Consultas por respiratorias se han triplicado con respecto a 2019. Avanza vacunación contra la influenza, pero la fórmula contra el coronavirus para niños de cinco a siete años sigue baja.
Si bien, según especialistas, la Región goza de un período de bonanza en lo que respecta a contagios de coronavirus, ahora existe una nueva amenaza, los virus respiratorios propios del invierno que podrían copar las camas críticas que antes usaban pacientes con Covid-19.
Hace un par de semanas la Seremi de Salud ya alertó de un aumento en virus respiratorios, contabilizando 70.395 consultas , que triplicaban las registradas en 2020 y 2021. “Vimos que aumentaron los “contagios del virus sincicial y esto es preocupante por el impacto que tiene en toda la población, especialmente, en menores que pueden presentar cuadros de insuficiencia respiratoria, que muchas veces termina en hospitalización”, dijo Eduardo Barra, jefe de la cartera.
Hasta el momento se han reportado 784 virus, 350 corresponden a virus sincicial y 94 casos de adenovirus, entre otros, cifras que, a juicio del seremi, al compararlas con las de 2020 y 2021 pueden resultar muy significativas, pero que al compararlas con 2018 y 2019 son similares.
Ahora bien, el punto de inflexión en la baja de contagios de enfermedades respiratorias durante el primer período de la pandemia habría estado dado, principalmente, por el confinamiento, así como por las medidas de prevención como el uso de la mascarilla, distancia física y lavado constante de manos para evitar el alza de infectados.
Precisamente el aumento de los contagios de enfermedades No Covid-19 fue el que motivó al diputado Eric Aedo, miembro de la Comisión de Salud de la Cámara, a expresar su preocupación a la autoridad sanitaria, pensando en la tensión que dichas patologías podrían generar tensión en la red de atención pública, que actualmente cuenta con 19% de disponibilidad, tanto en UCI como en UTI, y consultó a la autoridad sanitaria sobre la preparación que existe para enfrentar una situación como la antes descrita.
El seremi afirmó que hay dos situaciones que preocupan en el aspecto sanitario: la mayor circulación de los virus de la influenza y el adenovirus, entre otros, y la disminución de la percepción de riesgo respecto a la Covid-19, razón a la que atribuye que la vacunación del virus sea más lenta en escolares, que requieren un permiso de sus padres para ser inmunizados.
De hecho, la vacunación en menores de 5 a 9 años tiene un 27,9% de adherencia. Eso sí, en la última semana se logró vacunar a 2017 menores con la dosis de refuerzo, gracias al apoyo prestado por el vacunatorio móvil, la Seremi de Educación y los colegios para que incentiven el proceso.
El parlamentario agregó que la falsa sensación de seguridad que existe “nos puede llevar a cometer errores, por eso hay que insistir a las familias que autoricen la vacunación de sus hijos en los colegios”.
La baja en la vacunación es complicada, pues podría generar, a juicio del seremi Barra, una caída en la inmunización de los menores que genere nuevos brotes de coronavirus, situación que se complicaría ante la coexistencia de más de 700 virus circulando, los que podrían tensionar los centros de salud. Aunque aseguró que el sistema está preparado para enfrentar la demanda que exista en las próximas semanas y el invierno.
Jorge Yáñez, broncopulmonar de Clínica Biobío, afirmó que “con la flexibilización de la mascarilla vamos a tener un retorno en las alzas de los virus, que prácticamente, no se detectaron en 2020, pero que ya en 2021 aumentaron y probablemente ahora será aún más, al tener más contacto entre las personas y mayor posibilidad de transmisibilidad del virus”.
La influenza es uno de los virus que más puede complicar en invierno a la población, hasta el último reporte se contabilizaban 147 casos, de ahí la importancia de la vacunación que en la Región ya cuenta con un 57% de la población inoculada, es decir, más de 400.000 personas.