Autoridades universitarias destacaron la falta de claridad respecto a las políticas del Mineduc en relación con estas instituciones. El rector de la UdeC, Carlos Saavedra, enfatizó que las universidades agrupadas en el G9 han permitido la descentralización del país y han sido motor de desarrollo en las regiones.
El rol de las universidades con vocación pública y cuál será el trabajo que pretenden entablar con la nueva administración fueron parte de los temas que abordaron en una primera reunión protocolar la Red de Universidades Públicas no Estatales G9 y el Ministerio de Educación.
Tras la cita, donde seis de los nueve rectores del grupo participaron de forma presencial, el ministro Marco Ávila comentó que “hemos podido compartir visiones sobre el estado de la educación superior e ideas de cómo mejorar las relaciones entre el Estado y las universidades del G9”.
El presidente de G9 y rector de la Universidad Católica de Temuco, Aliro Bórquez, valoró el encuentro y dijo que “partimos con una conversación franca tanto por parte de ellos como nuestra, logramos plantear las principales preocupaciones que tenemos, porque sentimos que no ha habido un verdadero reconocimiento y valoración del trabajo que hacen las universidades del G9. Salimos con una sensación de preocupación, porque no vimos mucha claridad. No sabemos como el proyecto de las universidades del G9 va a poder seguir sirviendo a los interés del país, como lo ha hecho hasta ahora”.
Bórquez añadió que “se va a seguir trabajando, en forma franca y directa. Nos invitaron a continuar en este diálogo, ya que tanto el ministro como la subsecretaria entienden que el aporte de nuestras universidades es importante al desarrollo del país”.
El rector de la Universidad de Concepción (UdeC), Carlos Saavedra, indicó que no debe olvidarse cómo se desarrolló el sistema de educación superior en Chile, donde seis universidades que hoy integran la Red G9, más dos casas de estudios estatales, fueron las que dieron vida al sistema universitario en el país. Varias de estas instituciones se formaron por clamor popular de la ciudadanía, tal como fue el caso de la UdeC.
Por esta razón, dijo, “un gobierno que se debe a los movimientos sociales, y que surge en los movimientos sociales, debiese tener una comprensión más profunda de la conceptualización de lo público en educación y esperamos ir construyendo confianzas a lo largo del tiempo de manera que podamos ir mostrando este sentido histórico del desarrollo del sistema universitario, así como el rol que han tenido estas universidades, su aporte al desarrollo y a la función pública en nuestro país”.
Saavedra agregó que universidades como la que encabeza y las agrupadas en el G9 “han permitido la descentralización de nuestro país, han sido motor de desarrollo en las regiones y han propiciado, por lo tanto, los avances y la generación de mejores condiciones para los habitantes de nuestro país”.
El rector de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (Ucsc), Christian Mellado, complementó que “en esta reunión pudimos plantear como las universidades del G9 tienen cabida en el plan de gobierno, el diálogo fue bastante franco y nosotros debemos levantar una agenda de trabajo donde podamos demostrar la contribución que hacemos en nuestras regiones. El Estado tiene un rol con sus universidades, pero también debe reconocer nuestro rol y así queda demostrado, por ejemplo en la asociatividad de nuestras casas de estudios, nosotros nos hemos asociado para contribuir al desarrollo de la región”.