En caso de dolor agudo, inflamación o infección, se debe consultar. La saliva y los aerosoles que generan procedimientos favorecen el contagio de virus.
El COVID-19 se transmite, principalmente, a través de las secreciones respiratorias, emitidas a al estornudar o toser. La saliva es la vía más frecuente de contagio. Por ello, el gremio de cirujanos dentistas que atiende urgencias, tanto en Cesfam como en clínicas privadas, puso en marcha una serie de medidas de prevención contra el virus que en la Región llega a 135 casos.
La saliva es la vía más frecuente de transmisión en humanos y puede replicarse de manera abrupta y progresiva en las vías aéreas superiores, pudiendo diseminarse por el aire aún cuando no se presenten síntomas, a diferencia de otros virus como el SARS.
Esto hace que el colectivo de especialistas, “así como asistentes dentales, estén altamente expuestos a contraer y difundir la enfermedad debido a la gran cantidad de aerosoles mezclados con saliva que generan muchos de los procedimientos que se realizan en la boca de un paciente”, explicó María José Muñoz, directora de la carrera de Odontología de la Universidad Andrés Bello (Unab).
El gremio dental ha instruido, a través de un protocolo, una serie de medidas preventivas que deben realizar, antes y después de la atención dental.
Mónica Troncoso, presidenta del Consejo Regional Concepción del Colegio de Cirujano Dentistas, afirmó que como gremio nacional consideran que son uno de los sectores que más corren riesgo por COVID-19, “así como el que existe para los pacientes por las secreciones, la saliva, otro punto importante es que trabajamos a una distancia muy cercana con el paciente y, además, trabajamos con aerosoles. Cuando ocupamos la turbina y el micromotor eso tiene aerosoles, por lo que la dispersión de cualquier virus es muy amplia. Eso no se ha tomado en cuenta lo suficiente por la población y las autoridades”.
Actualmente, dijo, se está realizando un llamado a todo el gremio local (600) para que sólo realicen urgencias, vale decir, dolor constante e intenso que no pasa con analgésicos por 12 horas; abscesos o flemones con inflamación del rostro y cúmulo de pus; muelas del juicio que hacen proceso infeccioso. Todos temas que si no se tratan se pueden complicar.
Antes de tratar una urgencia, según Muñoz, es importante que los pacientes llamen previamente a la consulta para valorar la gravedad e inmediatez de la atención, planificar la atención y garantizar que exista una distancia con otros pacientes en la sala de espera.
Troncoso agregó que cuando el paciente se presenta en la clínica se debe consultar si tiene riesgo de COVID-19, síntomas, posibles contactos, evaluar la gravedad de la urgencia y tomar la temperatura para determinar el grado de riesgo que implica la atención y las medidas que se deben tomar.
“Se toman medidas preventivas para el profesional como para el asistente dental, que es parte del equipo y para el paciente”. Han implementado box especial, con todas las herramientas, para atender sólo en un lugar al usuario -que debe lavarse las manos antes y después de ser atendido- y así evitar contaminar otras áreas y evitar contagios.
Mascarillas de distinto grosor dependiendo del riesgo que implica el paciente, protección ocular, como antiparras, guantes, gorras y delantales desechables son necesarias para atender una urgencia. Se esterilizan los equipos en autoclave, que actúa a altas temperaturas por lo que mata cualquier virus.
La directivo afirmó que cerca del 60% de los integrantes del gremio tienen las clínicas cerradas, pero que se necesita que el mayor número deje de atender, porque se trata de salvar vidas y priorizar el bien común por sobre la economía familiar.
Como saben que les afectará duramente, el Colegio está abogando para que quienes funcionan en forma privada reciban algún subsidio del Gobierno, similar al seguro de cesantía, que se aplicará al resto de los servicios. “Si tuviéramos la orden ministerial, la gente podría decir cierro y así tengo una subvención para pagar a la secretaria y al asistente. Eso es algo que nos tiene muy preocupados y que esperamos tenga pronta solución”.
A nivel de Cesfam, detalló Rosario Bustos, directora de salud municipal de Concepción, en los seis centros: Pedro de Valdivia, Juan Soto Fernández, Lorenzo Arenas, O’Higgins, Tucapel y Santa Sabina, que cuentan con 129 mil usuarios en total, están atendiendo sólo urgencias dentales que están asociadas al dolor, inflamación e infección o fractura de pieza dental.
Se suspendieron las atenciones de tratamientos, como una forma de resguardar al usuario y a los profesionales, que funcionan con escudos faciales, que cubren hasta el cuello, guantes y batas, todo desechable.
Cabe destacar que los Cesfam funcionan desde las 08:00 horas y hasta las 17:00 horas. Tras ese horario, las atenciones se realizan en el Sapu Dental del Consultorio Tucapel, desde las 17:00 horas a 20:00 horas, tradicionalmente es hasta las 22:00 horas, pero fue modificado tras el toque de queda.