Guachacas y su labor en ayuda de aquellos invisibilizados por la sociedad

Ante el aumento de la pobreza en la Región necesitan sumar apoyo, para ir en ayuda de Tomas y Campamentos, además de inmigrantes y sus hijos. Salud Mental, vulnerabilidad y violencia, son las principales problemáticas que destacan.

“Ayudar al prójimo”, esa ha sido la consigna que viene desarrollando, desde el 2019, el movimiento Guachacas Concepción. Si bien en un principio sólo se abocaban a personas en situación de calle, desde que se desató la pandemia de Covid-19 extendieron su labor social a tomas, campamentos y personas inmigrantes presentes en la provincia, debido a la hambruna que trajo el desempleo.

En ese sentido, han venido desarrollando iniciativas para ir en apoyo de estas personas, porque el frío de este invierno caló hondo en los asentamientos precarios, afectando directamente a los niños que viven en ellos.

Es así cómo, además de haber repartido dulces y entretenimiento para el Día del Niño, están requiriendo alimentos y abrigo enmarcados en el que denominaron “Mes de la Niñez”. Para ello iniciaron la Campaña de la Leche, de Abrigo y de Libros, las cuales han tenido un gran éxito, gracias a las redes colaborativas que tiene la agrupación. Sin embargo, se necesita ayuda constante, para hacerlo de forma permanente.

“Este año implementamos un gimnasio en un colegio de Hualqui, que si bien no se está usando, este tiempo es bueno para empezar adelantar espacios para cuando los niños vuelvan a clases, obras que igual estamos desarrollando en otras escuelas rurales de la comuna. También, como muchas personas quedaron incapacitadas a raíz de la enfermedad de Covid-19, conseguimos camas clínicas e insumos necesarios para ellos”, detalló la líder de Guachacas Concepción, Claudia Valdés.

Tomas y Campamentos

Si bien este año no se están realizando tantas ollas comunes, como el 2020, la agrupación sigue gestionando alimentos, ropa y apoyo médico para ir en ayuda de quienes viven en estos asentamientos precarios.

“Esto, porque han surgido problemáticas de salud mental y situaciones de violencia y vulneración que han afectado a niñas y niños, por lo que estamos monitoreando y necesitando ayuda médica. Hemos hecho levantamientos, para ver las necesidades de las mamás y sus hijos, para sumar a más personas en su ayuda, para ello, hemos hecho alianzas con organizaciones como Hogar de Cristo, como también con particulares que nos han aportado insumos”, comentó Valdés.

Desde la agrupación han estado apoyando de forma constante a la toma “Villa el Sol”, presente en el sector de Las Salinas en Talcahuano, donde a diferencia de los campamentos, los niños que ahí habitan sólo lo hacen por el día, ya que por las noches deben irse a casas de familiares o de redes de apoyo.

“Lo que se da, porque hay que tener claro que al ser las tomas ilegales, no tienen agua y servicios básicos, por ende, que ellos pasen las noches sin eso tan básico, es considerado vulneración de derechos. Aquí, al no haber colegios abiertos, pasan el día con sus padres y se conectan a clases, a través del celular, campaña que igual hemos desarrollado, porque no todos tenían teléfonos, donde hemos recibido bastante apoyo”, explicó la dirigente social.

Valdés agregó que, “esto lo extendimos a Los Ángeles igual, donde también estamos creando redes colaborativas para ir en ayuda de otras familias vulnerables, porque la pobreza creció bastante en este tiempo de pandemia, lo que es lamentable”, aseguró.

Apoyo a inmigrantes

Considerando el aumento de población inmigrante que ha llegado al Biobío, principalmente venezolanos, que han venido escapando de la realidad social de su país, se incrementó la cantidad de personas en situación de calle, esto porque después de venderlo todo, quedaron sin recursos en el camino.

“Conscientes de esta realidad, hemos desarrollado la Ruta Calle Migrante, porque hay muchas mujeres con hijos en las calles, lo que es muy crudo. Hemos marcado los territorios, detectando casos y gestionando ayuda, porque al no tener recursos ni documentos, porque cruzaron la frontera ilegalmente, están en estado de urgencia y con una carga emocional muy grande, porque no tienen la ropa adecuada, ni comida y leche para sus hijos”, enfatizó Claudia Valdés.

En ese sentido, sin descuidar el compromiso con los campamentos y tomas, han estado gestionando dichos recursos, como la Campaña de la Leche para estos niños. “Ellos por temor no se acercan, ya que al no tener papeles temen ser deportados, ahí junto al Hogar de Cristo hemos podido darles techo este invierno, además de prestarles apoyo emocional”, contó la vocera de Guachacas.

Agregó que, “esta semana nos topamos con una familia que cruzó a pie el desierto, con tres niñas, dos de ellas muy pequeñas, ellos venden dulces en el centro, con lo que a duras penas costean el hostal donde se están quedando, que les cobra $18.000. Estos días han sido bien duros para ellos, por lo que les estaban dando leche con maicena a sus niñitas. Les conseguimos alimento y ropa adecuada, además de pañales. Una de las pequeñas tuvo un ataque de asma, tuvimos que llevarla al médico, no lo están pasando bien y como ellos hay muchos más”, aseveró Valdés.

La organización está en camino a convertirse en una Fundación sin fines de lucro, por lo que necesitan apoyo de profesionales del área de la salud, que puedan colaborarles con atenciones en los asentamientos precarios y con los inmigrantes indocumentados. Además, todos aquellos que quieran hacer donaciones, los pueden contactar al Whatsapp +56982648539, como también al correo: guachacasconcepcionbiobio@gmail.com, en el Facebook “Guachacas Concepción” e Instagram “guachacasconcepción”.