Flexibilización del barbijo podría aumentar enfermedades respiratorias en colegios. Seremi de Salud recordó que en todo espacio cerrado se debe usar el protector y alcalde penquista llamó a la responsabilidad de la comunidad.
El uso obligatorio de la mascarilla, decretado en abril de 2020 para prevenir el contagio de la Covid-19, no sólo permitió a la comunidad protegerse del nuevo virus, sino de múltiples otros que afectan a la población, principalmente, en otoño e invierno. Sin embargo, según especialistas, esa realidad podría cambiar radicalmente con la flexibilización de la mascarilla.
En 2020, según datos aportados por la Seremi de Salud, al comparar con la semana 18 de 2019, las consultas de urgencia se redujeron de 147.055 a 104.267 y las hospitalizaciones bajaron de 2.833 a 1.920.
Sin embargo, tras la vacunación masiva y la falsa sensación de seguridad al compartir con amigos y familiares sin mascarilla las enfermedades respiratorias aumentaron en 35,2% en 2021 al compararlo con el año anterior, pasando de 162 a 219 virus circulando, la mayoría Adenovirus y Parainfluenza.
Ahora el panorama es más complicado. Sólo en lo que va corrido del año se han registrado 70.395 consultas por enfermedades respiratorias, es decir, casi se triplicaron con respecto a las 20.999 de 2021.
Casi 600 virus han sido detectados en los centros centinela de la Seremi “Se evidencia un fuerte incremento de la circulación viral”, dijo Barra y detalló que 278 corresponden a virus respiratorio sincicial; 147 a influenza A, 101 a Parainfluenza, 67 de Adenovirus y uno de Metapneumovirus.
La autoridad sanitaria llamó a la comunidad a vacunarse contra la influenza, proceso que en la Región ya alcanza el 41% de cobertura con 289. 561 personas inmunizadas y que se extenderá hasta el 16 de mayo buscando alcanzar el 85% de la población objetivo.
Además de la vacunación contra la influenza, el doctor Barra recomendó evitar el frío, la contaminación intradomiciliaria y sobre todo, mantener el uso de mascarilla en lugares cerrado y en espacios abiertos donde no se tenga un metro de distancia entre las personas.
Si bien, la comunidad usa la mascarilla en lugares públicos como el centro comercial o supermercados para protegerse de la Covid-19, la mayor exposición al virus se genera, según la epidemiolóloga Paz Macaya, en el espacio familiar e, incluso, en lugares de trabajos en que las personas lugares donde las personas han decidido cuidarse menos debido a la fatiga pandémica.
El mayor problema en la flexibilización de la mascarilla, según la especialista del Hospital Las Higueras, serán los contagios de enfermedades invernales que se darán entre los estudiantes que podrán, según dijo la ministra de Salud, María Begoña Ayarza, prescindir de la mascarilla si las comunidades educativas así lo determinan.
“En los últimos años, el uso de mascarillas nos protegió contra el coronavirus y también de otros. Chile prácticamente no tuvo casos de influenza ni de virus sincicial en los últimos años (…) hay niños que no conocen esos virus y no sabemos como van a reaccionar frente a ellos”, comentó Macaya.
El alcalde de Concepción, Álvaro Ortiz, dijo que la liberalización de la mascarilla responde al conocimiento que se tiene del virus, así como también al proceso de vacunación y aseguró que ahora la responsabilidad está en manos de la comunidad, vale decir, ocuparla en espacios cerrados y en lugares al aire libre donde no se garantice el distanciamiento físico.
En las últimas 24 horas Chile registró 2.742, 11.363 activos y 5 % de positividad, mientras que la Región presentó 239 confirmados y 1.173 personas que pueden contagiar y una positividad diaria de 4,8%.
Cabe destacar que la OMS indicó que la propagación del coronavirus seguirá siendo vista como una pandemia y agregó que no se debe bajar la guardia en la prevención de contagios del coronavirus, pues ya se detectaron en África y Europa dos nuevos sublinajes de la Covid-19, llamados BA.4 y BA.5.