educación, escuchó sus observaciones y participó del reconocimiento a Braulio Castro, presidente Regional del Cuerpo de Bomberos y asistente de la educación, por su labor en la emergencia de los incendios en febrero.

En conversación con Diario Concepción, reafirmó el compromiso de no fusionar establecimientos educacionales en el proceso de reconstrucción tras los siniestros que afectaron a diversos recintos. También se refirió al Plan de Reactivación Educacional que contiene tres ejes: revinculación, convivencia y fortalecimiento de aprendizajes.

En cuanto a las escuelas destruidas por los incendios que tenían menor número de estudiantes ¿Existe posibilidad que sean fusionados?

No, nosotros no estamos pensando en fusionar escuelas ahora, para nada. Ese no es el diseño de reconstrucción. Es más, conversando con el equipo nos comentaban que algunas escuelas que tenían muy poquitos niños ahora están recibiendo más niños. Se produce un efecto especial, pasa algunas veces, cuando uno sufre situaciones muy difíciles que se produce más cohesión en ese espacio y han empezado a llegar más niños. No estamos haciendo un diseño que implique fusionar escuelas ni en esa zona, ni en otra.

¿Han detectado alguna baja de matrícula en la Región?

Estuvimos conversando sobre este tema en la reunión ampliada de instituciones del ámbito educativo, y pudimos ver que el año pasado se logró recuperar un número importante de matrículas de niños y niñas. Logramos recuperar algunos niños y niñas que no estaban matriculados en el año anterior y ha aumentado un poco la matrícula. En algunos establecimientos puede bajar, pero en general cuando uno mira el global ha aumentado. Confiamos que tiene que ver con el Tercer Eje del Plan Reactivación que es asistencia y revinculación educativa. Lo que hemos hecho es potenciar la búsqueda de estudiantes que no han estado necesariamente matriculados, por distintas razones en el contexto de la pandemia. Se produjo distanciamiento de los niños de la escuela, por razones comprensibles. La verdad es que nosotros sabemos que la suspensión de clases tenía un impacto muy fuerte especialmente sobre estudiantes que no tenían posibilidad de conectarse, que estaban más distantes del establecimiento y para ellos sostener el vínculo con la escuela era muy difícil.

¿Cómo se trabajó esa revinculación?

Los docentes, los equipo directivos hicieron un esfuerzo tremendo, lo hemos visto desde el Ministerio de Educación a lo largo del país. Asistentes de la Educación que iban a las casas de los niños a buscarlos, profesores, incluso equipos directivos. Inevitablemente la suspensión de clases tuvo un impacto y por eso ahora estamos haciendo muy fuertemente este proceso de revinculación y énfasis en la asistencia, no sólo queremos que vayan, sino que vayan todos los días. Que aprendan, lo pasen bien, que la escuela sea un espacio positivo para ellos, eso también es un recurso protector frente a la inasistencia. Cuando están motivados frente a lo que pasa en la escuela, ellos mismos piden ir, y por el contrario cuando tienen problemas de convivencia escolar y violencia los niños no quieren ir. A todos les puede resonar el caso de algún niño que no quiere ir a la escuela porque tiene un problema con alguien. Por eso es importante ver este problema desde una perspectiva bien integral.

¿Este Plan de Reactivación implica contratación de personal en la Región del Biobío?

Como parte del Plan de Reactivación, nosotros tenemos un recurso para contratar personas que puedan apoyar con los procesos de revinculación, efectivamente, eso es parte de lo que se aprobó. Que puedan apoyar el proceso que ya hacen las escuelas, esto es para todo el país, y eso tiene una bajada regional para contratar un grupo de personas. Los asistentes de la educación tienen un rol clave en eso, pero la idea es poder reforzar y apoyarlos.

¿Existe contratación de personal específico para la convivencia escolar?

Lo que pasa es que ahora hay legislación que indica que deben existir encargados de convivencia escolar en establecimientos educacionales por sobre 200 estudiantes con una contratación de 40 horas. Además, los establecimientos tienen que tener un plan de convivencia, es parte de la mirada integral que se le da al proceso educativo. Es bien importante que al final de día, lo que ha ido pasando, sobre todo después de la pandemia, que se ha generado tal conciencia y claridad respecto de la necesidad de abordar de modo más decidido o más profundo los desafíos de la convivencia, que en general los establecimientos educacionales están abordando esto y están teniendo una persona encargada de la convivencia escolar y existe además la dupla psicosociales. Y también lo conversamos en la reunión con los asistentes de la educación, por ejemplo, de la interculturalidad que se da producto, por un lado de a las distintas culturas que tenemos dentro de Chile y además múltiples que han ido llegando al sistema educacional con el aumento de los procesos migratorios. Vemos en las escuelas que eso genera un desafío. Eso requiere procesos formativos también para poder abordarlos queremos reconocer esa diferencia cultural, valorarla y darle cabida. En el fondo generar una escuela que sea más diversa intercultural donde eso se valore en contraste a querer que sea todos muy igual, estamos avanzando decididamente en una educación que reconozca esa diversidad que la valore dentro del proceso educativo.