El trabajo para que desertores de la educación vuelvan a las aulas en Biobío

06 de Mayo 2021 | Publicado por: Mauro Álvarez
Fotografía: Cedida | Fundación Súmate

Más de 2 mil estudiantes están fuera del sistema, como efecto de la pandemia. Fundación Súmate, del Hogar de Cristo, los está apoyando para que vuelvan a estudiar. Mineduc enviará proyecto al Congreso.

El Ministerio de Educación a inicios de abril dio a conocer que 186 mil niños y jóvenes, de entre 5 y 21 años, abandonaron el sistema escolar en 2020, como efecto colateral de la pandemia de Covid-19.

Efecto que continuó este 2021. A nivel nacional: cerca de 40 mil estudiantes no se matricularon en ningún establecimiento, siendo en su mayoría hombres (53%). Las mujeres alcanzaron un 46, 17% de deserción, siendo primero medio el nivel con las peores tasas de abandono, con 7.048 bajas.

En Biobío, según datos de la Seremi de Educación, 2.340 jóvenes dejaron de estudiar, de los cuales 1.244 corresponden a hombres y 1.097 a mujeres, y al igual que las cifras nacionales, fue en primero medio donde más se reflejó la deserción (453).

Una labor social

El crítico contexto educativo se vio en mayor medida en los sectores más vulnerables, lo cual evidenció la Fundación Súmate, dependiente del Hogar de Cristo, que en Biobío busca motivar a los jóvenes para se reintegren a la escolaridad.

Para ello, están trabajando en un programa socioeducativo en Concepción y junto al colegio Nuevo Futuro de Lota, para lograr el reingreso de los jóvenes a las escuelas.

“El programa socioeducativo es una oportunidad concreta para jóvenes que están fuera de la escuela. Les entrega una variada oferta online de talleres socioemocionales, artísticos, culturales y acción social; todo esto con el fin de que alumnos puedan reconocer sus talentos. La idea es reforzar sus intereses para que no vuelva a dejar el colegio”, destacó Súmate.

Tal es el caso de Nicolás Martínez (15), uno de los 2 mil jóvenes que quedó fuera del sistema.

“De lunes a viernes, de 9 a 12:30 de la tarde, estoy conectado en clases. Así de comprometidos están los profes. Es que como voy a ser papá no puedo perder este año, por eso estoy recibiendo ayuda de Súmate, me mandan WhatsApp con ejercicios, me traen guías, todo para que no pierda el año escolar ahora que mi bebe es prioridad”, reveló.

En el caso del colegio Nuevo Futuro, están llevando clases online con éxito. “La mayoría de nuestros niños no tienen Internet, sólo acceso a redes sociales. Entonces la directora destinó parte del presupuesto de locomoción para comprar minutos para sus celulares. Como nosotros no les estábamos dando locomoción, les compramos tiempo en Internet”, explicó la jefa de la Unidad Técnica Pedagógica (UTP), Margot Gutiérrez.

Desde la Seremi de Educación, con el fin de mejorar las bajas estudiantiles, han estado implementando medidas, las que incluso escalarán al Congreso.

Así lo detalló el seremi Felipe Vogel. “Además de medidas de retención y apoyo escolar, el Ministerio enviará un Proyecto de ley de reingreso educativo para que jóvenes de 12 a 21 años, que llevan dos años o más fuera del sistema, puedan reinsertarse en el sistema escolar y puedan terminar de buena manera sus estudios”, comentó Vogel.

Aumentar recursos para mejorar la educación

El diputado del Distrito 20 e integrante de la Comisión de Educación, Sergio Bobadilla (UDI), dijo que la realidad de Biobío, si bien no es diferente a la del resto del país, no deja de ser preocupante y es el Gobierno, junto al Ministerio de Educación quienes deben dar soluciones.

“Nuestra demanda ha sido sistemática, se debe aumentar la cobertura a los sectores rurales y, por cierto, entregar elementos tecnológicos a niños que no tienen la posibilidad y con quienes estamos al debe. Se debe hacer el mayor esfuerzo para que tengan acceso. Se deben aumentar los recursos para educación, no mantenerlos, ni bajarlos porque la pandemia nos mostró las deficiencias que tenemos respecto a la educación en Chile”.