El intendente, Sergio Giacaman, solicitó sumarios a la seremi de Educación y a la gobernación de Concepción, luego que funcionarios de ambas reparticiones fueran detenidos en horario de toque de queda, en presunto estado de ebriedad y portando cajas del programa Alimentos para Chile. Además, la máxima autoridad pidió el cese de funciones de los involucrados.
El hecho ocurrió en avenida Colón, Hualpén, cuando se fiscalizó el vehículo conducido por Álvaro Toledo, coordinador de Orden Público y Gestión Territorial de la gobernación, quien en supuesto estado de ebriedad se opuso a la detención y a la alcoholemia, según personal de la Armada. Su copiloto, el jefe provincial de Educación, Mario Signorelli, fue detenido por infringir el toque de queda. Ninguno tenía salvoconducto.
El gobernador Robert Contreras, rechazó la conducta de los funcionarios, afirmando que “nadie puede estar por sobre la ley”.
Ambos detenidos fueron formalizados por infringir el artículo 318 del Código Penal y se establecieron tres meses de investigación. No obstante, la detención se declaró ilegal y se descartó aplicar medidas cautelares. El defensor, Ricardo Terán, explicó que detención fue ilegal, pues infringir el toque de queda no es delito y conducir en estado de ebriedad sólo lleva a apercibimiento.