Su modelo podría ser replicado en otras cuencas del país, destacando la recuperación y educación que entregan. Se realizó una feria para que diversas instituciones o agrupaciones dieran a conocer su trabajo.
El Programa de Recuperación de los Servicios Ambientales de Ecosistemas de la Provincia de Arauco, conocido como Prela, que busca la mantención y recuperación de los servicios ecosistémicos que aportan la cuenca del lago Lanalhue para aumentar la competitividad del territorio, fue reconocido a nivel nacional por sus aportes.
Y es que el programa, que nació en 2016 a partir de la preocupación e inquietud de habitantes del Lago Lanalhue -financiado por el Gobierno Regional y ejecutado por la Seremi de Medio Ambiente- ha aportado a la articulación de actores locales para crear acuerdos socio-ambientales e instrumentos de planificación territorial que incorporen como base el funcionamiento ecosistémicos de las cuencas.
De hecho, el trabajo de Prela fue ampliamente reconocido en la primera jornada dedicada a conmemorar el Día del Lago, realizada recientemente en Villarrica, convocada por el municipio lacustre y la Vigilantes del Lago, agrupación que aseguró que el modelo de Prela es replicable y adaptable a otras cuencas del país.
“Sin la comunidad no hay gestión posible, no hay gobernanza posible. En ese sentido, es muy destacable la experiencia del proyecto Prela, generando una mesa de trabajo. Creo que es un programa extraordinario”, reconoció Víctor Durán, vocero de Vigilantes del Lago y además organizador del Día del Lago.
“Es un proyecto complementario a lo que nosotros estamos haciendo acá en Villarrica. Este lago fue declarado saturado y ahora se está elaborando un plan de descontaminación. Muchas de las medidas de este plan son las que ya está haciendo Prela. Destaco mucho lo que han hecho en restauración; también en educación ambiental, donde tienen una cantidad enorme de material muy relevante, que lo más probable es que nosotros ocupemos también”, agregó Durán.
Pamela Cuevas, coordinadora de Prela, aseguró que se trata de “un modelo replicable, porque ya es una metodología que hemos piloteado. Entonces, hoy día podemos decir qué experiencias funcionan y cuáles no. El resultado 0 también es un resultado y de esa forma podemos decirle a personas de otras cuencas, por ejemplo si vamos a hablar de floras nativas,, qué es lo primero que se debe hacer”.
Al interés de otras cuencas por replicar o adaptar el método probado por Prela, se sumó también la aprobación de empresas, marcas o agentes de cambio, que agradecen la labor educativa realizada durante estos primeros años del programa.
René Silva de la empresa Ecofiltros, aseguró que Prela es un aporte. “Hay un intercambio bien grande de conocimiento, experiencia y el poder mostrar a la comunidad el producto es bien importante. Nos hemos dado cuenta de que cuando no hay un conocimiento de las personas en los proyectos que desarrollamos, se produce una animadversión contra las soluciones. Mientras más informadas estén, van creyendo en los procesos de restauración del agua y de los lagos”, destacó.
En Villarrica se realizó una feria, abierta a todo público, que sirvió para que diversas instituciones y agrupaciones mostraran distintos métodos para mejorar la salud de los lagos, ya que todos muestran un avanzado deterioro.
“En general, estas ferias sirven mucho para bajar la información, para entregar conocimiento que de repente es complicado hacerlo de forma más sencilla, en un lenguaje más coloquial, pero fidedigno. Además, sirve por ejemplo para aumentar el interés de los niños. Si aumentamos el interés, finalmente vamos a tener ecosistemas más protegidos y conocidos por la ciudadanía”, destacó María Cecilia Jiménez, representante de la Seremi de Medio Ambiente de Biobío.
La profesional integró el stand de Prela, compartiendo su experiencia, logros y avances en materia de conservación, restauración a escala de paisajes y soluciones basadas en la naturaleza.
“En estas instancias, compartimos experiencias de educación, restauración y mejoramiento de la salud de los lagos, humedales y ríos presentes en estas cuencas. Compartir experiencias de restauración comunitarias que son tan importantes, porque de esta forma las personas van tomando consciencia de cómo es posible conservar y restaurar estos espacios y los distintos ecosistemas que están presente en estos paisajes”, agregó Cuevas.