Regional busca crear primer centro de cardiopatía congénita del sur de Chile

17 de Febrero 2023 | Publicado por: Ximena Valenzuela
Fotografía: HGGB

Permitirá descongestionar atención especializada que se concentra en Santiago. Hospitales que cuentan con resolución quirúrgica no estarían cumpliendo garantías GES de pacientes. El equipo del Guillermo Grant Benavente ya presentó proyecto al Ministerio de Salud y espera su viabilidad para ponerlo en marcha este año.

Uno de cada 100 niños nace en Chile con una cardiopatía congénita. Es decir, cualquier anomalía que afecte a la estructura, función o metabolismo del corazón. Una patología que involucra más de 65 tipos distintos de cardiopatías, algunas con mal pronóstico como la hipoplasia del ventrículo izquierdo en que no bombea la sangre al sistema y que si no se trata a tiempo puede generar la muerte del menor.

Si bien en Chile el 90% de los niños sobreviven a una cardiopatía congénita gracias a la especialización médica, el gran problema está en que los cinco centros del país, dos públicos y tres privados, están en Santiago. Todos tienen alta demanda y muchas veces, a pesar de ser un patología GES, no ofrecen una cobertura oportuna.

Los esfuerzos se están concentrando en determinar una cardiopatía congénita en el útero, a través de una ecocardiografía, y en operar a los niños en la primera semana de vida o máximo en 28 días.

De ahí la importancia de contar con un centro especializado en la materia en Biobío, tarea a la que el Hospital Guillermo Grant Benavente se quiere abocar para atender a los más de 50 casos que cada año deriva al Luis Calvo Mackenna, o bien, al Roberto del Río, únicos nosocomios públicos que cuentan con el sistema de atención habilitado.

“Las garantías GES no se están cumpliendo al 100% en este grupo de enfermedades. Hemos tenido rechazos de niños a los que solicitamos camas al Calvo Mackenna 2, 3 ó 4 veces. Cuando no ocurre solicitamos carta de rechazo para enviarlos a un segundo centro. Esta carta no aparece fácilmente y cuando aparece el segundo centro tampoco lo recibe. Por eso hemos tenido algunas defunciones en el año, de quienes no alcanzaron a recibir la operación. Con eso volvemos a lo que ocurría en los años 70 o previo al Auge”, afirmó Jaime Tapia Zapatero, pediatra y cardiólogo infantil del Hospital Regional de Concepción.

El centro local hace dos años trabaja en el proyecto, que ya fue presentado al Ministerio de Salud, para lograr atender a este tipo de pacientes y, así descomprimir la atención en Santiago, centrándose en cardiopatías de mediana y baja complejidad y dejando así, las de mayor complejidad a los centros capitalinos.

“Esperamos que el proyecto se consolide este año. Tenemos equipos afiatados, que realizan diagnóstico pre natal, fetal y además somos centro de referencia Obstétrico del sur de Chile. Contamos con un cirujano cardiaco que está formándose hace más de un año en Bélgica para operar congénitas. Tenemos anestesistas para dar cirugía con bomba de infusión extra corpórea a niños menores de 20 kilos y 6 cardiólogos en nuestro centro, además de 3 ó 4 en la Región. Podemos perfectamente montar un sistema de turnos que garantice 24/7 la asistencia de cardiología intensiva”, destacó Tapia Zapatero.

El Regional, tanto por su alta especialización en cardiocirugía, como por el control intensivo pediátrico es, según el facultativo, el único centro que cuenta con las condiciones para ponerlo en marcha y cerrar la brecha que sólo existe en el área de cardiopatía congénita y en gran quemado de sobrevida excepcional que por falta de camas igual se tratan en la zona.

“La formación es de 5 ó 6 años por eso queremos dedicarnos a las cardiopatías congénitas de mediana y baja complejidad. Nuestro equipo ha dado las muestras suficientes con más de 600 by pass coronarios al año y recambios valvulares”, cirugías más complejas que las que pretenden realizar, situación que les deja en buen pie, sólo falta la viabilidad política, agregó.

Primer caso abordado por GES

Josefa Rivera Guajardo nació el 3 de septiembre de 2002, y el 5 del mismo mes, el neonatólogo del Regional Hugolino Catalán, que en ese entonces era director del Regional, le diagnosticó cardiopatía congénita. Ingreso a la UCI pediátrica y 24 horas más tarde fue trasladada al Calvo Mackenna lugar en que cuatro días después le realizaron la cirugía. Todo salió bien, contó su padre Rodrigo Rivera, quien agregó que 17 días después ya estaba de regreso en Concepción con control permanente de cardiólogos y pediatras del Regional.

“El Auge estaba debutando y sabíamos poco, nos preocupaba la cuenta que tendríamos que pagar por traslado, tratamiento y operación. Cuando nuestra Jose estaba fuera de peligro fui asustado a pedir la cuenta, sabíamos que serían más de $8 millones, pero me presentaron una boleta por $7, pagué con una moneda de $5 y dos de $1. Me explicaron que ella era paciente del Auge”, dijo y agregó que su hija creció sana y ahora es alumna de segundo año de Odontología en Concepción.