Seremi de Salud del Biobío visitó locales de la Vega Monumental en el marco de la fiscalización. Llamó a consumir carnes de locales establecidos y a fijarse en la cadena de frío, color y olor del producto, y a evitar la contaminación cruzada al preparar las comidas.
La Seremi de Salud del Biobío finaliza el año 2022 con un Programa Especial de Fiscalización enfocado en productos cárnicos, el que busca asegurar la inocuidad de diversos tipos de carne en su producción y distribución para prevenir enfermedades entéricas y transmitidas por alimentos en mal estado.
Las principales enfermedades que se pueden contraer por consumir carne en mal estado son gastroenteritis e infecciones, que si se agravan pueden comprometer la vida.
El plan, pensado especialmente para la protección de la ciudadanía durante las fiestas de fin de año, abarcó las 33 comunas de la Región y realizó un total de 276 fiscalizaciones. En base a estas, se cursaron 12 sumarios sanitarios y fueron decomisados 231 kilos de carne, todos en la provincia de Concepción.
“Muchas veces hay ruptura de cadena de frío, o no tenemos claridad de la procedencia. Hay una serie de otros elementos que estamos habitualmente evaluando para poder darle tranquilidad a la población de que pueda disfrutar las fiestas de fin de año con tranquilidad, evitando infecciones y enfermedades”, sostuvo al respecto Eduardo Barra, seremi de salud.
La principal recomendación a la hora de comprar productos cárnicos, es acudir al comercio establecido y autorizado.
El seremi de Gobierno, Eduardo Vivando, complementó: “quiero hacer un llamado a que las personas separen las carnes del resto de los alimentos, y cuando los estén preparando, utilicen implementos diferentes para los productos cocidos y crudos, para evitar la contaminación cruzada”.
Al momento de comprar, las autoridades recomendaron poner atención a las cadenas de frío, buscar una coloración rojo brillante, sin otras tonalidades, y olor característico. De lo contrario, evitar la compra del producto.