La alcaldesa de Tomé, Ivonne Rivas, junto a la Fundación Cultural de Coliumo y el Sindicato de Trabajadores Independientes de dicha localidad costera acudieron a la corte de Apelaciones de Concepción a presentar un recurso de protección “por movimientos de tierra de grandes proporciones por parte de particular , específicamente en Peñón El Morro.
A juicio de los denunciantes habría peligro “ de que esta situación provocará en la fuente laboral de pescadores , mariscadores y algueras”.
A este compromiso, “se suma las denuncias a la Superintendencia de Medio Ambiente y también a la Conaf”, se precisó.
“Este movimiento de tierra de grandes proporciones está socavando el Peñón, está volteando los árboles que por años han soportado el cerro que sirvió como defensa natural durante el terremoto del 27 de febrero de 2010, salvando vidas, embarcaciones y fuentes de trabajo”, se argumentó ante el Tribunal.
Por otro lado, aseveraron que “al caer la tierra al mar, se transforma en sedimento que impide a las algas realizar la fotosíntesis. Por lo tanto, no pueden alimentarse los moluscos y el recurso muere o se va del lugar. Esa es la preocupación que tienen los sindicatos de pesca y algueras de la localidad de Coliumo, cuyas áreas de manejo están ubicadas precisamente en las faldas del Peñón El Morro, donde realizan su actividad económica”.