En diciembre del próximo año EFE tendrá el resultado del estudio básico de este proyecto. De esta forma, se pretende tener los primeros números a esta más que centenaria idea que reflota debido a la actividad de Vaca Muerta.
La presentación realizada por la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE) la semana pasada como parte de una actividad convocada para dar a conocer la realización de dos estudios, uno de ellos relacionado con un corredor que una el Gran Concepción con el Límite con Argentina, sorprendió, no porque la idea sea nueva, sino porque se invertirán recursos en averiguar si esta iniciativa, con más de cien años de anhelo, puede materializarse y a qué costos.
Trasandino Sur, así se llama el proyecto que busca ser un corredor que una las costas del Gran Concepción con Bahía Blanca, al otro lado de la cordillera, teniendo un área de influencia o “hinterland” que incluye a las provincias de Neuquén, Río Negro, La Pampa y Mendoza.
En esa perspectiva, el presidente del directorio de EFE Sur, Juan Antonio Carrasco, señaló que dado que este proyecto a estado dando vuelta por años entre los actores del sector logístico en ambos países, es mejor objetivarlo y ver cuáles son las condiciones necesarias para hacerlo viable.
“Partimos con un estudio básico que va a tener los primeros números indiciarios, recolectar la información previa, va a actualizar lo que ocurre actualmente en términos del potencial que tenemos en términos del transporte de carga Trasandino y ese es el objetivo. Es poner los números, la conversación, y que de aquí a un tiempo más, un año aproximadamente, con este estudio básico podamos tener esa conversación ya con números puestos, con escenarios y con los actores regionales nuevamente y ver qué estrategia seguir. Más que decir se puede o no se puede, es cómo esto se hace factible o qué otras preguntas u oportunidades va abriendo este estudio”, sostuvo el representante de la ferroviaria estatal.
Y es que la idea de un tren que cruce Los Andes, más o menos a la altura del paso Icalma -que podría ser una de las opciones- y que luego conecte con la línea sur de EFE y pudiera alimentarse de un potencial puerto terrestre a la altura de Victoria (también viejo sueño logístico en La Araucanía) ha sido empujado en los últimos años por los gobiernos locales del Biobío y de la provincia de Neuquén.
Incluso la propia embajada chilena en Argentina ha realizado seminarios sobre esta idea, buscando entusiasmar a los gobiernos centrales de ambos países y a consorcios que pudieran “empujar este carro”. Es más, el propio gobernador regional Rodrigo Díaz participó años atrás, en uno de ellos, cuando el embajador era José Antonio Viera-Gallo y donde también estuvo Nelson Hernández, actual gerente general de EFE Sur.
Y en marzo pasado, como parte del programa del II Encuentro Nacional de jefes de división de Infraestructura y Transportes de Gobiernos Regionales, un representante de la agencia de promoción de inversiones del gobierno neuquenino, expuso el proyecto dado el interés que concita y que involucra a un amplio territorio de la macrozona centro-sur chileno-argentina.
Por ello Oscar Ferrel, precisamente jefe de división del Gore Biobío, cree que en este proyecto hay una tremenda oportunidad.
“Generar una red ferroviaria regional que sea capaz de soportar que el día de mañana Argentina saque una parte de sus producción por acá, que la sexta y séptima regiones empiecen a sacar carga por acá, eso requiere tener conexiones ferroviarias, resiliencia ferroviaria, motivar al sector privado para que desarrolle inversiones y también desarrollar ciertos incentivos para que esas cosas pasen, porque el día que dejemos solo a EFE Sur a cargo del tema, no va a existir competencia , no va a existir un efecto dinamizador y yo creo que el Gobierno Regional con esta nueva configuración tiene herramientas para hacer un elemento diferenciador”, aseveró Ferrel.