Ocho metros cuadrados por persona en centros comerciales, al menos un metro y medio entre escritorios de alumnos en colegios y sólo 47 cupos disponibles en el Teatro de la Universidad de Concepción, a pesar de contar con 1.106 butacas, son parte de los distanciamientos necesarios, según el Plan Paso a Paso, para evitar la propagación del coronavirus.

Distanciamiento seguro que en la única parte que no se cumple es en el transporte público, especialmente, en hora punta con máquinas llenas y personas de pie.

“Es complicado porque uno se arriesga a contagiarse, espero micros que vengan con poca gente, uso guantes y mascarilla, pero es inevitable que se llenen, nadie controla el número de pasajeros. Creo que me encalillaré en un auto para ir tranquila a trabajar”, dijo la contadora porteña Mónica Castro que a diario viaja a Concepción.
El distanciamiento que pide Castro no es posible, según ha explicado Transportes, pues para definir un número mínimo de usuarios se requeriría de 2.000 buses para el Gran Concepción, el doble de los existentes para movilizar a la misma cantidad de personas.

Por eso el plan Paso a Paso ahora recomienda que las personas que usen buses, ferrocarriles y taxis se use mascarilla quirúrgica y tengan alcohol gel para desinfectar sus manos y definió como obligación contar con las ventanas, escotillas o sistemas de ventilación abiertos.

Sin embargo, las recomendaciones del plan no son suficientes, aseguró la epidemióloga de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Maritza Muñoz, pues deberían ser obligatorias, incluyendo el alcohol gel y la toma de la temperatura de los usuarios, desinfectar las máquinas con amonio cuaternario o alcohol y obviamente “se necesita distanciamiento social, mayor a metro y medio de distancia y eso es imposible en el transporte público”.

La especialista agregó que la variante india se contagia sólo en segundos, así que las precauciones deben ser mayores. “La variable Delta y Épsilon están aumentando cada día en Chile, así que es necesario tener mayor precaución porque ambas disminuyen la eficacia y efectividad de las vacunas”, dijo.

La seremi (s) de Salud, Isabel Rojas, afirmó que es importante que los usuarios del transporte público no se saquen la mascarilla en ningún momento, por ejemplo, para comer o beber. En cuanto a esta exigencia la Seremi ha realizado 2.800 fiscalizaciones que han arrojado nueve sumarios sanitarios. La limpieza y desinfección de los buses también es controlada por la autoridad, ya se han realizado 220 fiscalizaciones. “Con todas las medidas deberíamos tener un recorrido mucho más seguro”, comentó.

Uso de guantes, esperar buses más vacíos, no sacarse la mascarilla son medidas a las que, según la seremi, animan a todos los usuarios para protegerse aún más.

El seremi de Transportes, Jaime Aravena, dijo que si bien a la autoridad sanitaria le corresponde la fiscalización de la locomoción pública, su cartera siempre está sobre las empresas para que los conductores exijan el uso de mascarilla, dispongan de alcohol gel para los usuarios y para que ventilen, medida en la que los usuarios deben colaborar sin cerrar las ventanas.

Recalcó que en lo que va corrido de la pandemia no han “tenido que cerrar un terminal de buses o una línea producto de un contagio. Eso habla bien de las medidas. Otra parte importante es la sanitización que se debe hacer en cada viaje”.

En viajes de dos horas, o más, las personas deberán usar mascarilla quirúrgica de tres pliegues o superior, entregar identidad y número de contacto para realizar seguimiento en caso de brotes.

En el caso del transporte escolar a los pasajeros, que deben subir con las manos lavadas con agua y jabón, se les tomará la temperatura y se les aplicará alcohol gel, se les exigirá uso correcto de mascarilla ajustada y no tendrán autorización para consumir alimentos en el trayecto. Los conductores deberán mantener una lista diaria de pasajeros.

Aumentan brotes

En las últimas 24 horas se registraron sólo 51 casos, la cifra más baja desde el 21 de mayo en que hubo 48 positivos y sólo 810 casos activos, lo que a juicio de la seremi (s) de Salud, muestra una mejora en las cifras, pues desde la semana pasada Biobío tiene una positividad de 2%, pero aseguró que hay que tener claro que seguimos en pandemia.

Los cuidados no deben dejarse de lado, especialmente, en reuniones familiares que constituyen la mayor cantidad de brotes. Según explicó la jefa de Salud Pública de la Seremi, Cecilia Soto, de los 307 activos esta semana, 69 más que la semana pasada, el 69% de los brotes son familiares, 20 puntos porcentuales más que en el último informe entregado hace siete días.