Patrimonio industrial genera preocupación en las comunidades
05 de Enero 2021 | Publicado por: Daniel Nuñez Durán
Tras el comienzo de la demolición de la Fiap en Tomé, agrupaciones de la Región manifestaron que cuidar la historia del Biobío “es vital”.
Intensas han sido las últimas semanas para las comunidades patrimoniales de la comuna de Tomé y la Región del Biobío, zona donde se ubica una gran parte del patrimonio industrial textil del país. En noviembre el edificio histórico de la Fábrica Ítalo Americana de Paños (Fiap) fue demolido en varios metros de su fachada principal, ante la impotencia y estupor de la ciudadanía. Tal decisión fue tomada por la empresa de salmones, Camanchaca, actual propietaria del recinto, y con la autorización de la municipalidad de Tomé.
Ante la demolición de una sección textil, la organización “Arquitectxs Autoconvocadxs Biobío”, recordó que “Fiap es una de las pocas obras arquitectónicas de estilo Art decó de nuestro país, pieza única que fue parte de los conjuntos industriales más australes del mundo en fabricación de telas en el período de auge de la manufactura textil, siglo XIX y comienzos del XX”.
La organización también destacó que ante riesgo de derrumbe lo correcto “sería reforzar estructuralmente el edificio y no demolerlo, tal como lo exige la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones en el artículo 2.5.1”.
Consulta a la comunidad
“Sabíamos que Camanchaca proyectaba obras al interior de Fiap. En agosto (2020) solicitamos una reunión con la empresa, a través de una carta formal que nunca fue respondida. El patrimonio debe ser valorado y respetado en cualquier proyecto de desarrollo, con consulta a las comunidades”, señaló Carolina Lara, presidenta del Consejo Comunal por el Patrimonio de Tomé.
Desde el reciente atentado patrimonial al edificio histórico de Fiap, se han efectuado diversas actividades que manifiestan la energía y conciencia por la herencia cultural textil, presente entre las distintas generaciones de Tomé.
Durante las últimas semanas las actividades de movilización patrimonial han sido intensas, diversas y constantes. Asambleas comunitarias, visita en terreno por concejala de Tomé, Francisca Zúñiga (PC) y consejero regional del Biobío, Javier Sandoval Ojeda (Igualdad); velatón patrimonial, jornada pintado de lienzos y una asamblea intergeneracional donde jóvenes dialogaron con trabajadores textiles históricos de Fiap.
Javier Sandoval, consejero regional del Biobío, quien llegó hasta la comuna, a pocos días de la demolición de Fiap, comentó que “es muy necesario invitar a las organizaciones de Tomé al Core del Biobío, para exponer sus puntos de vista sobre el tema patrimonial y también realizar una visita a terreno con el fin de establecer las proyecciones de esta problemática, donde la empresa Camanchaca demolió sin antes presentar un estudio y consultar a la comunidad”.