Protocolo del SAG detalla que la disposición de cuerpos es tarea de los dueños. Más de 60 cerdos calcinados en Santa Juana fueron apartados del predio que albergaba el criadero. Entregarán cal para enterrar animales menores, a fin de evitar mal olor y presencia de vectores.
Cientos de animales, mayores y menores, resultaron muertos producto del avance del fuego en la Región, situación que no sólo deja de brazos cruzados a los campesinos, pues muchos de ellos aportaban a la economía familiar, sino que también pone a la comunidad en riesgo, pues los cuerpos calcinados de vacas, caballos, cerdos y ovejas, entre otros, que no han sido debidamente enterrados, podrían generar una crisis sanitaria e, incluso, contaminar las napas subterráneas de las que se abastecen de agua.
De ahí la importancia de hacer un correcto retiro y entierro de los animales muertos, tarea de la que por decreto del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) está a cargo de los dueños, pero debido a la complicada situación, los municipios se están haciendo cargo, especialmente, de los animales mayores, retirándolos y disponiendo de terrenos para enterrarlos en caso que las familias no tengan espacio para ello.
Susan Angulo, encargada de Zoonosis del municipio de Santa Juana, afirmó que una de las más complicadas situaciones en materia de muerte de animales se vivió en el sector Curalí en un criadero de cerdos en el que murieron cerca de 60.
Desde el miércoles, dijo, se están desplegando equipos a los sectores afectados para realizar el retiro de animales mayores, por ejemplo de los que estaban en vertientes. “En el caso del criadero de cerdos no se podían sepultar en el predio de la familia porque el espacio libre era una quebrada. Fueron trasladados a un terreno alejado del sector que fue dispuesto por Forestal Arauco”, dijo y agregó que en este tipo de casos el municipio dispone de una retroexcavadora y un camión para realizar el traslado.
Los animales pequeños que resultaron muertos deben ser enterrados por sus dueños. Para ello distribuirán entre los afectados dos toneladas de cal, elemento que evita emanación de olores del cuerpo en descomposición.
Jorge Constanzo, alcalde de Hualqui, comentó que en el sector de Gomero resultaron fallecidos cerdos, corderos y ovejas que quedaron atrapadas por el fuego, animales que fueron retirados por el personal de Aseo y Ornato.
Debido a que la emergencia sigue en curso, aún no tienen un balance total del número de animales que resultaron muertos producto del fuego, “pero sabemos que la mayoría son ovinos y caballares”, comentó.
Cabe destacar que el protocolo del SAG indica que los animales deben ser enterrados lo antes posible y, en caso de retrasarse en dicha tarea los cuerpos deben ser rociados con algún producto repelente para evitar presencia de vectores y animales carroñeros.
El documento destaca que los animales deben ser enterrados en zonas alejadas al menos en 50 metros de cuerpos de aguas y 250 metros distantes de los puntos de captación de agua para el consumo humano.
Rodrigo Flores, médico veterinario y coordinador de Zoonosis de la seremi de Salud, afirmó que se ha hecho un levantamiento de la situación con los municipios en las que se ha reportado situaciones que son acordes a la emergencia, con mayor o menor complejidad desde el punto de vista de maquinarias y operarios. Reconoció el caso de Santa Juana como uno de los más complicados y aseguró que hasta el momento no existen focos de insalubridad reportados formalmente.