Política interna del Sename permitirá que los jóvenes residan en un espacio con las condiciones necesarias para desarrollar una vida familiar.
Una gran noticia recibieron 30 jóvenes que pertenecen al Cread Nuevo Amanecer de Andalién. Y es que después de varios meses de arduo trabajo, encabezados por el Sename regional, los menores se trasladarán a dos modernas residencias familiares en el centro de Concepción.
El cambio de casa se debe a una nueva política interna de la institución, que nació a raíz de experiencias, levantamientos internos e informes con apoyo de organismos internacionales, que concluyeron que existía la necesidad de un cambio en la forma de trabajar en términos de intervenciones residenciales para jóvenes que han sido gravemente vulnerados en sus derechos.
Dadas estas circunstancias, el Sename Bío Bío comenzó a trabajar rápidamente en la búsqueda de dos lugares aptos para recibir a los internos del Nuevo Amanecer.
“Fue difícil encontrar una casa donde pudieran vivir 15 personas. Fueron varios meses de búsqueda, hasta que encontramos lo que andábamos buscando. Invertimos más de $400 millones para acondicionar ambas residencias, de acuerdo a las necesidades de los chicos”, explicó Ximena Morgan, directora regional del Sename.
Raphael Sierra P.
La residencia familiar del centro de Concepción cuenta con todos los recursos necesarios para que los jóvenes desarrollen sus vidas lo más cotidianamente posibles.
En el lugar, existen 9 dormitorios completamente equipados y 8 baños. Además, cuenta con una cocina, el sector de lavado de ropa, una amplia sala de estudios, living, comedor, sala de estar y un patio para que los 15 varones que habitarán la residencia tengan espacio para relajarse y disfrutar al aire libre.
La otra residencia, que se encuentra hacia el este del centro de la ciudad, contará con espacios similares.
Serán 26 las personas contratadas por Sename quienes trabajarán con los menores y estarán con ellos en el día a día. También, habrá un espacio completamente equipado para ellos.
“Hemos hecho cambios paulatinos y progresivos mientras aún estamos en el sistema Cread. Estamos trabajando para que los muchachos se vayan adaptando al cambio que significará el proceso a residencia familiar. Valoran mucho temas cotidianos como el comer todos en la mesa al almuerzo. Es algo que para ellos simboliza un nuevo comienzo”, explicó la directora de la residencia, Andrea Salas.
Para el futuro, también, se está trabajando en la búsqueda de dos nuevas residencias para trasladar a las niñas del Cread Capullo, de Chiguayante.
“De aquí a fin de año, esperamos tener dos nuevas casas para mujeres. La idea trabajar en base a este mismo método, que ya nos está dando resultados”, manifestó Ximena Morgan.